NARRA ZAYN
Le dije a los chicos que cuidaran de Annabet mientras yo iba a buscar a Bianca, ella nunca se va sin despedirse. Subí hasta mi habitación y me vestí rápidamente. Salí de casa y al primer sitio al que pensé que podría haber ido Bianca era su casa. Toqué el timbre repetidas veces hasta que Eleanor me abrió.
- Hola Zayn.- dijo sonriéndome.
-Hola Eleanor, ¿Está Bianca?
-No, yo pensé que estaba contigo.
- Y yo, pero se marchó sin avisar. Se peleó con Louis, como hacen siempre, y después se marchó sin avisar y no sé donde puede estar.
- No sé.... Igual está en el parque, me dijo que le gustaba mucho ir a pensar a sitios de ese tipo.
- Vale, pero solo hay un problema, hay más de 4 parques en los que podría estar.
- Probaste a llamarla?
- Claro que probé, pero se dejó el móvil en mi casa.- me apoyé en el marco de la puerta.
- Busca uno por uno, yo te ayudaría, pero mañana tengo un importante exámen y no puedo.- me miró con pena.
- Vale, no te preocupes, tu estudia y suerte mañana.- dije en forma de despedida y me giré para marchame.
Bajé las escaleras y al llegar al portal me paré en seco, no sabía por donde empezar a buscar. Decidí empezar por el más lejano de mi casa hasta el más cercano.
Llegué al último parque y aún no la había encontrado. Estaba descansando sentado en un banco y pensando en donde podría estar Bianca cuando unas pequeñas manos me taparon los ojos. No sabía quien era, pensé que era una fan hasta que escuche esa voz tan familiar para mí.
- ¿Ya te has cansado de Annabet?
- No, estaba buscándote, como te fuiste sin avisar me preocupé.
- Lo siento, no me encontraba muy bien y decidí salir a pasear.
De pronto empezó a llover y no teníamos donde refugiarnos hasta llegar a mi casa, empezamos a correr, pero a los minutos tuvimos que parar.
- Lluvia asquerosa- me saqué la chaqueta y se la puse a Bianca-. Toma.
Ella me respondió con una sonrisa,no quería que se muriese de frío por eso decidí dejársela. Continuamos nuestro camino hasta casa, y en menos de 10 minutos ya habíamos llegado. Al entrar fui a buscar dos toallas, una para Bianca y otra para mí. Se la dí y empezó a secarse mientras entraba en el salón. Yo entré detrás de ella y saludé a los chicos, que estaban haciendo el tonto con Annabet y ella se reía ruidosamente.
Estuve un rato hablando con los chicos de como podría hacer con Annabet y la gira, pero no llegamos a ninguna solución. Después se marcharon y nos quedamos nosotros tres solos.
Bianca estaba sentada en un sillón mirando hacia sus piés mientras que yo estaba sentado, con Annabet, en el suelo. Annabet se arrastró hacia Bianca y le tiró del pantalón para que le hiciese caso. Bianca la miró sonriendo y la cogió en brazos sin decir ni una sola palabra, la abrazó y empezó a llorar. Me levanté del suelo y me acerqué a ella, agachándome para poder estar a su altura.
- ¿Por qué lloras?- le limpie las lágrimas.
- Antes, cuando estaba en el parque,me encontré con mi primo y me dijo que mis padres quieren que vuelva a España, pero yo no quiero irme.- dijo llorando el doble.
- Bianca, no te vas a ir, eres lo suficientemente mayor y lo bastante inteligente como para tomar tus propias decisiones.
- Ya, eso ya lo se, pero vine a Londres a estudiar y si mis padres dejan de pagar la Universidad, me voy.
- Pues te la pago yo.- dije decidido.
- No, no me vas a pagar la Universidad.
- Pero no te puedes ir, por favor déjame pagarla, hazlo por Annabet.
Bianca dejó a Annabet sobre mis piernas, se levantó y me miró fijamente, pensando su respuesta.
- Vale, pero me quedo por Annabet y por tí. -dijo sonriéndome.
Me levanté para abrazarla, haciendo que Annabet casi se cayera, pero la cogí a tiempo. Me levanté completamente y la abracé tan fuerte como pude, teniendo cuidado de no aplastarla, ni a ella, ni a Annabet.
