Capítulo 18: ¿Cómo sobrevivir a un apocalipsis o a una Daniela ebria?

8.8K 701 607
                                    

🍷🥀🍷

holi, digan holi

ya hacía falta un cap en la madrugada

espero que les guste, intentaré subir varios caps de bsat esta semana :D

🍷🥀🍷


CAPÍTULO 18: ¿CÓMO SOBREVIVIR A UN APOCALIPSIS O A UNA DANIELA EBRIA?

NOAH CRAYTON (CRAYÓN)

Mañana tendré migraña.

Me doy cuenta por el dolor agudo que empieza a formarse en mi sien, mi mandíbula duele un poco y paso una mano por mi ojo donde un tic extraño empieza a molestarme.

Suspiro y vuelvo a sostener el cabello de Daniela mientras ella vomita en el inodoro y pienso en que esta no es la manera en que pensé terminaría mi noche. No, para nada me imaginé sosteniendo el cabello de una borracha despechada.

Joder ¿Cuánto tomó?

Entonces recuerdo a Scarleth sosteniendo una botella de tequila casi vacía, frunzo el ceño al pensar en Wembley tomando tanto y de un alcohol tan feo cuando va sin acompañante.

Su cuerpo se sacude por la fuerza de las arcadas y yo le acaricio la espalda dándole algún tipo de apoyo para que suelte todo y luego recuerdo porqué no suelo tomar mucho, además de que odio el olor a vómito con alcohol, no me gusta tener resaca al día siguiente.

Soy de los que pueden divertirse sin alcohol.

Daniela no deja de vomitar y empiezo a preocuparme, pero minutos después respira profundamente y se muestra demasiado cansada.

Bien, estoy molesto de nuevo.

Joder, si ella supiera lo cabreado que me tiene en este momento.

Ella solloza y esa es mi señal para darle un poco más de apoyo, aleja su rostro del inodoro, me arrodillo con ella después de darle vuelta al inodoro y observo como toma mi sweater para secar sus lágrimas.

Dale flaca, no hay problema.

—Me... me acostaré un momento en el piso. —dice con la voz rasposa, pero yo niego.

—No.

Tomo la liga de su mano y hago un moño que me sale de la mierda, pero ayuda a que su cabello quede quieto y para que pueda ayudarle a cepillar sus dientes sin interferencias.

Daniela tiene un cabello hermoso, casi rubio, sedoso y que siempre huele divino, pero cuando no se peina el cabello se convierte, sorprendentemente, en un torbellino de rulos desordenados difíciles de peinar.

—¿No? —cuestiona mientras trato de levantarla.

Sus ojos brillantes por las arcadas.

—No, levántate, vamos a cepillarte los dientes. —ordeno y ella hace un puchero encantador.

—¿Estás enojado, Noah amor de mi vida? ─cuestiona con ternura.

Su pregunta me hace rodar los ojos, pero su apodo me hace gracia, y antes de que logre distraerme, levanto las mangas de mi sweater para no mojarlo y la detengo en el lavamanos del baño evitando que se caiga.

—Sí. ─respondo.

—No te enojes conmigo, Noah.

Ah, listo.

Beso sabor a tequila [1]Where stories live. Discover now