« Quatorze »

2.8K 223 42
                                    

«Quatorze»  -  Le coma.

¿Donde estoy? ¿Acaso esto es el lugar donde van los muertos? Dios.. ¿No me dio otra oportunidad?.

Supongo que las oportunidades se presentan solamente una vez en la vida. Debí oír a nano cuando me dijo que no fuera, Debí hacerle caso a esa voz en mi cabeza que me decía a gritos que no sacara mi arma .. Debí creer que Dios me ayudaría .. Pero no lo hice y estoy aquí.. La verdad no sé donde estoy.. Trato de mirar a el alrededor y me doy cuenta que estoy solo a mi vista solo se encuentra un prado  muy grande ..

Nuevamente miro para todos lados y me doy cuenta que en medio de este prado hay un árbol enorme el cual da una cálida sombra, hasta ahora no me había dado cuenta de es árbol pero se ve agradable y la verdad el sol aquí esta muy fuerte, apresuro mi pasó. Hasta donde esta el árbol con toda calma y tranquilidad me siento debajo de el .. su sombra es cálida y me guarda del sol fuerte.

Tengo hambre — Pienso. Hago un recorrido visual y siento la necesidad de alzar mis ojos me doy cuenta que delante de mis ojos hay un fruto.
El fruto de el árbol en el cual estoy.

Su magnitud y esplendor es impresionante, diríamos  que el fruto. Grita mi nombre, es como si me dijera — Cómeme se que te mueres de hambre.. — Paso mi lengua sobre mis labios que como por arte de magia se an vuelto secos y me levantó estiro mi mano para tomar aquel fruto y cuando mis dedos están a punto de tocarlo oigo una voz que me dice .

TU aun no estas Listo para comer de este árbol .— y siento temor, la voz es fuerte, suena como trompetas. Alzo mis hombros en signo de " me da igual" y trato de alcanzar el fruto.

Cuando siento como si alguien me jalara y me tira a un enorme vacío Grito con todas mis fuerzas cuando veo el fondo de el lugar es negro y diríamos que no hay salida .  En mi deliro de gritos y espantos me acorde de un texto una noche que nano leía.

Clama a mí, y yo te responderé, y te enseñaré cosas grandes y ocultas que tú no conoces.
Jeremías 33:3

Cerré fuertemente mis ojos y clame por primera vez en meses clame.Sentí como si fuera caído en unas pequeñas almohadas de plumas .

Estaba en el fondo de aquel precipicio. Miraba para todos lados y sentía el impulso de caminar así que a si   lo hice. No podía ni ver por donde iba pero confiaba en mi instinto y por una vez la voz de mi conciencia no me guiaba.

— Debe haber alguna salida aquí.. Quiero regresar.. ¿como regreso?. —pase mis manos sobre mi cabello y camine hasta el fin de aquel caminó.

Así dice el SEÑOR: Paraos en los caminos y mirad, y preguntad por los senderos antiguos cuál es el buen camino, y andad por él; y hallaréis descanso para vuestras almas. Jeremías 6:16

— Pero que ... — delante de mi habían dos caminos uno en el cual estaban todas las personas que una vez estuvieron conmigo, mis supuestos amigos. Mis supuestas novias y las personas con las que solía drogarme .. Todos hacían la fiesta y gritaban mi nombre para que fuera con ellos .

Chasqueo mi lengua — Ni porque ustedes fueran mis amigos, manada de hipócritas... Prefiero irme por este camino que da miedo. Ha estar con esa manada de víboras  — Mire el otro camino que de echo si daba miedo y era espantoso. El camino era negro y el otro era dorado pero aunque este era feo me llenaba de confianza, así que puse mis pies en aquel camino y vi dos personas acercarse a mi y parecían contentos.

— ¡Oh! Jovencito has tomado el mejor camino. — la señora tomo mi mano y me guío yo le dedique una hermosa sonrisa y la seguí. — Antes de que termines tu transcurso, quiero que sepas que Dios no te ha abandonado. — fruncí mi ceño y ella se rió me dijo — Mira, mira donde están tus amigos ahora. — apunto con su dedo el otro caminó.

Me enamoré de una chica Pentecostal © [1]  BORRADOR COMPLETO. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora