Acuerdos [Vol1] [Trilogía Re...

By Steysi_98

195K 11.7K 1.3K

Trilogía Relaciones Tóxicas Primera Parte (VOL 1) En un universo de lujos y sombras, ella es una joven here... More

¡ATENCIÓN!
Sinopsis
Prólogo
Personajes
~Portadas~
~Portada~
Mockup
~Booktrailer~
Corte Informativo
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 14
Capítulo 15
Capítulo 16
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Capítulo 38
Capítulo 39
Capítulo 40
Capítulo 41
Capítulo 42
Capítulo 43
Capítulo 44
Capítulo 45
Epílogo

Capítulo 25

3.3K 209 35
By Steysi_98

FLASHBACK

Sentía una rabia desesperante, una fuerte ira y un dolor en mi pecho mortificante, casi mato a mi padre, no lo hice ya que fui interrumpido por Damián, sino él estuviera bajo tierra, con desesperación buscaba a Samira por todos lados del club, pasillos, habitaciones de servicios, cuartos privados e incluso los de trabajo, no sabía dónde estaba y recurrí a la única que podría saber donde esta, ya que han creado una amistad muy fuerte con ella y se que ella me ayudará. 

—¡Hils, — Grité tocando su puerta. — Levántate y ¿dime dónde podría estar Samira?!

Mimase es la única amiga de Samira y, como es así, lo único que me quedaba era buscar respuestas en ella y esperaba en Dios que las tuviera antes de que ocurriera lo peor.

—No lo sé, ¿No estaba con usted Señor? Tenía trabajo, hoy era lo del cliente sorpresa. ¿No está trabajando?

—¡Mierda no!, ha escapado ¿Sabes algún lugar en el cual que ella podría estar? No le queda mucho tiempo de pie ha perdido mucha sangre y creo que se desmayara muy pronto. 

—¡¿Qué pasó?!, ¡¿Por qué escapó?! Ella no saldría sin su permiso.

— ¡Maldición Hils, — Me estaba desesperando sabía que todo esta mierda es por mi culpa. — Ha salido hace más de dos hora y no sé nada de ella, pasó un gran y colosal problema, ayúdame por favor. —Me arrodille frente a ella. —Por favor ayúdame antes de que sea demasiado tarde.

Estaba rogando, y sí, lo que nunca pensé que haría lo estaba haciendo, pero era inevitable, escapó de mis manos, y quién sabe qué cosas esté pensando y quién sabe qué cosas mi padre le hizo, el sentimiento de culpa carcomía mi cuerpo, el dolor que sentía en mi pecho era muestra de lo que en realidad me he convertido, ya no era pena, no era por humildad, era esa desgracia que le cae al corazón arropándolo del sentimientos más doloroso, y digo doloroso porque el "amor" es sufrido en todos los casos, y no, no estoy sufriendo, me estoy hundiendo en la desesperación y angustia por tenerla cerca, cuidarla y protegerla, algo que no pude cumplir, ya que me distraje en un momento tan importante como ese.

¿Por qué maldición?

Quería tomar algo para calmar mis angustia y el estrés estaba hasta el tope, comencé a golpear mi frente contra la pared, a maldecir con fuerza, y sí, a llorar como un animal, Mimase gritó para que parara, pero era inevitable, sentía dolor, desesperación, angustia y, por desgracia, amor.

—¡Fantiny — Me tocó el hombro — sé dónde podría estar, vamos por ella!

—¡¿Dónde crees?!

—Recuerdo que ella me habló de una casucha abandonada cerca de un puente por esta ciudad, ¿sabe dónde podría ser? Es que no se de calles aquí.

—Creo que se donde puede ser. Hay muchas casuchas abandonadas y tendríamos que verlas todas, pero la vamos a encontrar. 

— ¿Y si no es así, si no esta allí?

—Buscaremos en todas parte, cada rincón de esta ciudad lo veremos y luego recuerdame la casucha con más detalles, tal vez se te escapo algo de como es.

La tomé de la mano y salimos a toda prisa, subimos a mi auto y emprendimos camino, anduvimos todos los posibles sitios que Samira le comentó a Mimase, fuimos a donde una vez ella planeó suicidarse, no estaba, fuimos a los lugares donde pasaba la noche con algunas personas de la calle y, por desgracia, no estaba, las horas seguían avanzando hasta que Mimase recordó un último lugar, algo solitario cerca de un puente casi abandonado. Llegamos y Mimase salió corriendo, la seguí y nos dividimos en busca de Samira, pasaron dos minutos y Mimase gritó que la había encontrado, cuando fui estaba con un árbol y una hoja que cubría su cuerpo, algunas heridas aún sangraban y su cabello  estaba ensangrentado y mojado, le tomé el pulso y era muy bajo, aún seguía con vida, la llevé al auto y llegamos al hospital.

Busqué con urgencia a un doctor y la hospitalizaron de inmediato, estaba en muy malas condiciones, peores que aquella vez que la atropellamos por accidente, esta vez ella y su cuerpo deseaban morir.

—Fantiny. — Habló Mimase —¿Crees que ella estará bien?

—Espero que sí, sino jamás me lo perdonaré.

—¿Qué pasará después, Fantiny?

—En realidad no sé qué pasará, no sé si esto salga bien, pero necesito tu ayuda con algo. Si todo  sale bien y hablo con ella quiero que me des tu ayuda incondicional. 

El doctor salió y pidió hablar conmigo a solas.

—La situación de la joven Rockefeller es crítica, su presión está elevada y tiene un fuerte golpe en la cabeza, le haremos una tomografía haber si no hay daño cerebral.

—¿Va a morir?  

—Lo más probable es que estén preparado para todo a perdido mucha sangre y respira con mucha dificultad. 

—¡No puede morir,haré lo que sea, ¿Quiere dinero? se lo daré, solo salvela si tengo que donarle algo solo dígalo!

—Solo necesito sangre, si deposita el dinero en recepción podemos ir...

—Por supuesto, ¿es todo? ¿Necesita algo más?

—Por ahora no, su nariz será reparada cuando la presión se estabilice igual que sus otras heridas, gracias, señor Fantiny.

—Se lo agradezco doctor.

Esto fue peor de lo que imagine, si ella muere no solo tendré problemas, esto será toda mi culpa y no sé cómo viviría con esta carga y este dolor de perder a la única persona que me hace sentir especial.

—¿Qué pasó? —Pregunto Mimase.

—Pueda que tenga alguna lección en la cabeza, y le pondrán sangre ya que ha perdido mucha, su presión está elevada y está muy pálida.

—¡Dios no, — ella me abraza. — no quiero que muera!

—No lo hará, ella es fuerte saldrá de esta, por favor cuando salgamos de aquí, quiero que ayudes con lo que te dije. ¿Puedes hacerlo?

—¿Qué cosa?

—Tengo algo para Samira, sé que ahora no será el momento de dárselo y que justo lo que estoy pensando puede que no se efectúe, pero necesito que me des todo tu apoyo Hils.

—Cuenta conmigo, Sebástian.

FIN DEL FLASHBACK.

Salí de la habitación donde estaba Samira, ya que ella así lo ordenó, y no podía negarme, tengo bien merecido todo esto he sido un capullo de mierda, y más, la dejé cuando más me necesitaba y ahora tengo bien merecido todas las maldiciones que me quiera decir y todas las desgracias que me puedan pasar.

Nos sentamos en la sala de espera, Fausto y Siena me acompañaban, habían unas revistas frente a mí y las tomé, comencé a ojearlas y, por desgracia de la vida, vi una foto de Samira en la calle como estaba ayer, el titular solo decía que era una prostituta abandonada, suerte que no le tiraron foto a su rostro y tampoco dijeron su nombre. Tiré la revista al basurero, pensaba ¿Cómo lograré su perdón? En sí, lo admito fallé, fallé en todo los sentidos y tengo culpa de todo, pero tenía planeado algo que pensé que se efectuaría a la perfección.

«Y por desgracias Fantiny, no se dio»

— Fantiny, — Dijo Fausto — no te sientas mal, seguro cuando le cuentes lo que tenías planeado, ella entenderá. Además mira el lado positivo, sus tomografías salieron bien, no tuvo ningún derrame y solo era una pequeña inflamación.

Si tan solo fuera así.

— Fausto, agradecería que en este momento cerraras la boca, estoy a punto de tomar una pistola y dispararme yo mismo.

—No lo harás, sino ella se quedara sola.

«Claro que no lo haré»

— Fausto, soy un hijo de puta y uno de los más grandes, sino fuera porque Meroly apareció seguro hubiese sabido quién era el puto cliente.

— No te culpes, nuestro padre pagó por su acto, ahora está casi muerto y en la cárcel, tu tranquilo, ella lo entenderá.

— Y si no es así ¿Qué haré?

Fausto se quedó pensativo por un momento, y yo igual, ¿Qué putadas haré para que me perdone? Solo tengo algo que nos une, pero a la vez nos serpa. No puedo crear, ni implementar nuevas reglas de la nada, tampoco puedo alargar su tiempo conmigo si ella no quiere estar a mi lado.

— ¿La amas? — Preguntó Siena.

No respondí y solo suspiré.

¿La amo?

No, pues lo que siento es algo más grande que el maldito "amor" que todos describen, un amor sobrevaluado y mediocre, un maldito amor ñoño y sin importancia. Entonces no creo que lo que siento sea de esa manera, puesto que me lastima de una manera muy intensa.

«¿Cómo se describe lo que siento?»

Solo el mismo Dios conoce que es lo que de verdad siento o como se le podría denominar. Esto es tan malditamente mortificante y era justo lo que no quería que pasara, que llegara a sentir algo tan fuerte y que esa persona no quisiera estar conmigo.

Pero lo tengo bien merecido.

Es que no entiendo como una mujer se enamoraría de mí, vivo para este trabajo, me acuesto con diferentes mujeres todos los días, no soy del tipo agradable y detallista, entonces ¿alguien me puede amar de esta manera?

Me sentí extraño cuando fui conociendo a Samira, ella no reaccionó como lo espere cuando descubrió lo de Mahia, incluso lo de Meroly si le molesto. Aun así ella me miraba con esa sonrisa tierna sin importar que hiciera, eso me hizo sentir atracción por ella.

Ella no era como las demás, ella era diferente.

Samira tiene toda la razón por estar molesta conmigo, sí, no negaré, actué mal, por alguna razón acepté el trato de Meroly, no diré que me sentí sucio o algo por el estilo porque sería un verdadero hipócrita, y sí, no sé por qué pasó, pero pasó y lamentablemente lo hecho, hecho se queda.

— Fantiny ¿Estas enloqueciendo? Dime, aún estamos a tiempo de encerrarte a ti en uno de estos cuartos. — Habló Fausto.

— ¿Puedes solo guardar silencio por un momento idiota?

— Sebástian, — Habló Siena — No soy quien para juzgarte, y tampoco seré yo la que te diga que fallaste y que tienes que resolverlo pero... ¿Por qué te niegas al amor?

— No lo hago.

—Si lo haces, es tan así que siempre es como las películas, el hombre machista y presumido nunca cree poder enamorarse de nadie, llega esta chica que no es para nada su estilo y lo hace cambiar.

— ¿Y el punto es, Siena?

— El punto está en que sí tú le hubieras dicho al principio que la querías, nada de esto hubiese pasado. Si la amabas ¿Por qué esperar tanto para decirlo?

— Es que al principio solo me llamó su cuerpo y algo más, luego de saber que ella era virgen todo cambió, la miré de otra manera, su inocencia era algo que me debilitaba, no sé cómo pasó o de la manera que pasó, pero me encariñe con ella.

— Si, después de que te la follaras mil veces te encariñas. — Dijo Fausto.

— A veces creo que no eres mi puto hermano.

— Somos arena del mismo desierto, solo que yo si me sé expresar.

—Necesito ayuda, si no hago algo rápido para que me perdone estaré jodido.

—Podemos ayudarte si quieres.

—Necesito ayuda de todos. 

—Por una vez en mi vida estas de acuerdo conmigo, Fantiny. —Sacó su teléfono. —Voy a anotar la fecha.

—No estoy para juegos, ¿me ayudaras o no?

— Por supuesto para que esta la familia.

(...........)

Teníamos más de media hora esperando que le dieran de alta a Samira, más bien preferí que la sacaran del hospital para que la cuidaran mejor en otro lugar , Mimase se quedó con ella todo ese rato, no me permitió el paso a su cuarto y me sentí peor que como me sentía antes, no sé por qué me sentía tan mal o por qué no soportaba la situación, aunque sí, todo esto estaba fuera de lo normal y una situación así jamás me había ocurrido, y menos que involucrara a algún familiar.

Aún me pregunto ¿cómo demonios se le ocurre a mi padre hacer tal acto? 

Entiendo que sea un enfermo, y que yo tenga su sangre, pero jamás se había metido con ningunas de mis chicas, bueno, con Karin sí, porque ella se le ofreció, ahora Meroly y entiendo el por qué se le ofreciera, pero ¿Samira? Ella que apenas conoce la vida, tampoco soy quién para decir que tengo bastante experiencia, porque no es así, solo son 29 años, y en 29 años no se conoce el mundo, pero tengo cierto campo en algunas cosas.

Y pensando bien las cosas, me detuve a analizar todo nuevamente, en pocos días mi padre estará tras las rejas, ahora mismo está en el hospital, y era de esperar, casi lo mato, y debí de hacerlo, casi me quita la chica que ahora me esta enseñando el valor que se le puede dar a la vida. Es tanto así que, ideas y pensamientos un tanto destructivos y suicidas, pasaron por mi mente, me estaban atormentando mis problemas del negocio, los problemas familiares y ahora el problemón de Samira, pero entiendo que lo merezco, fui un gran idiota y muy descuidado.

Y ahí estaba yo, lleno de remordimiento, dolor y angustia desesperante, esperando frente a una puerta de madera pintada de blanco hueso con el número 265, número que vengo viendo por horas, ya que no puedo entrar al cuarto, no quise comer ni beber nada, estaba hundiéndome en la depresión de la manera más fuerte que alguna vez puede experimentar, cerré mis ojos por un momento para calmar la ansiedad de entrar a la fuerza al cuarto y verla, verla de nuevo y sentir el calor de su débil cuerpo cerca del mío, mirar esos hermosos ojos color miel y acariciar su larga cabellera rubia, el tiempo seguía pasando y algo me hizo alzar la vista, una voz suave y unas pequeñas manos se posaron en mi hombro.

— ¿Quiere que le traiga algo señor?

Una enfermera estaba delante de mí, sus ojos color café mostraban pena hacia mí, suspiré y asentí.

— ¿Qué quiere que le traiga? — Volvió a preguntar.

— Son unas cuantas cosas querida, se las voy a anotar.

— Como guste señor.

Saqué un bolígrafo del saco que traía puesto, una tarjeta y le detalle lo que quería para comer, estaba muerto del hambre y sentía como el jugo gástrico destrozaba mi estómago, le extendí la nota a la enfermera con amabilidad, justo cuando le estoy pasando la tarjeta con las especificaciones que quería para comer, la puerta del cuarto de Samira se abre y está, al verme pasar la tarjeta a la enfermera, pone los ojos en blanco y suspira.

¡Maldición!

— Ahora le traigo todo señor.

La enfermera se marchó y sonrió de una forma coqueta, y tenía que ser justo ahora que Samira saliera del cuarto, Mimase le sostenía la mano, tenía vendas en todo el cuerpo "literalmente por todo el cuerpo", sus ojos estaban hinchados y un poco llorosos, pero era obvio.

Le pase la silla de ruedas para que no se lastimara yendo al auto.

—Fantiny, — Habló Mimase —el doctor ha dicho que Samira ya puede regresar a "casa", solo que tiene que estar en reposo por mucho tiempo, su doctor la revisa cada tres días.

—¿Qué tanto tiempo? —Pregunté.

—Descuida, si te preocupa que te sea una carga, puedes ir retirando dinero de mi cuenta hasta que logre sanar, así no tendrás que gastar en mí. —Contestó Samira.

Mujer terca y de mente cerrada, daría lo que fuera por que sanaras rápido y no necesitaría el dinero que yo te he dado, porque eso y más te has ganado, pero es notorio, ya la chica tímida que era Samira cambió, y sí, tengo que ser consiente que todo fue por mi descuide.

—¡Por Dios Samira, para! — Advertí.

— Solo llévame a mi cuarto en el club, necesito estar tranquila. — Tocó su abdomen y un quejido salió de ella.

— ¿Te duele mucho? — pregunté con timidez.

— ¿Y eso te debe de importar ahora?

— ¿¡Tengo que vender mi alma al demonio para que me perdones, Samira!? — Me alteré — ¡Sí, todo y absolutamente todo de ti me importa, si respiras me importa mucho, si comes o no también, si sales o no también!

— ¿Enserio? — Habló con ironía.

— Sí, me importas más que mi propia familia.

— Solo llévame al club, no estoy muy bien de salud como para discutir ese tema ahora.

— No irás al club, no volverás allá hasta que te sientas bien.

—¿Qué pretendes? ¿Quedarme en el hospital hasta que mejore?

Claro que no, jamás te dejaría fuera de mi vista otra vez, si tengo que morir empotrado en una silla todo el tiempo por cuidarla, pues lo haré, no romperé de nuevo la promesa de cuidarla, fui un desconsiderado e inútil.

— Sabes muy bien que no te dejaré, Samira. — Respondí.

— Ahora lo dices, pero créeme que de ti ya no creo nada, haz roto el lazo que se llama "confianza", lo has roto Sebástian, de ti no creo nada.

— Haré que cambies esa actitud hacia mí, ya verás, merezco que ahora mismo sientas odio, rencor y un sinfín de cosas, lo sé, lo tengo bien merecido.

— Me alegra que lo entiendas y que estés claro de lo que siento.

— Sientes muchas cosas que ahora sé que son difícil de explicar, al igual que yo, que no sé cómo lidiar con ellas, pero necesito tiempo para adaptarme al nuevo cambio contigo.

— ¿Conmigo? — Dudó.

— Sí, me refiero a ti — La señalé. — Sé que, cuando conozcas la nueva personalidad, todo cambiará.

— ¡A la verga la personalidad! — Bufó. — Me vale lo que tengas pensado.

Pido que me den autocontrol, sé que la quiero pero ¿Hasta cuándo terminaré de sufrir por su amor?

— ¿Tengo que rogarte, Samira?

— Al contrario, Fantiny. — Sonrió. — Tienes que hacer tantas cosas por mi perdón, que me encantará verte sufrir en el proceso.

— ¿Será tan doloroso?

— Será eso y más cariño, has visto el cielo, pero ahora yo te enseñaré cómo se siente estar en el infierno de vida que llevo.

— Me estas asustando, Samira.

— ¿Deberías asustarte, Sebástian? eres un hombre presumido y que consigue todo lo que quiere ¿No es así? Pues no tengas miedo, solo abstente desde ahora y hasta que se cumpla el año, abstente al acuerdo.

— ¿Eso qué quiere decir? 

 Estaba perdido, no entendía el significado de sus palabras y sentía que cada palabra que salía de ella tenía una frialdad y un plan calculado.

— Saliéndonos de "ese tema" — Frunció el ceño. — ¿Entonces dónde me quedaré? Ya que tu no quieres que regrese al club.

— Vivirás conmigo, en mi casa.

Continue Reading

You'll Also Like

58.5K 1.9K 14
- Por qué no te vas a besarte con alguna chica como siempre lo estas haciendo y me dejas en paz? - Le digo irritada. - Gracias por la oferta - dice...
2.7K 323 17
°°~La caída del muro es donde empezamos Miles de millas y polos opuestos dónde los mundos chocan y los días son oscuros. puedes tener mi número.** pu...
14.8K 1.1K 12
Isidoro se tenia que ir de la casa que compartía con Gustabo, le dijo a Freddy que lo cuide por esa noche y posiblemente otras mas. freddy trucazo a...
241K 16.3K 33
[SEGUNDO LIBRO] Segundo libro de la Duología [Dominantes] Damon. Él hombre que era frío y calculador. Ese hombre, desapareció. O al menos lo hace cu...