A 1080 kilómetros por hora [Impactos #1]

Capítulo 4

Lucas

Austin al escuchar la puerta abrirse, casi sale corriendo para ver quién ha entrado, seguramente nuestras compañeras.

—Pero bueno, ¿qué tenemos aquí? —pongo los ojos en blanco porque ya empieza con esas intenciones, para variar —soy Austin Reed —acaba la frase.

—Hola —responde una voz que me suena demasiado —yo soy Emma King —¿cómo? ¿Emma? ¿la Emma que yo conozco? Paro en seco y miro a Zach, está mirando el móvil y no se ha dado cuenta de mi reacción. Escucho algo de una tal Kayla y una tal Vera, ah no Vee, pero no estaba atento.

De reojo veo como Zach se levanta y sale a saludar y aprovecho para entrar al baño. Siguen hablando no sé de qué porque no se escucha nada bien lo que dicen. Mientras, recorro el baño que es bastante amplio, me doy cuenta de que hay otra puerta que deduzco que dará paso a la habitación de las chicas.

Mmm... ahora que lo pienso compartimos baño... ¿joder que me pasa? Parezco Austin.

Sabía que viniendo a estudiar a California podría encontrarme en la universidad con Emma, porqué en verano me habló de la SMU. Y en algún momento nos veríamos porque lo que vamos a estudiar ambos tienen relación. Pero no sabía que acabaría en la misma jodida habitación y la tendría que ver durante cuatro años consecutivos. La idea de dejar de contestarle era olvidarme de ella, para cuando viniese a estudiar aquí no tener problemas como ella, por ejemplo.

Va a ser muy difícil vivir con ella y no tenerle ganas todo el tiempo. Conocerla en verano había estado bien, siempre que podía me llevaba a ver California o a hacer algo juntos, un día decidí besarla, fue un impulso, ni lo pensé. ¿No podría haberlo dejado en una maldita amistad? Me paro un momento ¿por qué me estoy comiendo la cabeza? ¿qué me importa lo que piense ahora Emma de mí? Paso, haré que no la conozco y ya está, no va a ser complicado vivir con ella, no me he preocupado por ello desde que tomé la decisión de no responderle, y no lo haré ahora.

Cuando vuelvo a la realidad escucho que las voces provienen de la habitación de las chicas.

—¿Cinematografía? —es la voz de Austin, ¿está hablando de mi carrera?

—No, pero casi —le responde la voz Emma.

—Va, dame una pista —Austin pone voz de crío pequeño.

—Es como cinematografía, pero puedo acceder a la televisión y a la radio, al cine también claro —la voz de Emma, vale, de nuevo Austin está intentando descubrir que estudia Emma.

—Yo qué sé, ¿cinematografía para tele, radio y cine? —debería salir ya, llevo mucho rato aquí metido y sospecharán, después me harán preguntas y odio que me hagan preguntas.

—Esa carrera no existe melón—esa es la voz de Zach, mi hermano habla muy poco pero cuando habla suelta cosas como esa.

Mientras Zach acaba de hablar, tiro del pomo de la puerta en mi dirección, de frente tengo a una chica de espaldas a mí que conozco perfectamente. Austin está frente a ella y desvía su mirada hacia mí, ella se queda mirando a Austin, seguramente no entiende porque mira por encima de ella.

—Audiovisuales —digo para que ella reaccione.

Pero no hace ningún tipo de gesto, se queda mirando a Austin, parece que no ha reaccionado a mi voz. Cuando estoy pensando en decir otra cosa ella empieza a girar sobre si lentamente, cuando me mira tiene la cara descompuesta. Clava sus ojos en los míos y me repasa entero.

Yo hago lo mismo, su cabello es de un color marrón bastante clarito y está lleno de mechas rubias a causa del sol. Sus ojos color miel, siguen repasándome y se detienen en mis manos. Su tez está perfectamente bronceada y en su cara destacan algunas pecas que hace que su cara se infantilice un poco. Sus labios están entreabiertos y el inferior es más grueso que el superior, me detengo en ellos más de lo que me gustaría admitir. Va vestida con un top rojo y un short blanco, su constitución es pequeña y no recordaba que tuviese la mitad de espalda que la mía, y tampoco es muy alta comparada conmigo, su cabeza llega a la altura de mi pecho. Recordaba que era guapa, pero no que es preciosa.