Amor en Navidad (#1 Corazón de Navidad)

🎄Capítulo 5🎄

—Te voy a dar tan duro que no vas a poder caminar en días —susurró muy cerca de mi oído lamiendo el lóbulo que me ponía los pezones en puntas.

Recordar esas palabras vuelven a calentarme ocasionando que quiera apretar mis piernas eliminando mi excitación y dejando mis pezones en punta nuevamente.

Lo vuelvo a ver y el pudor me hace girarme y ponerme de pie.

—No es del único tema que quiero hablar con usted —menciono aun afectada con las palabras de mi recuerdo.

—Dime cual es el otro tema, tengo algo de prisa —menciona y lo veo sentado en donde segundos atrás estaba.

—Esmeralda, la cocinera menciono que yo tendría que quedarme en esta casa. ¿Es necesario que tenga que estar aquí?

—Qué bueno que habla de ese tema, Becca menciono que Dafne quería ver a mi cuñada.

Asiento recordando la plática de la pequeña rubiecita con su tía.

—A partir de mañana ni usted ni mi hija se quedarán en esta casa. Tendrá que empacar muchas prendas ya que ambas se quedaran con mi cuñada en la casa a las afuera de la ciudad donde se encuentra ella.

—¿Cómo? ¿De qué habla? —me giro a encararlo.

—Ha escuchado a la perfección señorita y si no capta lo que quiero decir significa que lo que digo entra por un oído y sale por el otro.

—Solo quiero que me explique cómo se dará el cambio de casa —menciono volviendo a su mirada.

—Mi hija y usted abandonaran esta casa para mudarse a la que se encuentra en las afueras de la ciudad. Mi hija quiere estar con mi cuñada antes de que nazca mi sobrino, en unos cuantos días se celebrara la boda de mi hermana en ese mismo y nosotros las alcanzaremos en unos días —responde.

—¿A qué hora nos llevaran? —pregunto resignada al cambio ahora que tengo una respuesta concreta.

—Antes del mediodía, yo seré quien las lleve aquel lugar —responde poniéndose de pie. —Y por la mañana la llevare a su casa por sus cosas.

Se retira dejándome sola en aquella noche estrellada, no es mucho lo que se puede apreciar de las estrellas en la ciudad.

Doy una mirada al cielo antes de entrar a la casa.

Entro a la habitación y me dirijo al baño para echarme agua en el rostro. Tocan la puerta de la habitación.

Limpio mi rostro con una toalla limpia y al desocuparla la devuelvo al mueble donde se encontraba perfectamente doblada.

Abro la puerta y me encuentro con una melena rubia acompañada de unos ojos verdes.

—Hola Becca —menciono a la chica que carga unas cuantas cosas.

—Hola Derín, ¿Puedo pasar? —menciona y la dejo pasar—. Axel me pidió que trajera algo de ropa para ti —responde entregándome lo que cargaba.

—Gracias, no tenías por qué hacerlo —respondo tomando lo que carga.

—Si tenía que hacerlo, mi hermano me dijo que no trajiste ropa y que mañana se iban con Dafne —menciona y asiento— En unos días nosotros también nos vamos a ir, solo quiero dejar todos los pendientes resueltos para irme a recibir a los proveedores que llegaran con las cosas para mi boda. Estos días han sido una locura y con tu ayuda no vamos a preocuparnos de dejar sola a mi sobrina.

—Gracias a ustedes por aceptarme como la niñera de Dafne a pesar de no tener un certificado de cuidado de niños —menciono.

—Vimos que Dafne se pudo acoplar a ti, es muy reservada con las personas que se le acercan.