Capítulo 4

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Samira Rockefeller

Prostituta, sí, ahora prostituta, el término que el señor Fantiny me explicó no es el término ¨prostituta¨, sino, que solo sería la atracción del club, nadie podría tocarme aceptó él.

La joya de su club.

Su adoración.

La verdad que la idea de ser tocada por alguien me desagrada bastante. Le explique y aun así acepté. Mis pensamientos debatían en el momento de si aceptar o no hacerlo. Pero el poco juicio y cordura que acompañaban mi mente decían lo contrario.

Jamás he estado con un hombre, no porque no encontrara con quien estar sino que no era el momento, ni el lugar, ni los chicos indicados además, las repetidas veces que mi padrastro entraba en mi cuarto e intentaba forzarme a tocarlo me traumaron bastante, no logró por suerte, pero aun así eso no le detenía que lo intentara, siempre intentaba rosar su asqueroso miembro contra mí, me obligaba a besarle, a tocarlo, era lo más desagradable que pude sentir.

Por más veces que le dije a mi madre lo que pasaba con Bob, nunca me quiso creer, al contrario decía que estaba loca y que solo lo decía porque Bob me atraía, me cansé de esa vida, sabía que Samaira Rockefeller no se interesaba por mí y solo estaba más atenta a sus diseños y fama. Me cansé de esa basura de vida que llevaba, desde que murió mi padre y Bob llego a nuestra vida él se encargó de volverla una miseria, mi madre finge felicidad a su lado pero, como dije, solo finge, él, al igual que ella, viven poniéndose los cuernos unos a otros, no sé para que siguen casados si ni siquiera se quieren.

Desde ese momento deje de ser la hija de mi madre para convertirme en su estorbo, lo que fue lo dejo de ser en un abrir y cerrar de ojos.

Ya no me importa lo que pasaba o pase en sus miserables vidas, me fui de casa a vivir en la calle, deje mi vida de lujos y privilegios por salir sola al mundo, no pensaba en otra cosa que en suicidarme, quería subir al "EmpireState" y tirarme como toda una dramática, luego pensé que sería muy viral en las redes así que la mejor solución sería ser atropellada y dada por muerta.

Y listo, adiós Samira Rockefeller.

Lo que no funcionó por desgracia, me encontré con este hombre, tiene carácter autoritario, su humor es cambiante, sus ojos son de un color llamativo, te pierdes en su mirada por unos segundos, su actitud es de quererse salir con la suya siempre, habla con seguridad y convicción.

Es dominante.

Repasaba su rostro que estaba bastante cerca del mío, Sebástian Fantiny era algo de qué hablar, tenía una traje negro que, por la etiqueta que vi fue hecho por mi madre, pero el diseño del traje lo he hecho yo, era un traje negro a la medida, la camisa que tenía por dentro hacía notar su cuerpo bien trabajado, su perfume hacía que cayera embobada por él, no había olido esa fragancia hace tanto tiempo, me trajo muchos recuerdos. Tiene unos finos y delicados labios, con su dentadura perfecta y una sonrisa atrapante.

"Contrólate"

Olvidé por un momento la realidad, tendría que acostarme con él y ni siquiera tengo experiencia, mi mente en estos momentos está un poco revuelta, no sé si tome la decisión correcta.

Para ser totalmente sincera, tengo miedo. 

— Dime ¿qué es para ti prostitución Samira? ¿Qué crees que hago en mi club?

— Prostitución es acostarte con los hombres, con cualquiera, donde sea y como sea. 

— Una definición algo pobre pero, la prostitución es la práctica de mantener relaciones sexuales con otras personas a cambio de dinero u otros beneficios económicos. De eso se encargar mis chicas. 

Acuerdos [Vol1]  [Trilogía Relaciones Tóxicas]Where stories live. Discover now