| 18 |

11.2K 1.3K 1.1K
                                    

LA BÁSCULA

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

LA BÁSCULA

—Muy bien... Momento de la verdad. Aquí estamos. Tú. Yo. Teniente y aprendiz, al final de un mes. El final de un viaje de sudor y lágrimas, principalmente sudor, y trabajo muy, muy duro. Las cosas que he hecho... ¡Las cosas que he logrado! Recuerdo la primera vez que me hiciste sudar. Ahí estaba yo...

Harry escucha el mayor tiempo posible físicamente antes de interrumpir. 

—Te estás yendo del...

—¡Este es mi momento! ¡No lo arruines!

Él pone los ojos en blanco con cariño. 

—Este no es un momento en absoluto. Si has cumplido la meta, entonces la has cumplido, pero aún así está bien si no lo ha hecho. No quiero que pongas demasiada presión sobre esto. No hay una fecha límite para subir de peso, Louis.

—Sin embargo, no soy tan bueno haciendo abdominales. ¿Qué pasa si he ganado? —Su voz es mucho más suave, mucho menos bromista. Sus ojos muestran la preocupación tan real que tiene por una situación que es completamente imposible.

—Has hecho todo lo que te pedí y más. Haces ejercicio con regularidad, estás comiendo mejor... Ya no sólo te basas en comida china, ¿no? 

Los labios de Louis se arquean un poco ante eso. 

—Y además te veo todos los días. Créeme, estás bien, niño.

Louis se detiene unos momentos más, se quita las zapatillas e incluso los calcetines antes de subir finalmente a la báscula. La cara de póquer de Harry se arruina cuando los números dejan de moverse. Louis vería lo mucho que está sonriendo si solo mirara.

—¿Vas a mirar o voy a tener que celebrar por mi cuenta?

Louis mira los números y su sonrisa es instantánea. Mira a Harry y luego vuelve a mirar los números, calculando una segunda y tercera vez para estar seguro con precisión. 

—¿¡Tres  kilos!? Eso es...

—Increíble. —Harry termina por él.

No se lo espera cuando Louis se lanza fuera de la balanza y lo besa en medio de todo el sudor, las respiraciones y los sonidos que los rodean. 

—Ay Dios mío. ¡Ni siquiera sé qué hacer conmigo mismo en este momento! ¿Dónde está...? 

Se da la vuelta mirando hasta que lo encuentra. 

—¡Horan, trae tu culo aquí!

Niall se acerca, la bolsa de patatas en sus manos, la urgencia en la voz de Louis no hace nada para motivarlo a moverse más rápido. 

—¿Qué pasa Tommo? ¿Ya te pidió matrimonio? —Harry le da un puñetazo en el brazo.

—¡No no! ¡Eso no! Esto es mejor... 

Le guiña un ojo a Harry cuando se ve muy ofendido. 

—Mira, mira esto. 

Le muestra a Niall su peso inicial escrito en su carpeta y luego se sube a la báscula viendo cómo los números suben hasta que se detienen. 

—¡¿Ves eso?!

—¡Eso es una locura! ¡Felicidades! Realmente, eso es asombroso. Tú y Harry hicisteis un gran trabajo juntos... Me alegro de que hayas cumplido tu objetivo, Tommo. —Louis lo abraza de inmediato, lo que hace que Niall se tambalee hacia atrás. Louis pronto lo abandona y abraza a Harry en su lugar.

—Gracias, de verdad. No puedo agradecerte lo suficiente. No podría haber hecho esto solo, siento que te debo más que solo un agradecimiento... 

Louis mueve las cejas hacia arriba y hacia abajo y de inmediato Harry sale del modo entrenador y entra directamente en... ¿modo coqueto? Se inclina para juntar sus labios, lo suficientemente inocente para un gimnasio. Se separan cuando Niall casi grita a su lado.

—¿Qué mierda? ¡¿Qué demonios es esto?!  —Sus ojos están muy abiertos y en pánico mientras sus ojos leen y releen el número en la báscula.— ¡Esta escala es un pedazo de mierda! ¿Cuándo fue calibrado por última vez?

—Umm... ¿Liam ayer?

—¡No hay forma! Lo hizo mal ... Él ... Aguanta esto. —Empuja su bolsa de Lay's en la mano de Harry mientras lo intenta de nuevo, como si el número fuera a cambiar. No es así.

—No es el número lo que importa. Te has esforzado, Niall. —Intenta Harry a pesar de que su sonrisa ya está atravesando su seria personalidad profesional.

—¡Siento que he ganado once malditos kilos! ¡Y cómo mierda voy a perder peso si me estoy comiendo una jodida bolsa grasienta de patatas! ¡Liam, ven aquí!

Cuando se va para ponerse de mal humor en compañía de Liam, Harry deja escapar la carcajada más fuerte que jamás se haya escuchado hacer. Se recupera después de un minuto completo de reír y apoyarse contra la pared. Louis se acerca a él cuando está recuperando el aliento.

Echa un vistazo rápido a su alrededor y luego desliza sus dedos fríos debajo de su camisa para descansar sobre su estómago. La respiración de Harry se rompe con el toque. 

—Estaba diciendo algo sobre deberte más que un agradecimiento, ¿creo?

Desliza las manos hasta los dedos de la cintura que bailan justo en el borde. 

—Creo que podemos arreglar algo en los baños si no hay nadie. 

Harry definitivamente se está calentando con solo pensarlo.

—¿Estás seguro? —Pregunta como cortesía en caso de que Louis quiera golpearlo espontáneamente, en su trabajo. Es algo sobre lo que está indeciso. Dios, espera que no. Sólo espera que Louis esté completamente seguro.

Louis ni siquiera responde, solo toma su mano y los guía de esa manera, ignorando hábilmente cualquier mirada que reciba por prácticamente arrastrar a su entrenador por el gimnasio. Al teniente de Twist Camp. 

War Camp | L.SWhere stories live. Discover now