Capítulo 20: Estar mejor

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Puede ser bueno, como le dije a Aidan los sentimientos reales hacen que las personas se sientan identificadas, pero en esta ocasión es bastante doloroso para mí.

Teniendo en cuenta que yo no voy a ser quien la cante, decido que es mejor preguntarle a ella si está bien o me esfuerzo por hacer otra cosa, así que le envío un mensaje:

Santi – en línea

¿Está bien si escribo sobre nosotros? No tengo otra cosa en la cabeza.

Ella no me responde hasta que estoy llegando a casa, cuando estoy en el ascensor y veo en la pantalla el nombre que aún no cambié, y tampoco lo haré.

Mi amor – en línea

No hay problema, no esperaba otra cosa. También tengo algunas ideas, si me vas pasando los avances puedo ayudar.

Jamás compusimos algo juntos, y no sé si sea el mejor momento; tal vez sirva para desahogarnos, o tal vez termine por destruirnos más.

Después de pensar como por media hora en la primera estrofa mientras lavo los platos que quedaron de anoche, creo que la tengo.

Soñando en la oscuridad

No quiero nada pensar

Mi alma llenabas, mi mente calmabas

Y ahora no estás...

—¡Sorpresa! —dice Elai apareciendo en la cocina, haciendo que me sobresalte.

—Vivimos juntos, te veo todos los días, eres muy lindo y todo, pero no eres una sorpresa —reniego mientras seco mis manos con un paño de cocina.

—Yo no soy la sorpresa, idiota. Ya quisieras. —Me quita el paño de las manos y lo arroja en la encimera antes de jalarme fuera de la cocina mientras agrega—: Igual gracias por lo de lindo.

—No te emociones...

—Siento que en otra vida tuvimos un amor prohibido, como entre un rey y un pueblerino —sigue con sus fantasías para distraerme de las preguntas en lo que salimos de la casa.

—Déjame adivinar... —finjo pensar mientras me mete en el ascensor—: Tú eras el rey.

—Obviamente sí.

—De todas formas no resolvimos el drama en esta vida, así que en la próxima será.

—Aún estamos vivos —contradice entrecerrando los ojos.

—Y enamorados de otras personas.

Él lo piensa por un momento y termina asintiendo para darme la razón.

—En la próxima vida seguro ya sí, pero intenta venir con ojos oscuros, que tan claritos me dan impresión.

Suelto una risa por la tontería, la verdad es que con ninguno de mis amigos habría podido bromear así antes, por lo que me alegra mucho haber salido de allí.

Obviamente con Lean no habría problema, pero él es una persona más sensible y con otro tipo de personalidad.

—Lo voy a intentar, pero debo decir que como alma gemela eres demasiado pretencioso —me quejo subiendo al auto tras seguir sus indicaciones— ¿A dónde vamos?

—¿Recuerdas que comencé esta conversación gritando por una sorpresa? —pregunta en un tono que claramente intenta hacerme sentir tonto— ¡Pues es una sorpresa! No preguntes.

Okay...

—No uses esa palabra.

—¿Por qué? —cuestiono elevando una ceja.

Nubes de tormenta [LCS #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora