Capítulo 28: Parte dos.

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Pensamientos de Katherine:

Ver a Alice sosteniendo el arco de mi tía Leanor fue en serio una delicia, un momento tan inesperado que lo hizo aún más valioso, se le notaba diferente con su cabello un poco más largo, su aura llena de vida seguía siendo su carta de presentación, tan solo el semblante de su rostro estaba cambiado, aunque conservaba la jovialidad también algo en ella demostraba seriedad que nunca vi antes supuse que ser madre la cambio.

—Lamentó haber interrumpido así y no dejar que vieras tu Castillo, o conversaras con tus amigos, pero esto es mucho peor de lo que pensé, debemos llegar cuanto antes a mi Castillo alguien nos espera —anunció Lisa mientras íbamos en el carruaje.

Casi no puse atención a la conversación que tenían, pues mi mente seguía clavada en ese momento en el que vi a Alice, fue como si ese año se redujera en tan solo un instante.

Al llegar al Castillo Villehardouin fuimos recibidos por un séquito de monjas que tras saludar a Lisa nos condujeron al estudio que se encontraba en el tercer piso.

—¿Y aquí no vive nadie? —averiguó Nina.

—Hace mucho que está desocupado, como quedó bajo mi resguardo lo usó para reuniones y para el convento —explicó Lisa.

Todo el espacio estaba muy organizado, los cuadros, las cortinas era como estar en un sitio perfecto.

—Cuando regresé de Francia me aburrí de vivir aquí, por eso me mudé al Centro, pero como pueden darse cuenta mi Castillo familiar aún guarda mucha vida —expresó Lisa cuando abrió las ventanas para dejarnos ver el cielo gris que quedó después de ese diluvio, los campos y las montañas eran el paisaje que poseía tan imponente estructura.

—Se nota que este lugar es de los Villehardouin, siempre sofisticados —comentó Katy que apareció a un lado de la ventana.

Vi cómo al estudio entró un hombre no muy alto, de complexión robusta y hombros anchos, quien nos vio con seriedad.

—Soy el informante de Lady Lisa, esperaba que llegaran antes al Castillo —dijo.

—Tuvimos que hacer una parada de emergencia, recibí tus cartas, así que, por favor, explícanos qué sucede —indicó Lisa que se sentó en su escritorio, Nina se acomodó junto a mí en el mismo sofá y Darlene se quedó de pie junto a la ventana.

—Bien, como sabrán, hay una organización llamada Los Aliados que se dedica a hacer negocios con demonios, he estado investigando en todas las fuentes posibles para dar con alguno de ellos, hasta que al fin se me informó que el demonio Roz de la vanidad visitó hace unos días a John Clementine el secretario de educación de Pendingrin, él es nuestra única pista que quizá nos llevé a lo que de verdad importa saber; quién está detrás de todo esto —explicó el informante.

—Debemos ir por ese hombre —comentó Nina.

—Sí lo capturamos con vida, haremos que confiese —dije.

Lisa comenzó a hablar para darnos muchas indicaciones de lo que haríamos.

Pensamientos de Alice:

Cuando crucé la puerta de entrada de la casa de Nadmi ella me vio con una sonrisa.

—Supongo que la viste —murmuró.

—Sí, ¿y tú? —pregunté.

—Me la encontré en el camino, nos saludamos y me presentó a esa preciosura llamada Nina —exclamó Nadmi.

—¡Todos creen que es hermosa! —expresé irritada.

—¿Acaso no te lo parece? —indagó.

—Eso que importa —respondí y cerré la puerta de mi habitación.

PendingrinWhere stories live. Discover now