Sauron

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Asistir a eventos sociales, en los que debía poner una buena cara no era su actividad favorita.  No le agrada la interacción forzada a la que debía someterse y sobre todo, si cada persona con la que entablaba una conversación le criticaba por, según ellos, "el mal camino que estaba tomando".

Las respuestas de Sauron sólo se resumían a una sonrisa, un asentimiento y un "gracias, asumiré las consecuencias de mis actos".  Siempre se consideró un ser lleno de paciencia, pero escuchar la misma frase de voces diferentes podía sacarlo de sus casillas en poco tiempo.

Afortunadamente, su equilibrio volvió al ver a la persona por la que había asistido a la tortuosa reunión. Una elfa de cabellos _____, se acercaba a él con una enorme sonrisa.

- ¡Annatar! - la elfa lo abrazó efusivamente, ocasionando una sonrisa tímida del interpelado - pensé que no vendrías, estoy muy feliz de que estés aquí.

No supo que hizo que su corazón acelerara, la sonrisa que vino después de aquellas palabras, el que ambos se alegraran de la presencia del otro o que la fémina lo siguiera llamando por su nombre y no el apodo por el que se hizo conocido. De lo que estaba seguro es que con la elfa a su lado, la reunión era un poco más llevadera. Porque no, no iba a admitir que le gustaban las fiestas sólo porque eran un motivo para ver a la elfa.

No quiero verme de la manera en que lo hago,  

pero me siento seguro cuando estoy contigo.

Con el paso de los días, el desprecio que los demás sentían hacia él era más evidente. Cada mirada, cada murmullo e insulto eran dirigidos a su persona. No pasó mucho tiempo para que las humillaciones se hicieran cada vez más frecuentes y dolorosas.

Sabía que al elegir el camino de Morgoth mucha gente lo señalaría y que llegaría un punto en el que no sería bien recibido por nadie, mas nunca se imaginó que le dolería que unos simples extraños hablaran a sus espaldas mientras que intentaba despejarse.

La repulsión que tenía hacia la gente crecía cada vez más, el odio contenido que cargaba consigo se hacía cada vez más presente en su rostro. Cada día, el brillo en su mirada disminuía dejando el lugar al cansancio, la ira y la frustración.

Últimamente, me siento mal y lastimado, 

cansado de tropezar con mis zapatos.

Temía por el día en el que _____ le recordara que ser uno de los sirvientes de Morgoth no era bien visto y que le pidiera  abandonar a su maestro. No quería discutir con ella y que su amistad, o lo que tenían, se acabara. Afortunadamente, ese día nunca llegó.

En su lugar, las reuniones se hicieron más frecuentes. ____ buscaba la oportunidad de encontrarse con Sauron, ambos disfrutaban de la compañía del otro, en especial cuando se alejaban de los demás y quedaban solo ellos, era como estar en una burbuja, una que ninguno quería que explotara.

- Entonces le dije; con todo respeto Lady Fiora, pero... - el joven se quedó callado al percatarse de la mirada triste de su acompañante - ¿Pasa algo _____?

La joven negó y le sonrió débilmente, Sauron sabía que algo estaba mal. Había convivido lo suficiente con la elfa, como para reconocer que la expresión en su rostro demostraba que todo estaba mal. Sauron tomó con delicadeza las manos de ____ y la miró a los ojos.

- Sabes que puedes contarme lo que sea ¿Cierto? - la elfa asintió mientras desviaba la mirada - ¿Por qué no me cuentas? ¿Acaso ya no confías en mí?

𝙴𝚕 𝚂𝚎ñ𝚘𝚛 𝚍𝚎 𝚕𝚘𝚜 𝙰𝚗𝚒𝚕𝚕𝚘𝚜 𝚢 𝚎𝚕 𝙷𝚘𝚋𝚋𝚒𝚝 𝑶𝒏𝒆-𝒔𝒉𝒐𝒕𝒔Where stories live. Discover now