«Quarante-Quatre»–Couple officiel.
Observo a Tiago que me mira con una pequeña sonrisa, estoy seguro de que él hizo el trabajo pero por lo tanto me siento mal, debía haber sido yo el que golpeara ese bastardo bueno para nada, inservible, poco hombre..
Cálmate Adiel.—dice Tiago mientras bebe un poco de su gaseosa.—yo arreglé el problema y sabes que Wynn también pondrá de su parte en eso.
Hice una mueca.—quiero romperle la cara.—gruñí por lo bajo y luego recordé como mi princesa me retuvo de dejar a esa cosa inservible sin rostro.—viste a Adriana, ¡Dios! esa niña me tiene enamorado.—sonreí.—Es tan fuerte. Si no me hubiera sostenido, de seguro ahora estaría en la carcel.
Aquí vamos otra vez.—suspiro Tiago mientras se ponía de pie, se acercó a mí y me tomó por los hombros.—no voy a permitir que uses esos puños. Sería horrible verte de nuevo en ese lugar, deja que Tío Tiago se encargue de esas cosas de las cuales tú no tienes el derecho de hacer.
Pero Tiago, él la tocó.—grito recordando la frustrante escena de la asquerosa mano de es viejo.—¡es como si me hubiera tocado a mí! Como si esa escoria fuera dañado una parte de mi.—gruñí.—dices eso porque tú no la viste llorar, tú no fuiste el que se sintió como un completo idiota por no proteger a su chica. Yo fuera preferido romperle la cara.
¿Y quedar mal con Dios?.—frunció el ceño, haciéndome caer en cuenta de que tal vez la violencia no es la mejor solución.—si vez, déjalo todo en manos de este viejo tío tuyo y verás que a ese hombre jamás pondrá una mano sobre ninguna de sus empleadas.
Quiero que lo despidan.—digo tomando asiento y pasando mi mano por mi cabello.—busca una manera de sacarlo de ese lugar, yo sé que Adriana deseaba trabajar ahí.—oigo mi celular timbrar en algún lado de la sala de estar, donde estamos sentados Tiago y yo.—y también encuentra un buen abogado. No dejaré que esa escoria se salga con la suya.
Claro que no dejaremos que es tipo se salga con la suya.—sonrío sacando su celular de su bolsillo y se puso de pie luego de presionar unas cuantas teclas.— Agente Bishop como le va, necesito un favor suyo...
Lo escuché alejarse y rápidamente tome el celular que estaba sobre la mesa.
Dios te bendiga.—contesté mientras trataba de hacer brotar una risa de mi.—¿piensas regresar algún día hermano?
Buenas.—escuche a Nano decir.—necesito que me digas la verdad Lawrence.—me removí inquietó.—¿cómo está Adriana?.
Fruncí el ceño, como era posible que estando en otro país él estuviera a el tanto de todo lo que pasaba aquí.—¿un momento.. Tú como sabes todo eso?.
Suspiró.—debí hacerte la sorpresa hoy a las 11A.M cuando llegara a la iglesia y gritara !sorpresa! dañando así tu momento de felicidad, pero en cuanto Wynn llamo pidiendo que regresara, Hombre tú sabes que a ese tipo no se le puede negar nada..
Fruncí el ceño.—Nano no entiendo de qué hablas..
Voltéate.—lo escucho decir. Obedezco a su pedido y me volteo observando cómo su piel canela y sus ojos me observan con una sonrisa.
Me pongo de pie dejando caer mi celular y caminó hasta el, observó que mama Madne no este en ningún lugar cerca y corro a el estampando mi puño sobre su vientre.
Bastardo.—gruñí mientras pasó mi mano por su abultado cabello y tiro de el, haciendo que el grite de dolor y su puño se estampe contra mi estómago.—Aush.
Cierto que duele ah.—grito tomándome también por el cabello y tirando de él.
nunca entenderé porque vuestra amistad es tan extraña.—y ahí estaba la ya tan conocida voz de mama Madne.—suéltense no lo vuelvo a decir.
Sabía que nano no obedecería y que terminaríamos golpeados por la cuchara de madera de mama Madne.
Tú me sueltas yo te suelto.—gruñí del dolor mientras que el asentía.—pero tienes que soltarme a el mismo tiempo. Nada de trampas nano te conozco.—gruñí aún más fuerte cuando volvió a golpear mi estómago.
Listo suéltame y te suelto a la cuenta de tres.—ríe mientras inclino su cabeza un poco más y lo observó, entrecierro mis ojos hacia el confiando de que esta vez sí obedecerá a la petición de Mamá.
Uno dos...—empiezo a contar confiado de que él realmente lo hará.
Tres.—dice y lo suelto mas el descarado me engaña golpeándome con más fuerza haciendo que caiga a el piso y me retuerza de dolor.
No confíes en mí .—veo a mama Madne acercarse a él y golpearlo con su famosa cuchara de madera.—eso duele mamá.—dice mientras sostiene la cabeza.—mejor dame amor mujer, no golpes.—dice haciéndola reír. Luego extiende sus manos hacia ella.
¿Me trajiste regalo?.—dice entrecerrando sus ojos hacia el, Nano asiente repetidas veces,
Luego hace un puchero mientras abre sus brazos.—ya está te mereces un abrazo grande y un montón de besos por traerla algo a tu mami preferida.—ríe,mientras deposita besos en las canelas mejillas de nano quien parece completamente feliz de que le den tanto amor.
No le digas nada a tu madre.—dice mamá Madne mientras que golpea con su mano el trasero de nano.—ya está muy grande para que te siga pagando en la cola.
Igual me gusta que me peguéis mamá, me hace sentir como un crío.—ríen mientras yo me arrastro por el suelo como muerto viviente,
Me agarro de la pata de la mesa y me empujó hacia arriba volviendo a estar sobre mis dos pies.
Sigues siendo un crío.—digo mientras que mama Madne me regale una mala mirada y alza su cuchara hacia mi. Elevó mis manos.—Pero si es un Crío mamá mira cómo me golpeó. Dame cariño a mí también.—extiendo mis manos como niño chiquito y dejó salir mi labio inferior mientras lo hago temblar, ríe y se acerca a mí y planta un pequeño beso en mi mejilla.
Es todo.—dice luego de besar mi mejilla.— dile a tu novia que te de más cariño, Hijo últimamente está siendo insoportable con eso de los abrazos.—niega mientras se ríe, nano apoya su comentario y luego mama Madne se retira dejándonos solos.
¿Como has estado?¡ me alegra volver a verte!.—dice nano mientras me da un verdadero abrazo, palmeo su hombro y le
Correspondo.
Nos separamos y
Tomamos asiento en la sala de estar. Pasa sus manos por su frisado cabello. Luego me observa y por su mirada estoy seguro de que dirá algo que me hará sentirme inquieto.
Supe lo de Adriana.—dice haciendo una pequeña mueca, cruza sus brazos y los pasa por detrás de su cabeza.—¿como te sientes con eso?
Suspiró fuertemente.—me siento como el asco.—digo mientras siento mis puños formaráse.—es tipo toco a mi princesa, Nano.
Puso su mano en lugares donde yo jamás lo e echo. Eso me hace hervir la sangre.. No sé qué hubiera pasado si fuera llegado unos minutos tarde quizás ese hombre la fuera destruido para siempre..
Mi cuerpo se tensa solo a la idea de pensar que tal vez algo así le pasara a mi Corona, creo que morirá. No sería capaz de ser el mismo hombre porque estaría seguro que rompería cada uno de los huesos de es tipo.
Me estás diciendo que ese tipo ¿toco a mi cuñada?!.—su cara es todo un poema, luce sorprendido y noto como sus ojos van cambiando a unos para nada felices.—dónde está es asqueroso, yo me encargo de el.—dice haciendo tronar sus dedos y golpeando su puño en su mano abierta.—yo le arreglo esas manos a es tipo.
Río. Mientras le pido que se calme.—igual Tiago y el abogado tomarán cartas en este asunto. crees que me quedaría quieto después de ver cómo mi chica estaba aterrada.—lo veo negar.—jamás, mi deber como novio, futuro esposo y amor de su vida es cuidarla y protegerla. Ningún ser humano tiene el derecho de faltarle respecto a una mujer ajena.
Veo como nano me regala una mirada pícara, luego pasa sus manos por su cara.—debo decir esto porque siento que me lo he guardado, estoy de acuerdo con lo que estás diciendo pero hermano ¿¡Cuando se van a besar?!.—abro mis ojos observándolo con asombro.—se conocen de toda la vida, estuvieron separados tres años. Ahora por fin está a tu lado, ayer fue la ocasión perfecta para besarla y te conozco estoy seguro que lo único que hiciste fue besar su frente y abrazarla.—se cruza de brazos refunfuñando por lo bajo.—¡hermano! Tienes veintitrés años y ya es como hora de que pruebes los perfectos labios de tu chica.
«cuando éramos novio Ky y yo, En muchas ocaciones nos besamos y se sentía hermosamente genial.—veo como sus ojos brillan.—no necesitaba manosearla pero es claro que siempre estaba ese deseo por besarla y ella nunca me lo ponía fácil sabes.. Hacia siempre algo para que estuviéramos cerca y la besara y ¡Dios santo! Yo realmente disfrutaba de sentir su hermosa boca sobre la mía..
Muerdo mi lengua para evitar decir algunas cosas de más, porque me es inevitable no desear que esa risa y es brillo en los ojos de mi hermano vuelva. Aún se nota lo mucho que la ama.
Así que tú y Ky se pasaron todo su noviazgo besándose.—cuestionó mientras que veo por primera vez como sus mejillas se tornan roja.
Bueno no todo el tiempo..—lo veo balbucear, es la primera vez que ha perdido su típica sinceridad.—olvidemos eso. Tengo hambre.—dice de repente cambiándome por
Completó el tema.—iré a ver a mamá Madne y tu hermano,
Piensa en una manera romántica de robarle un beso a tu chica,
Porque estoy seguro de que ella también desean probar esa cosa horrible que tú haces llamar boca.—dice sacándome la lengua y gritando por el pasillo.
Quizás, es hora de que nos demos aunque sea un beso.—me
Cuestionó mientras me pongo de pie y camino hacia la cocina, pues gracias a Nano me ha dado un poco de hambre.
***
Mastico mi labio con nerviosismo. Son las 10:45 de la mañana y mi estómago está echo un nudo,
Observo mi atuendo en el espejo central de el pasillo principal.
Mi camisa gris y mi traje negro me hace lucir como un chico que está a punto de pedir matrimonio, desarreglo mi cabello mientras guió mis manos hacia mi cuello y arreglo La pequeña corbata color rosada que fue enviada por mi princesa.
no queríamos ser obvios a pesar de que su falda hacia un completo juego con mi corbata.
Sacudí el traje, estoy usando esto solamente porque ella lo desea, si fuera por mí solo llevaría pues la camisa y unos pantalones negros, pero deseo complacerla pues son pocas las veces que logró hacerlo.
Tío.—escucho la infantil voz de mi Savannah, viene corriendo hacia mi, lleva puesto un pequeño vestido de color rojo con pequeñas flores y una diadema blanca que hace juego con sus zapatos blancos.—¿como me veo?.—dice mientras se pone a saltar, la tomó por su pequeña mano y la hago dar vueltas.
Como toda una reina.—me acuclilló delante de ella. Observo sus ojos iguales a los de su padre.—Usted es una Reina.—beso su mejilla cuando ella se lanza a mis brazos.
Soy una princesa.—dice pronunciando con dificultad la erré.—y debo lucir hermosa.—sonríe enseñándome esa sonrisa tierna y sin ninguna pizca de maldad.
Como ordené su majestad.—digo mientras tomo su mano y beso su dorso y hago una pequeña reverencia, ella toma el borde de su vestido y se balancea hacia atrás haciendo que sus mejillas se torne un poco Rojas.
Beso su mejilla mientras que la tomo en brazos, acomodó mejor su vestido para que no se le vean sus piernas y camino con ella hasta las escaleras de mármol. La bajo y tomó su mano mientras nos guiamos hasta abajo, ella ríe y comienza a hablar de todo lo que ha visto en el la guardería. La escucho atentamente y la cuestionó para saber si ama la guardería dónde está.
Si.—dice cuando llegamos a la última planta, se mueve intranquila.—aunque hay una niña que no me quiere.—hace un pequeño puchero.
Vuelvo acuclillarme delante de ella.—sabes que Papá, Mamá, Tiago, Valeska, Aliee. Tío nano y Jassiel te aman y te quieren mucho cierto?.—digo mientras que aprieto con mis dedos su gordota mejilla. Ella asiente y luego frunce el ceño.
¿Tú no me quieres tío Abi?.—sus ojos se llenan de es líquido que me hace querer huir, niego repetidas veces mientras que trato de evitar que suelte el fuerte llanto.
Yo te amo, mucho.—clavo mis ojos en los suyos, luego sonrió cuando veo que parece convencida de mi declaración.—¿vamos con papá si?.—asiente extendiéndome su mano, la tomó y nos guiamos hasta la sala de estar, donde está toda la familia.
Savannah suelta mi mano cuando llega a la sala, observa a su papá quien luce un traje similar a el mío y cuando sus ojos an echo el contacto una enorme sonrisa se dibuja en el rostro de Wynn cuando su pequeña corre a el pidiéndome que la cargué. La toma y la sienta en sus delgadas piernas, ella ríe y besa su mejilla. Observo la escena maravillado. por fin Wynn a obtenido lo que tanto deseaba, Una familia feliz y fuera de peligro.
Hago un recorrido con la mirada y veo a Jassiel arreglar el vestido de su hermana Aliee, quien parece triste de ver cómo su padre abraza a Savannah, Jassiel se inclina un poco sobre Aliee y besa su mejilla haciendo que ella ría y deje de observar a su Gemela con
recelo.
Por lo general Jassiel no es de esa manera con las niñas, siempre vive pegándoles y empujándolas y
Aunque Camila lo regaña no entiende de dónde viene ese comportamiento de el hacia sus hermanas pequeña.
Carraspeo llamando la atención de mi familia.—¿nos vamos?.—inquiero.—Tiago.—el aludido me observa.—¿dónde está Valeska?.
—está con la abuela, en la tarde la traerán.—dice mientras se pone de pie y camina hasta a mí.
Y por lo otro ya está echo.—susurró, golpeando mi hombro.
Haciendo que mis músculos se relajaran.—es lo bueno de tener muchos contactos en la policía.—guiño un de sus ojos, mientras yo negaba riendo.
Volví a prestare atención a mi familia, Jassie se pudo de pie y vino corriendo hacia mi.
Nos vamos tío.—preguntó, balanceándose sobre sus pies, lo observe lucia guapo como su tío en su pequeño atuendo de color cafés, sus ojos azulados como los de su madre hicieron contacto con los míos. Asentí mientras le extendía la mano. El negó.—estoy muy grande tío para que me des la mano.—refunfuñó por lo bajo y corrió detrás de Tiago que estaba justo por salir de la sala de estar.
Vámonos porque ya el culto está por comenzar.—dice nano tomando a Aliee en sus brazos, luego observa el reloj sobre la mesa y chasquea la lengua.—si seguimos aquí jamás llegáremos.—inquiere.
Suspiró tratando de despejar mi mente y eliminar algunos nervios.
Si.—dice Camila, mientras toma a Savannah de las piernas de su esposó y la posiciona sobre su cadera.—ya casi es hora de ver a Adiel presentarse con Amira. Esa muchacha si me cae bien. Mejor que la Minna Cooper esa.—rueda sus ojos mientras que observo a nano.
Es Adriana.—decimos a él mismo tiempo, haciendo que ella ruede los ojos y Wynn se ría con fuerza. Ganándose un regaño por parte de ella. Luego este se pone de pie y deposita un beso en la comisura de sus labios haciendo que una pequeña risa brote de ella.
Definitivamente amo a mi familia.—susurró, mientras dejo que los nervios regresen con fuerza.
***
Por primera después de tanto tiempo, tenía miedo de ser el centro de la atención en aquel lugar, nano por su lado trataba de evitar que sus ojos se encontrasen con los azulados de Ky. Era de comprender ellos aún estaban heridos y aunque yo hubiera deseado decirle a Nano lo que realmente pasa, no sería bien visto pues Ky jamás me lo perdonaría.
Observo desde mi puesto el altar, que está decorado por diferentes Flores, las cortinas decorativas son verdes con algunas decoración beige. El púlpito es en vidrio tiene escrito Iglesia Pentecostal unida de Canadá. Grande en letras cursivas. Me gusta este lugar, pues cuando entro olvido por completo mis problemas y me concentro en ser un adorador. Ya que Dios ama los corazones que se humillan delante de él.
El templo está completamente lleno, David y Gemma están sentados unas dos bancas atrás de mi princesa que luce increíblemente guapísima con esa falda rosa clara y su camisa blanca, a pesar de que me moleste un poco ella decidió lucir tacones que hicieran juego con mi reloj gris.
La observo un poco hasta que Sandra una de las coristas, le murmura algo en su oído y ella parece sorprendida, se voltea hacia mí y tratando de ser lo más prudente posible le guiñó un ojo y ella me sonríe complacida. Veo que alza su mano y se abanica con ella, realmente luce nerviosa y eso produce de una extraña manera una sensación de felicidad en mi corazón.
El culto, sigue su transcurso. Los niños cantan, y me alegra ver a Mis sobrinos cantándole a Dios. Observo a Jassiel quien no deja de sonreír cuando canta esa tan conocida alabanza. Cantan y hacen los animalitos con sus dedos. Sonrío y saco mi celular y los grabó. Son pocos los momentos que puedo ver a mis sobrinos participar de las cosas de Dios y eso me produce ciertos placeres que no se comparan con nada en el mundo.
Luego de el pequeño momento de los niños, ellos se van a su clase y me sorprende ver cómo Jassie toma de la mano a sus hermanitas y las guía con los demás niños.
Luego de verlos irse, el pastor habla de la ofrenda, y por lo general ese tema me producía miedo pues me decía a mí mismo que el dinero que las ovejas dejaban eran para el pastor, más el hermano nos explicó que ese dinero es para el fondo local y para las demás obras, que el dinero que las ovejas dan el no recibe nada de ellas. Pues en las finanzas son muy transparentes, pues más que personas del corriente somos hijos de Dios y debemos marcar esa diferencia.
Acepto el sobre que el hermano Pablo me ofrece y marcó la fecha e introduzco el dinero y la ofrenda de la semana. Pasó mi lengua sobre el sobre y luego me pongo de pie junto con los demás hermanos y llevo mi sobre a el alfolí. No es que Dios necesite el dinero pues todo le pertenece, pero por lo tanto su iglesia necesita ciertas cosas, como cuando se daña algún instrumento pues de ese dinero se toma para reponerlo.
Vuelvo a mi puesto luego de regalarle una mirada a mi corona, noto que su falda está un poquito más arriba de lo usual, así que le apuntó haciéndole señas para que la baje un poco más. Asiente y tira de ella escondiendo un poco más de esa perfecta piel pálida que tanto amo. Le sonrió y luego veo como apunta mi cabello hace una pequeña mueca y algunas señas para decirle que tengo el pelo muy arreglado. Asiento y pasó mi mano por mi cabello dejándolo como a ella le agrada. Alza sus pulgares cuando está satisfecha y vuelve su mirada hacia delante.
Vamos a pasar a la mejor parte.—dice mientras bebe un poco de su agua. La deposita sobre una pequeña mesa, carraspea y prosigue.—cuando digo esto, estoy hablando de la palabra.—entrecierra sus ojos hacia el pueblo provocando algunas risas.—fuera de bromas, pónganse de pie como reverencia a la palabra de Dios. Y luego abran sus Biblias en San Marcos 12:29.
Todos nos ponemos de pie,
Hago un recorrido visual y me detengo cuando veo a David observarme y regalarme un asentimiento. Luce más fornido y su piel está más bronceada que en mis recuerdos, su cabello Café y su camisa turquesa que hacía juego con el vestido de su amada esposa. Que lucía un poco más pálida de lo normal. Su cabello está más largo y con mucho más brillo.
Volvía a observar a delante cuando el pastor pido que repitiéramos el versículo.
oye Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor UNO es" (Marcos 12:29).—pronunciamos todos a una voz luego nos pido que tomáramos asiento.
E titulado esta predica: La unicidad en Dios.
El pastor ojeo algunas hojas de la Biblia y carraspeo, ya habíamos orado y presentado nuestros corazones a Cristo, para que el hiciera en ese día lo que bien le placiera.
Trataré de hacer este servicio lo más corto posible pues a el final tendremos un momento especial.—dijo sin enfocar vista en nadie,
Algo que realmente agradecí.—
Cuando a Jesús se le preguntó que cuál es el primer mandamiento de todos, su respuesta fue: "...oye Israel; el Señor nuestro Dios, el Señor UNO es" (Marcos 12:29).
«Esto es monoteísmo (creencia en un solo Dios) y para describir esta doctrina utilizamos la palabra UNICIDAD cuyo significado, según el diccionario de la real academia de la lengua española (DRAE), es "cualidad de único"; y para ÚNICO encontramos que significa SOLO y SIN OTRO de su especie, extraordinario, excelente, INDIVISIBLE.—decimos amén, el pastor bebe un poco de agua y prosigue.—
«Algunos tratan de explicar la doctrina del Dios único con la palabra UNIDAD; sin embargo, el DRAE define esta palabra como UNIÓN (entre otros significados), es decir, juntar dos o más cosas entre sí, haciendo de ellas un todo; por tal razón es incorrecto utilizarla. La doctrina unitaria calza muy bien en la llamada santísima trinidad ya que, según la definición de esta última (trinidad), son tres personas distintas que forman un solo Dios verdadero; es decir que es el producto de la unión de tres partes (Padre, hijo y Espíritu Santo) para formar un todo (Dios).
Sabemos que nuestro Dios no es una mezcla o unión, "Dios es Espíritu..." (Juan 4:24) él no es persona, él es ÚNICO, INDIVISIBLE, sin otro de su sustancia o esencia como dice 1Timoteo 6:16 "el ÚNICO (del griego monos: solo o solitario) que tiene inmortalidad, que habita en luz inaccesible...", esta es la DOCTRINA DE LA UNICIDAD DE DIOS.
El PADRE
En Génesis 1:2 leemos: "... el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas" y si "Dios es Espíritu" y es SANTO podríamos decir que el Espíritu Santo se movía en esas aguas (DIOS MISMO). Cuando Dios habló y dijo "...hágase la luz..." hizo una función de padre ya que engendró por medio de su palabra. Engendrar no solamente es procrear, el DRAE también menciona que es causar, ocasionar y formar; y siendo así Dios es el causante, el ocasionador y formador de todo lo que existe. A él se le conoce como el PADRE en la creación y mientras se movía sobre la faz de las aguas era Dios expresándose para que por medio de la palabra fueran creadas todas las cosas.—asiento comprendiendo las fuerte palabras.
Jesucristo le dijo a Nicodemo "si os he dicho cosas terrenales y no creéis, ¿cómo creeréis si os dijere las celestiales?", dicho de otra manera, Jesús está diciendo que usa términos terrenales para explicar los celestiales; por tal razón Dios se atribuye un título terrenal (PADRE) para que podamos entenderlo. Isaías 64:8 dice: "...Jehová, tú eres nuestro padre...", también salmo 33:6 expresa: "por la palabra de Jehová fueron hechos los cielos, y todo el ejército de ellos por el aliento de su boca", esto nos explica la razón por la cual ese Santo Espíritu (Jehová del antiguo testamento), es llamado PADRE; pues "en el principio CREÓ (ENGENDRÓ: CAUSÓ, FORMÓ) Dios los cielos y la tierra" (Génesis 1:1).—se escuchan amenes y aplausos.
EL VERBO
En Juan 1:1 dice: "En el principio era el verbo, y el verbo era con Dios, y el verbo era Dios", el verbo es la palabra de Dios, esa voz que se escuchó en la creación; pero también se nos hace mención de que esa palabra o verbo "era CON Dios", esta conjunción (con) une y hace énfasis en lo inseparable de Dios y su verbo (palabra).
Por medio de la innovación tecnológica nuestra voz puede ser escuchada en cualquier parte del mundo y nadie puede decir que esa voz tiene una identidad diferente a la de nosotros ya que fluye de nuestro interior, es CON nosotros, es inseparable de nosotros; y aunque sea capturada en un CD u otro medio no podemos decir que es otro ser distinto, por eso Juan expresa, inspirado por el Espíritu, que el verbo (la palabra) "era Dios".
Juan 1:14 dice: "y aquel VERBO FUE HECHO CARNE, y habitó entre nosotros", Jesús es el verbo hecho carne; 1 Juan 1:1 lo menciona diciendo: "... lo que hemos visto con nuestros ojos, lo que hemos contemplado, y palparon nuestras manos tocante al verbo de vida (Jesús hecho carne). El Espíritu de Dios (Dios mismo porque "Dios es Espíritu") habitó dentro de ese cuerpo, así lo declara el apóstol Pablo en 2 Corintios 5:19 "Dios estaba en (dentro de) Cristo reconciliando consigo al mundo". Se puede decir que hubo una fusión entre la deidad de Dios (su Espíritu) y el verbo hecho carne (su humanidad) ya que no se puede separar a Dios de su verbo o palabra; pues como alguien en cierta ocasión expresó: "la palabra es el vehículo del pensamiento", y en el pensamiento de Dios, su plan de salvación, estaba el redimirnos manifestándose en un cuerpo a quien el mundo conoció con el nombre de Jesucristo.
Vamos a dejar el tema aquí.—dice el pastor observando el reloj sobre su muñeca.—Sabemos que Dios es Uno y uno su nombre.—digo amen pues e comprendido que el poder Mora en un solo Dios no en tres.
Vamos a despedir este servicio pero no se vayan a ir.—dice, entrecerrando nuevamente sus ojos hacia nosotros.—nos despediremos de este lugar más Nunca de su Santa y perfecta presencia.—le hace una señal a los músicos y estos empiezan a tocar una dulce alabanza.
Oramos y estamos casi a el momento donde mi corazón desabrocha alegría y está por explotar de los nervios.
Señor nos despedimos de este lugar pero nunca se tu Santa presencia llevamos con bien a nuestras casas y guardamos de todo peligro en tu nombre santo amen.—termina diciendo el pastor.
Amén.—dice el pueblo.
Nos empezamos a saludar los unos con los otros. Saludo y sonrió mientras que busco a Adriana con la mirada.
Hermanos por favor no se vayan tenemos algo especial.—dice el pastor cuando ve a los hermanos despidiéndose, algunos fruncen el ceño.
Mis manos están increíblemente humedad. Siento mi corazón y latir con tanta fuerza que me es imposible creer que aún estoy vivo.
Adiel y Adriana venga para acá.—dice el pastor, haciendo que el silencio reine en el lugar. Las mejillas de Adriana están tan Rojas que por momentos creo que van a explotar.. Me posicionó en el lugar donde el pastor me indica.—estos dos jóvenes.—nos apunta, haciendo que mi pequeña se acurruque un poco más hacia mi.
Veo a los jóvenes acercarse y sacar sus celulares, nano es el primero en llegar hacia nosotros y luce sorprendido de ver que nuestros atuendo combinan a la perfección.
Han decidido presentar su relación delante de Dios y su pueblo.—asiento a lo que el pastor dice y los jóvenes silban haciendo que mi pequeña se sonroje con más fuerza.—y quieren que ustedes los lleven en oración.
«Gloria a Dios por estos jóvenes. Que están siendo de ejemplo para aquellos que los están viendo.—sonríe con orgullo.—sé que tendrán un noviazgo poderoso en el señor. Y la próxima vez que estén parados aquí será para anunciar el matrimonio.
«como ustedes bien saben usamos la palabra Noviazgo pero lo que ustedes están haciendo ahora delante de la iglesia de Dios es comprometerse, a amarse y amar a Dios por encima de cualquier circunstancia.
Adiel.—pronuncia mi nombre haciendo que me volveré a verle.—toma la mano de Adriana y arrodíllense.—entrelazo mi mano con mi corona y veo como nano se acerca y me entrega un cojín lo pongo en el lugar donde Adriana va a postrase. Los chicos hacen comentarios tiernos que nos hace sonrojarnos.
Si el pueblo de Dios se puede unir a mi voz para clamar por esta pareja. Para que sea el señor guardándola u llevándola con bien a su destino. Que sean más Adela te un matrimonio feliz y honroso.—la mano de Adriana aprieta la mía y la observo, un segundo luego inclinó un poco mi cabeza y cierro mis ojos cuando empiezo a escuchar la voz de los hermanos.
Oro con fuerza mientras que mi voz se une a la de mi corona y la del pueblo. Estoy sorprendido de lo que soy ahora, un joven con propósito y con una mujer asombrosamente fuerte, mi Corona, mi princesa el tesoro de Dios para mi vida. Ella aprieta más mi mano haciéndome sentir que esto es realmente real. Que estamos juntos hasta el final que nuestro amor no se mide por el tiempo que estemos juntos si no porque Dios a estado de nuestro lado. Mi corazón rebosa de felicidad. Mis ojos se llenan de lagrima y lo único que deseo es que este sentimiento sea así para siempre. La amo, la amo con todos sus defectos porque son perfectos para mí, ella saca lo bueno que una vez creí no tener, conocerla no sólo trajo a Dios a mi vida, si no que por fin comprendí que puedo llegar a ser amado a pesar de mi pasado.
Ella es mi regalo para ti.—escucho una voz dulce en mi cabeza. Mis ojos se llenan de lagrima y sollozo de felicidad. Dios esta hablándome a mi, a alguien que en su momento fue inservible y por quién nadie daba nada. Estoy aquí a el lado de ella y confiando en Dios lo estaré siempre.
Terminamos la oración, y me pongo de pie, luego le extiendo mi mano y ella la toma su cara está bañada en lágrimas, saco mi pañuelo y lo paso por su cara. Sonríe a travez de sus nuevas lágrimas, siento el flash darme en el costado de mi rostro. Pero estoy tan concentrado observándola que poco me importa el resto.
Tómenle fotos parece embobado.—escucho risas y distingo el fuerte acento Caleño de mi mejor amigo.
Te quiero.—la escucho decirme y sollozo sin importarme que estemos en medio de tantas personas y que seamos en este momento el centro de atención.—y voy a quererte siempre.—sonríe con dulzura. Y quita el pañuelo de mi mano y limpia mis lágrimas jamás pensé que podían llorar de felicidad.
Te quiero más. Y no sé cómo explicar este fuerte sentimiento que siento por ti.—digo y escucho algunos sonidos de sorpresa.—prometo darte siempre lo mejor de mi.—nuevamente mis ojos se llenan de lagrima y no me siento incómodo dejándolas salir porque sé que estoy en un lugar donde puedo permitirme eso.
La atraigo a mí y la abrazo los chicos silban y toman fotos, terminó por cerrar mis ojos y beso su coronilla repetidas veces. Sin dejar de decirle lo mucho que la quiero.
Te quiero mucho mucho.—digo en un leve susurro que no pasa desapercibido para nano. Quien tiene sus ojos llorosos.—te quiero tanto, mucho, eternamente, excesivamente..
Ríe sobre mi cuello y luego planta un pequeño beso. Nos separamos y dejó que las chicas la abracen y lo chicos palmean mi hombro felicitándome.
sabía que ustedes terminarían así.—dice Ismael mientras golpea con fuerza mi hombro.—¿ella es la buena.?—cuestiona mientras se hace el silencio entre los chicos y lo único que escuchamos son los gritos de felicidad de las chicas.
Observo a mi princesa y me doy cuenta que deseo poner un anillo en su mano para que sea su más Feliz. Que deseo poner todo mi empeño y fuerza para que esa sonrisa que tiene en esté momento sea solo de felicidad.
Una sonrisa bobalicona aparece en mi rostro. Algo que no pasa desapercibido para nadie.—Ella, es la bendición de Dios para mi vida. Y usted y yo sabemos que Dios Jamás se equivoca porque el todo lo hace perfecto.—afirmó mientras que los chicos sueltan un grito de asombro y me felicitan nuevamente.
Pasan algunos segundos y hablamos reímos y vemos algunas personas despedirse, observo nuevamente a mi corona. Que párese un poco adolorida por sus enormes tacones, cuando será el día que entenderá que nunca me alcanzara aunque se ponga esos horribles zapatos que solo la hacen sufrir.
Hago una mueca mientras me disculpo con los chicos y me acerco a ella que está sentada con las jóvenes de la alabanza y las maestras de escuela dominical.
Luego de la presentación, Wynn y Camila fueron a buscar a los niños y decidieron irse. Dijeron que yo debía pasar tiempo con mi pequeña sin ser interrumpidos por los llantos y rabietas de las gemelas pues estaban un poco celosas.
Con su permiso señoritas.—todas me observan mientras que le extiendo la mano a mi princesa. Corean un pequeño chillido que me hace sentir incómodo.—voy a robarme esta señorita.—digo clavando mis ojos en los de ella. Toma mi mano y se disculpa con las chicas.
Nos alejamos un poco de todos esos ojos curiosos, veo que mientras camina hace pequeñas muecas de dolor. Cuando veo que estamos lejos de el grupo hablo.
Amor...—digo en tono de advertencia, ella conoce mi mirada sabe cuando algo me disgusta y en este momento sus zapatos es uno de ellos.—porque te pudiste eso.—hago una mueca mientras apuntó sus horrendos zapatos, que ella esquiva mi mirada.
Quería verme bonita amor, pero no aguanto más los zapatos.—se queja, suelto un pequeño suspiró acompañado de una sonrisa.
¿Tienes otros zapatos?.—digo mientras la hago sentar en una de las últimas bancas. Asiente.—¿en tu carro?.—cuestionó a o lo que ella afirmó.
¿Puedes ir por ellos?.—cuestiona pasando su mano por mi barbilla.—te quedo hermosa la corbata.—dice luego de plantar un beso en mi mejilla.
Cuando te comportas así de linda, no puedo negarte nada.—digo riendo mientras ella pone sus manos en su cara y hace un pequeño puchero.—en efecto cuando haces eso luces muy hermosa y me provocas.—digo mientras lamo mi labio. Sacudo mi cabeza cuando la veo sonrojarse. Termino por pedirle sus llaves y salgo del lugar.
El viento no soplaba tan fuerte, como normalmente. A el contrario la brisa que soplaba me hacía saber que la primavera estaba cerca. Corrí hasta el auto de mi pequeña cuando lo distinguí.
Abrí la puerta y me sorprendí ver lo propio que estaba. Seguramente lo había llevado a el garaje. Sonríe cuando vi mi chaqueta, y mis guantes que le había puesto hace tres años. Recorrí con mi vista el interior de su coche hasta que distinguí sus zapatos grises. Los tome y cerré el coche con rapidez.
Corrí nuevamente hacia el templo.
Ella aún estaba en el mismo lugar que la había dejado. Cuando llegue a su lado,me acuclille delante de ella y quite sus zapatos.
Gracias mi amor.—susurró regalándome esa sonrisa de hoyuelos que amo como loco.
Cualquier cosa por mi corona.—dije mientras quitaba sus zapatos y ponía sus cómodas convers.—listo señorita.—sacudí mis manos y tome sus zapatos que había quitado y los puse a nuestro lado.
La veo apoyar su cabeza sobre mi hombro, río haciendo que su cabeza se mueva a él mismo tiempo, golpea un poco mi hombro y luego suelta un pequeño bostezo.
Ya quiero irme.—soltó segundos después,regalando una sonrisa. Asentí.
Le dejaré mi coche a Nano. Parece muy emocionado de ver a los chicos.—alzó mis hombros mientras observo a nano. Quien ríe y mueve sus manos y se auto señala. Ella también lo observa, luego entrelaza nuestros dedos.
Me alegra que nano esté aquí.—dice observándome. Sonrió con dulzura.—me siento más segura cuando estás con el.—entrelazo nuestras manos, con su dedo gordo acariciaba el mío, enviándoles pequeñas descargas de electricidad a mi cuerpo.
La veo suspirar indecisa de lo que dirá.—no he visto a Ky desde que nos presentaron, amor creo que ella la está pasando fatal.—dice y entiendo su inquietud.
Conozco esa mirada tuya y sé que eso implica que quieres que nos metamos en este asunto de ellos dos.—entrecierro mis ojos hacia ella, convencido de sus intenciones. Pestañea rápidamente tratando de convencerme.—no lo haremos.—hace una pequeña mueca triste.—mi vida, la situación es de lejos la más complicada y te aseguro que en cuanto Nano sepa la verdadera razón se sentirá dolido, porque aunque él cree que todo lo malo se va con una sonrisa, es ahí cuando te das cuenta lo frágil que puede llegar a ser.
Muerde su labio haciendo que me volteo completamente y la observe, luce realmente abatida por toda esta situación, carraspea y vuelva a a hablar.
Sé que Ky me esconde algo pero siento la necesidad de meterme en esto, Adié porque ellos también jugaron un grande factor para que nosotros llegáramos aquí.—se remueve un poco, luego pasa su mano por su cabello.—no podemos quedarnos sentados viéndolos destruirse, aunque a Ky le duela creo que él merece saber la verdadera razón por la cual terminaron, esa que a él parecer solo la sabe tu.
¿Y qué es eso que Adiel sabe de Ky ?.—la voz de Nano nos sobresalta, su mirada está cargada de asombro con una mezcla de enojó uno dirigido así mi.
Suspiró, sabiendo que lo que se viene no será para nada bonito.
****
Capítulo 44 pareja oficial.
Esto es algo que no puedo creer no me esperaba esas palabras INCREÍBLEMENTE enamorada de mi papasote Adiel.
Esto es un Cap Doble el próximo
Será revelado algunas cosas.
Os amo con todo mi corazón de lectora
Añao Lulu Xox