Leila.
Ya eran las 9:30 de la noche y me estaba cambiando para ir a una "fiesta" que la iba a celebrar no sé quién, aunque ir a fiestas no era lo mío.
¿Por qué acepté si no era lo mío?
Me rogó demasiado.
Flasback
—No, no y no —Dije cerrando mi casillero. Tratando de terminar la conversación.
—Por favor —Me ruega mi amiga— Será la mejor fiesta del año.—Támara era fanática de las fiestas. Tenía el día completo rogándome que asistiera, pero yo le decía que no iría.
—No me gustan las fiestas —Dije. Empecé a caminar directo al aula.
—Te vas a divertir —Dice támara canturreando y pone cara de cachorro —Por favor —Gruño.—Por mi.
—Está bien —Puse los ojos en blanco y ella saltó de alegría. Era una buena chantajista.
Fin Flasback
Elegí un vestido blanco que no es ni largo y tampoco corto, y tiene estampado verde de flores. Me puse unas zapatillas de plataformas verdes y me coloqué el brazalete que me había dado Scott . Peino mi cabello negro y me lo dejo suelto. Me pongo delineador y un poco de rubor. Tomé mi celular y un bolso de diseñador del mismo color del vestido, blanco. No le puse mucho cariño al cambiarme, pero no me veo nada mal.
Salgo de mi habitación con cautela y veo que todas las luces están apagadas, enciendo la linterna de mi móvil y bajo las escaleras con silencio, tomo las llaves y abro la puerta con mucho cuidado, dejé las llaves en su lugar, cerré sin seguro y salí a la calle respirando profundamente.
Escapar de casa.
Salir de fiesta.
Todo en un mismo día.
—Te he estado esperando —Toca claxon. Al verme chilla emocionada—Estás divina, amiga .
—Shhh..—Le hago seña para que guarde silencio. Me acerqué al auto y me subí en copiloto — Si mi madre se entera que salí sin permiso ....
—Tranquila —Me ha interrumpido — Vendremos antes de las 12:00.—Me sonríe.
—11:30 —Dije y ella asiente. Pone el auto en marcha y nos fuimos.
No creo creo que haya sido una buena idea.
Támara.
Llegamos al lugar de la fiesta y veo que Leila estaba hecha un manojo de nervios, si tan solo supiera.
Bajé del auto y Leila me imito. Habían adolescente fuera bebiendo, otros estaban drogados y algunos besándose mientras se tocaban.
—No me gusta esta fiesta —Dice Leila y yo ruedo los ojos. La tomo de la mano y la guío hacía dentro, empujando a las personas que se atraviesan. Llegamos al mini bar y me siento en un banco y Leila igual.
—¿Que quieres hermosa?—Dice el chico encargado de ese puesto.
—Ahh yo qui..—Empecé a hablar y me detuve al ver que no me hablaba a mi. Qué vergüenza.
—Agua, por favor—Dice Leila y el chico sonríe mostrando una sonrisa bastante amigable.
—¿No quieres Whisky?—Le pregunta y ella hace mueca de asco —¿Vino?
—Si, gracias. —Responde Leila. El se da la vuelta y le prepara la la bebida—.
—Toma, muñeca —Le dice el chico y le pasa la bebida y ella la toma.
—Gracias ...—Dice Leila y el le guiña un ojo. El chica se voltea a verme y su sonrisa se borra, se acerca a mi y yo lo miro .
—¿Hiciste lo que te pedí? —Le pregunté.
—Si.. Ya está preparada en la bebida —Dice él y yo sonrío con malicia.
—Támara... Me siento un poco mareada —Dice Leila y la ignoró yéndome a la pista a bailar
La verdad es que me importa una mierda lo que le pase.