Cuando llegaron a aquel lugar que parecía ser un templo, estaba completamente oscuro, parecían ser las 8 de la noche y justo por curiosidad la fémina se dispuso a revisar.
Si, en efecto, eran las 8:05
De repente empezaron a escucharse escapes de motos, la chica no estaba muy confiada en ese ambiente, así que se quedó en la motocicleta mientras sus primos bajaban de estas.
-¿Qué haces? Baja de ahí Nini. -Nahoya. -¿En serio es aquí? -Pregunto bajando de la motocicleta. -Sí, es aquí. -Respondió Souta.
Asintió no muy segura, mientras metía sus manos en los bolsillos de su delgada sudadera.
Estaba haciendo frío.
En algún momento hubo motos que llegaron a estacionarse justo al lado de las de sus primos.
Eran alrededor de unas 11 motos, de donde bajaban chicos.
La castaña estaba observando su alrededor, diría mirando, pero observar es prestar atención a todo lo qué pasa a su alrededor, por lo que en realidad estaba observando.
Había un chico en particular que llamaba su atención.
Realmente no era por ser guapo o algo por el estilo, sino por su altura.
De verdad parecía ser muy alto, y no le cabía duda de que lo era.
Tenía un mechón rubio y lo demás era café.
De repente todos comenzaron a acercarse a sus primos, ella removiéndose incómoda de su lugar, alejándose un poco, quedando recargada en la moto.
Nadie prestaba atención a la chica, o al menos eso pensó.
Dos pares de ojos la miraban atentamente.
Pero ella parecía no darse cuenta de ello, hasta que se sintió observada.
Lo que provocó que volteara a diferentes lugares discretamente, la mayoría siendo de reojo, ubicando solo a uno de los pares de ojos que la veían.
Era un chico rubio, más o menos de su estatura, con unos hermosos ojos verdes.
Hizo como si no se hubiera dado cuenta, más le fue imposible no sentirse incómoda, por que después de todo estaba siendo observada y lo sentía.
Sus primos avisaron que irían a quien sabe dónde, por lo que ella asintió y se sentó en uno de los tantos lugares con pasto que había en la zona, un tanto alejada de las personas, después de todo, sabía defenderse y le bastaba con ello para sentirse un poco segura.
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