Pequeño Gangster (Vkook)

Complicado

La noche había sido espléndida, el pequeño azabache había cumplido el llevar a su hermano a la playa no importando la resaca fatal por haber tomado de algunas copas y tremendo dolor de cadera por el resumen del polvo de pasión que se había dado con su esposo.

Se sentía que no podía una más, pero íntegro para fingir un día ameno en la playa de las costas en México.

Por supuesto estaba Taehyung con una sonrisa y un  cuerpo rejuvenecido con una energía que emanaba al rededor de él.

Jungkoook le veía de reojo, con aquella envidia y recelo por no sentirse igual.

-Para la otra seré él de arriba.

-Al menos que quieras meter mi pene en tu linda entrada en esa posición con gusto cariño.

Su pequeño esbozó una mueca de inconformidad torciendo su labio superior hacia arriba.

-Eres un tonto.

Estas vacaciones fueron de total relajación y mucho sexo para el feliz matrimonio y sus acompañantes.

Su regreso a Corea fue veloz, para Jeon era muy pronto aun así tenía que regresar.

La mano derecha del difunto padre de Jungkook estaba encargándose de algunos asuntos pendientes, en el cual un día antes de su regreso a Corea había tenido que comunicarse por problemas de territorios invadidos.

Al parecer querian quitarle la zona de Daegu, esta misma que a su padre le había sido difícil de obtener en su tiempo, las treguas con el Gangster de esa zona había culminado por una supuesta traición.

La situación era delicada ya que amenazaban con entrar a Busan y tomar lo que se les había arrebatado hace tiempo a costa de lo que sea y para colmo 3 de sus hombres habían sido tomados a cambio de que se presentara el heredero ante sus ojos.

Esta situación era delicada, aunque no quiso informarle realmente como eran los hechos a su esposo, y el porque el regreso tan repentino, preferia guardar calma para no preocupar a Taehyung.

***

-No es posible que llevemos más de 1 mes tratando de arreglar este asunto y el estúpido de Mingyu siga haciendo su puto desmadre.

Jeon Jungkook estaba furioso estos hechos se alargaban cada día más, obteniendo solo resistencia para que no invadieran su territorio.

Mingyu el Gánster de renombre que conocían todos en Corea del Sur, él hecho estaba que era de temer, puesto que estaba un poco safado por su forma de trabajar y obtener lo que quería.

La tregua definitivamente no era de platicar, había tomado la decisión de si o si, quitarle territorio.

Habiendo ya matado a varios de los hombres que custodiando Busan, el heredero del Clan Jeon, no bajaría la guardia.

Su estadía en Buscan había pasado de unos días a dos semanas, para esto Taehyung sabia solo lo esencial de la situación pero aún seguía sin confesarle la realidad.

Jeon estaba en un punto estresante, armando un plan en el cual el objetivo seria eliminar a Mingyu, hasta este momento, los planes eran verle, puesto que todo este tiempo solo quería que hiciera acto de presencia, había postergado este enfrentamiento, mas no le quedó de otra que llegar a visitarlo, armado hasta los huesos, se dirigió hacia su destino, junto con su equipo.

Llegando al frente de una gran casona, muy moderna, la entrada para ellos fue de ardua seguridad y pasar por varios puntos de revisión, entre cada punto hombres armados, claro que había entrado en el territorio de su actual enemigo y estaba en riesgo de tener un atentado en contra de su vida, sin embargo, aún su plan era llegar a mutuos acuerdos o la muerte.

Le recibieron con amabilidad, dejándolo entrar a los aposentos de su gran mansión, mostrándoles el camino, llegaron al lugar donde estaba sentado Mungyu, al fondo de una gran mesa rectangular, en su tranquilidad, cenando un gran bufet de comida variada, era tanta comida para él solo.

-Bienvenido Sr. Jeon, hoy me siento alagado de ser visitado por su gran realeza.

Él aspecto de Mungyu era desagradable, malos modales al comer hablando con aún bocado en su boca, masticado, esta escena hizo que Jungkook sintiera asco, tratando de disimular su repulsión, tapaba un poco su boca, y tocando su estómago, en señal de nauseas.

-Es un honor estar aqui- le decía con ironía.

- Ya que tienes algunos de mis hombres cautivos quise venir a ver como los atendías.

La sonrisa de Mingyu no se hizo esperar, y una carcajada estruendosa después de este gesto.

-El humor de un Jeon, siempre tan sínico, me alagas Sr. Jungkook- dejando sus cubiertos en cada lado de su plato se decidió levantarse de su lugar, tomó una servilleta y limpio los pequeños rastros de comida que quedaban en las comisuras de su boca.

-Cariño, traelos - viro a ver a uno de sus guardias quien custodiaba su espalda, dando la orden para traer a los hombres de Jungkook.

No tardaron, para abrir una de las grandes puertas de ese lugar y ver entrar a 8 de sus hombres en estados deplorables todos con sus ojos vendados, los arrodilló frente a él, tomó un arma que encajaba a un costado de su fajo y sin previo aviso disparo en el craneo al primero que  vio.

La sangre salir de la cabeza de uno de sus hombres, la escena, el estrés, hizo que voltear hacia atrás, lo primero que obtuvo fue la reacción de Jungkook vomitando a un lado de Jimin.

-¿Jungkook, estas bien?
Jimin preguntaba preocupado, tomó una de sus manos para calmarle, no duro tanto en esa posición para que después agarrara aire y se incorporara.

-Veo cariño que no te gusta la sangre- la cara del infeliz loco y él placer que le proporcionaba hacerles eso,  verle como mataba uno por  uno a sus hombres hizo que Jungkook reaccionará de inmediato, dando orden de atacar.

Solo una señal tubo que dar para que la mansión fuera emboscada por todo un arsenal de hombres al mando de Jungkook, su plan solo era dar con su paradero  y él mismo le dirigió hacia su propia muerte, en cuestión de algunos minutos, había tomado posición de la gran mayoría de sus hombres y Mingyu acorralado con pocos hombres que le protegían a su favor.

Jeon tomó una de sus armas y apunto hacia con él.

-Eres un bastardo- fue lo único que dijo para tirarle un tiro de lejos y darle directo en su ojo izquierdo, atravesando todo él lado cerebral de Mingyu

-tanto desmadre para que terminara tan rápido- Jimin limpiaba una de sus armas llena de sangre tranquilamente, la mansión había sido tomada por completo.

Jeon volteo a ver a Jimin.

-Me siento mareado Jimin- fue cuestión de segundos para que Jungkook callera desmayado al piso.