Louis va como castigo a un campamento militar, y quizá no deba llamarlo castigo cuando conozca a uno de los soldados, uno de ojos verdes y cabello largo. No uno cualquiera, por supuesto, es el mismísimo hijo del coronel.
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COMPETICIÓN
El policía sacó algunas fotografías, sacó una foto de la madre de Harry y se la tendió al soldado ojiazul.
—¿Reconoces a esta mujer?
Preguntó el hombre, tratando de que Louis mirara. Pero Louis miró intensamente por la ventana en cambio, su mirada casi aguda en su enfoque.
—No.
[ ... ]
Una semana después
Mientras que Louis había recuperado una cantidad sustancial de peso y parecía casi normal, Harry parecía un hombre muerto. Tenía muchos nutrientes de la vía intravenosa, pero se negaba a comer alimentos sólidos y no había vuelto a ganar peso. Los médicos entraban en pánico constantemente al respecto, temiendo que sufriera otro ataque cardíaco.
La prensa había capturado varias fotos, videos y fragmentos de información sobre ellos. Habían conseguido una sesión completa de Louis siendo llevado al hospital, tenían el video de Harry colapsando cuando su corazón había dado fallas.
Las imágenes no habían sido virales, todo gracias a Niall, que les pagó una cantidad incontable de dinero para que no salieran a la luz del ojo público.
Pasó otra semana antes de que los diversos médicos lograran ponerle una etiqueta oficial a Harry. Escogieron e investigaron en todos sus problemas hasta que finalmente pudieron ir en la habitación de Harry y enumerar sus problemas, uno por uno.
—Ansiedad, insomnio, trastorno de estrés postraumático, depresión, hipervigilancia y algún tipo de anorexia inducida por un incidente.
Otra semana después lo llevaron a un centro de recuperación más intenso para la terapia cognitivo-conductual. Louis fue con él, firmando papeles que pusieran a Louis en su tutela como una especie de guardián temporal.
A Louis no se le permitió entrar a las sesiones de terapia, pero se quedó en la habitación de Harry y lo acompañó por las instalaciones.
Fue como criar a un niño desde la infancia: el primer hito fue conseguir que Harry se moviera y volviera a comer. Comenzó con unos pasos débiles a través de las habitaciones, una cucharada de puré y un sorbo de agua.
Cualquier cosa más que pequeñas cantidades de comida le provocaba arcadas, su estómago no podía retener nada.
Luego pudo caminar solo a sus sesiones, le quitaron el catéter, le quitaron la vía intravenosa y comenzó a ganar peso nuevamente. Podía volver a comer y caminar.
El siguiente obstáculo fue conseguir que durmiera con regularidad. Eso requirió dos semanas de concentración constante, sin que se resolvieran otros problemas. Se las arreglaron para que durmiera unas tres horas cada noche al final de las dos semanas, y el tiempo aumentaba todo el tiempo.
