Amor en Navidad (#1 Corazón de Navidad)

🎄Capítulo 14🎄

Narrador Omnisciente

13 diciembre

En el segundo que Alice menciona el nombre de la persona que tiene a los pequeños hijos de Axel y Derín. La castaña se permite soltar las lágrimas que se atascaba y lo único que ahora hacen es incrementar su dolor. Desde el segundo uno que las mujeres no quisieron decir quien tenía a los pequeños Luna, ella muy en el fondo de su corazón lo supo.

Sabía que las amenazas de esa mujer no desaparecerían de un día para otro y más cuando recibió una de parte de ella el mismo día que subió al avión que la traería de regreso a su país natal.

El castaño de ojos verdes de igual forma presentía de quien se trataba, pero no quera aceptarlo hasta que alguna de las dos mujeres que el aprecia muchísimo se dignara a decir algo.

—¿Cómo se los llevo? —pregunta Axel abrazando a Derín quien no quiere saber nada de nadie—. Se supone que entre las cua... bueno, los cinco con Frank, cuidarían de ellos.

—Mi bebé —susurra Derín en el pecho del padre de su hijo.

La castaña es la más afectada de todas las personas que se encuentran reunidas en la recepción. Axel la abraza con fuerza tomando asiento con ella que no quiere ver a nadie. Se dedica a llorar por la ausencia de sus bebés, niños que ella quiere con todo su corazón y por los que da su vida con tal de no verlos sufrir en brazos de aquella mujer que en un pasado la lastimo.

—¿Cómo es posible que se los llevara? —Derín solloza en los brazos de Axel. —Mis bebés, ¡quiero a mis hijos!

Brenda intenta acercarse a ella, pero la castaña la aparta. Solo quiere encontrar a sus hijos y abrazarlos hasta que se canse. La única persona que puede soportar en estos momentos es a Axel que también se encuentra igual de afectado que ella, pero trata de ser fuerte por Derín y los niños.

—¿Hace cuánto se los llevo? —pregunta el de ojos verdes.

—No tiene mucho —responde Alice quien tiene los ojos hinchados de tanto llorar, se siente culpable de que sus nietos no estén con ella.

Le duele ver a su hijo y a Derín llorando abrazados apartados de ellos dos.

—Mamá, llego la policía —la rubia de ojos azules hija menor de Alice entra a la recepción con cuatro sujetos uniformados.

Todos en el salón se levantan de prisa. En especial los padres de los niños.

—Me presento, soy el capitán Garrido, me encargare de su caso. ¿Quiénes son los padres? —pregunta el uniformado más anciano.

—Nosotros —responde Axel y Derín al mismo tiempo.

—Bien. Ahora tomaremos declaración de cada uno de los presentes —informa el sujeto uniformado y los tres oficiales que iban con él se acercan a los demás integrantes de la familia para que declaren.

***

En otra parte de la ciudad una mujer rubia de ojos azules intenta que el par de niños que lleva y que ahora ha apartado de sus padres paren de llorar.

—¡Cállate, maldito mocoso! —grita al pequeño de un año sin despegar la vista de la carretera.

Dafne que esta ese día nunca se había permitido acercase a su hermanito pequeño tomo su manito para tranquilizarlo. Nunca le agrado la llegada de ese bebé porque ahora la atención de los adultos se encontraba en ese pequeño costal de huesos y no en ella. Ya no era la luz que iluminaba sus ojos al despertar.

El bebé seguía llorando, que su hermana mayor lo tomara de la mano llego a tranquilizarlo por unos segundos, pero no era quien él quería sentir en esos segundos.