🎄Capítulo 15🎄

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14 diciembre

Axel

Han pasado más de veinticuatro horas desde que Alper y Dafne fueron arrebatados de nuestros brazos. Derín no ha parado de llorar desde que nuestras madres nos informaron que ellos fueron secuestrados por esa mujer.

No sé qué pasaba por la cabeza de esa mujer.

Nunca quiso a Dafne, a su regreso la vio como una fuente de enriquecimiento y no como su propia hija. Lo único que ella quería de mi era dinero. Se lo di cuando descubrí sus planes con tal de que se apartara de nosotros. Ya no podía permitir que siguiera lastimando a Dafne con todas las cosas horribles que le decía y hacía.

—Axel —me llama Becca sacándome de mis pensamientos.

—¿Qué pasa? —pregunto a mi hermana levantándome del sofá donde me encontraba sentado con cuidado de no despertar a Derín.

La pobre no pudo mantenerse más tiempo despierta que termino quedándose dormida en mi pecho.

—Deberían ir a descansar a su casa.

Niego inmediatamente.

—Axel, ambos se encuentran muy cansados.

—No me voy a despegar de este lugar hasta que tenga alguna noticia de mis hijos.

—Axel, no seas terco —me reprende como si fuera mi madre—. Ambos necesitan descansar, comer y tomarse una ducha. No pueden estar asi. Todos estamos muy tristes, no crees que si encuentran a los niños y los ven con esos aspectos tan desfavorables se van a querer acercar a ustedes.

Me lo pienso durante unos cuantos minutos hasta que asiento en modo de respuesta.

—Llevare a Derín a su casa para ducharnos y comer algo.

Mi hermana sale de la recepción. Me acerco nuevamente a Derín sin intenciones de despertarla, la tomo en brazos y la llevo hasta la camioneta donde la dejo en el asiento con Becca sosteniéndola mientras yo entro al vehículo. Conduzco hasta la casa de Derín.

La vuelvo a tomar en mis brazos cuando llegamos a la casa.

Dentro de esta se encuentran nuestras familias y amigos. Se acerca al verme llegar con Derín y me preguntan por ella al verla en mis brazos.

—Se quedó dormida hace una hora —respondo subiendo las escaleras—. Solo he venido a acostarla. Voy a darme una ducha.

—Y a comer algo —recalca Becca.

—Bien, les preparare algo de comer —menciona mi madre saliendo como loca en dirección a la cocina con mis dos hermanas detrás de ella.

Llego hasta la habitación de Derín, entro y la recuesto en la cama.

Yo me quito la ropa para darme un baño y dejarla a ella dormir por un par de horas.

Ya cuando salgo del baño con una toalla alrededor de mi cintura la castaña de ojos azules quien se mantenía dormida, abre los ojos.

—¿Don...

—Tranquila —me acerco a ella—. Estamos en tu casa —se tranquiliza por unos cuantos segundos—, Mis bebés —solloza. Me siento a su lado en la cama—. Hay noticias de ellos.

En ese instante tocan la puerta de la habitación.

—Axel —es mi madre—. Traje comida para ustedes.

—Pasa —respondo abriendo la puerta.

—Derín —mi madre entra con una bandeja llena de comida. —Traje comida para ustedes —le entrega la bandeja—. Si quieren quedarse aquí y descansar un rato yo les informo a los demás para que no los molesten..., a menos que sea importante —responde interrumpiendo a Derín que pensaba replicar.

Amor en Navidad (#1 Corazón de Navidad)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora