Capítulo 77: Hormigas.

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En un gran balcón había un solo hombre viendo al horizonte con una taza de té en la mano.

De un segundo a otro su cara cambió a una de disgusto y la taza se pulverizó bajo unas llamas totalmente negras.

¿Por qué seré tan inútil?... Esas eran las únicas palabras que cruzaron la mente del ser en la cima de todo lo demás.

-Pov Rio-

¿En verdad todo lo hice mal?

[Sin respuesta]

No... No, era una pregunta real...

Desde aquí podía ver y oír lo que hablaban Lilith e Izu... Izu está llorando... ¿Soy tan mal padre?...

[Advertencia, se sugiere controle su ira... Está erradicando regiones.]

¿Y a quién le importa?.

[Ya no serán habitables... Jamás.]

¿Y?

[Yo... Yo le recomiendo que se controle...]

¿Y de que servirá?.

[Evitará perdidas futuras y podrá ver su error.]

Si, si ya.

Mientras estaba lamentando mis fallos una dulce voz sonó a mi espalda.

Hanami - No sirve de nada lamentarse si no haces nada para cambiar... Deberías intentar hablar con ella.-

Rio - ¿Y que le digo?... ¿Hola, soy tu padre te confiné a estar encerrada durante mil años por un error que cometí yo?...-

Hanami - No, solo intenta hablar con ella... ¿Como crees que está viva aún? ¿No que viviría a lo mucho quinientos años?... ¿No le enseñaste un método para extender su vida?.-

Rio - Que lo usara no significa que me aprecie...-

Hanami - Al menos te toma en cuenta.-

Rio - Si, si.-

Hanami - ¿Me das un espacio?.- Dijo quitando mi mano de mis piernas para sentarse ella.

Rio - Sabes me gustaría estar así y solo ser feliz...-

Hanami - Tienes esposas muy buenas y hermosas, consideradas bellezas en todos lados, tienes más riquezas que cualquier ser y el poder absoluto... ¿Que más necesitas para ser feliz?.-

Rio - Jajaja... No lo sé... Siento que algo me falta... Me siento vacío.-

Hanami - Yo me siento vacía y no ando quejándome.-

Rio - Jaja ¿Desde cuándo te volviste así?.-

Hanami - Desde que me acerqué a tí... Me corrompiste... ¿Tomas las responsabilidad?.-

Rio - Con gusto.-

Antes de darnos cuenta ya había luz.

Rio - ¿Por qué los días son tan cortos?.-

Hanami - Y yo que sé... Ah y anda a ver a Aron, está como un niño.-

Rio - Quiero ver a mi nieto.-

Hanami - Pero no te olvides de tu hijo.-

Rio - Si, si.-

Hanami - Chao, prepararé unas hamburguesas ¿Quieres?.-

Rio - ¡Claro que sí!.-

Después de eso ella se fué.

Al frente de mi las sombras pasaron de ser bidimensionales a tridimensionales para luego estallar como una burbuja y de allí salió Malekith.

Rio - ¿No es muy vistoso?.-

Malekith - Pero no causa mareos, no sé como usted puede teletransportarse sin más.-

Rio - Me sonrojas.-

Malekith - Mi señor, hay unos dioses que quieren verle.-

Rio - Ya lo sé, son bastante además de eso acaban de llegar... No tienen ni una hora de haberse convertido en dioses.-

Malekith - Además de eso parecen venir con intenciones violentas... Aunque ninguno supera el rango medio...-

Rio - Que gracioso, bueno vamos al salón del trono.-

Malekith se paró para salir por la puerta, pero lo tomé del hombro y nos teletransporté a el salón del trono.

Rio - ¿Te estás acostumbrando?.- dije al ver a Malekith sin el casco y con una mano en la boca.

Malekith - Señor... Eso... Eso... Es malvado.-

Rio - Si, claro...- Recuerdo que en una ocasión torturó a unos nobles corruptos... ¿Yo soy el malvado?.

Malekith - Evan y Las guardianas deben estar de camino junto con las señoras.-

Rio - Okay, diles que pasen.- cuando dije eso me senté en el trono.

Rio - Samael, reduce al mínimo el efecto de la presencia del emperador.-

[Entendido... No queremos que mueran antes de sufrir... Me gusta su método.]

Rio - Creí que eras más neutral y menos sádica... ¿Todos me salen chuecos?.-

[Señor es imposible que yo esté chueca...]

Al momento pasaron unas cien personas, agradezco que el salón del trono sea tan grande.

Al frente estaba un sujeto de pelo rubio... No puse más ganas en detallarlo... Junto a él habían un montón de NPC'S genéricos... ¿Que?... ¿No esperabas que los describiera o si?...

Sujeto 1 - ?Tú eres Rio?.-

Rio - Así es.-

Sujeto 1 - ¿Tienes tanto miedo que nos vas a entregar el trono tu mismo?.- ¿Quién le tendría miedo a la basura?.

Malekith - ¡Cuida tus palabras!.-

Rio - Basta, Malekith ven aquí.-

En eso mis esposas en algún momento llegaron junto a los demás y se sentaron mientras que las guardianas y Evan se colocaron junto a Malekith.

Un sujeto al ver a mis esposas le susurró algo al sujeto del pelo rubio.

Hanami se acercó por mi espalda y me entregó dos hamburguesas con una sonrisa y se fué a su trono.

Empecé a comer mis hamburguesas... ¡Que ricas!.

Sujeto 1 - ¡Nos vas a entregar el trono y a esas mujeres!.-

Rio - ¿Hm?.-

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Chao hijos del hombre.

El nacimiento del emperador dragónWhere stories live. Discover now