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CAPÍTULO 89: "UNA HEROICA ENTRADA ...."

Después de volver a casa en silencio, tocó la cama y se quedó profundamente dormido hasta el mediodía del otro día.

Chen Ying llamó a la puerta de su habitación: "Zhou Xiang, levántate, alguien te está buscando".

Zhou Xiang abrió los ojos aturdido, y luego, con un sobresalto, todo su cuerpo se levantó de la cama, su primer pensamiento fue que Yan Mingxiu había venido a buscarlo. Había apagado su teléfono, y era muy probable que Yan Mingxiu acudiera directamente a buscarlo a su casa.

Zhou Xiang preguntó mientras se ponía la ropa: "¿Mamá, quién es?"

"Es el joven Lan Xi Rong, te está esperando, date prisa".

Zhou Xiang respiró aliviado, después de vestirse, simplemente se lavó y salió de la habitación.

Lan Xirong estaba sentado en la sala, respondiendo pacientemente a varias preguntas de la tía Wang mientras le daba un autógrafo.

"¿Xi Rong?"

Lan Xirong giró la cabeza y le sonrió: "Hermano Xiang, tu teléfono estaba apagado, así que he venido directamente a recogerte".

"¿Qué está pasando?"

"Han pasado demasiadas cosas estos días, has estado ocupado y quizás por eso te has olvidado, pero, hoy es el lanzamiento de mi nuevo disco, quería llevarte".

Chen Ying escuchó la conversación entre ambos, su corazón latía como un tambor, cómo esta gran celebridad que se apellidaba Lan trataba a su hijo con tanto respeto, anteponiendo una palabra tan jerárquica como 'hermano' como si realmente lo considerara un hermano mayor, lo que le generaba demasiada complacencia como para decir algo.

La expresión en el rostro de Zhou Xiang estaba azulada y parecía cansado, pero todavía forzó su espíritu luchador y sonrió avergonzado, "Mira se me olvidó, lo siento, espérame, me cambiaré la ropa y nos iremos enseguida".

"No hace falta, tengo tu vestuario preparado, está en el coche, vamos a la peluquería a arreglarte el cabello cuando lleguemos, tenemos poco tiempo, vamos rápido".

Zhou Xiang dijo: "Está bien, vamos".

Chen Ying estaba a punto de decir algo cuando Lan Xi Rong sonrió y dijo: "Tía, pon la televisión en el canal XX a las cuatro de la tarde, el evento será en directo y podrás vernos al hermano Xiang y a mí".

"¡Bien, bien!" Las dos ancianas sonreían de oreja a oreja, y Chen Ying incluso miraba a su hijo con orgullo, de lo bien que se veía.

Zhou Xiang subió al coche con Lan Xi Rong y los dos se dirigieron al hotel.

En cuanto Lan Xi Rong se subió al coche, dejó de lado esa sonrisa cordial que tenía frente a Chen Ying y en su lugar dijo con expresión seria: "Hermano Xiang, el Hermano Wei y yo hemos ideado otra solución, es la mejor opción que tenemos, pero no hay nada más que podamos hacer ahora, podríamos ir directamente a la casa para recuperar sus cosas importantes".

Zhou Xiang se congeló, bajó la cabeza y suspiró suavemente: "No es necesario".

"Te preocupa que te descubra la policía, no tienes que ir, encontraré a alguien, haz una lista detallada de lo que deseas ......"

"Xi Rong, gracias". Zhou Xiang torció la cabeza y sonrió con indiferencia: "Pero ya estuve allí".

Los ojos de Lan Xi Rong se abrieron de par en par y frenó bruscamente: "¿Tú, ya fuiste? ¿Cuándo?"