Lady Killer II .- Perfeccionando a la Asesina

Fuerza Mental.

El camino de regreso a la playa fue lúgubre, ¿Cómo es posible que una persona se sienta tan sola aún en compañía? Damon se ofreció a llevarme cargando pero, no podía. Estar cerca de él y no poder besarlo, me producía un dolor físico. Así que caminamos en silencio, yo adelante y Damon detrás de mí.

La selva estaba extrañamente silenciosa, como si se esforzara por escuchar el silencio de mi corazón.

Habíamos caminado cerca de cinco kilómetros, cuando Damon me tomó por la espalda, cubrió mi boca y me subió a un árbol.

.- No hagas ruido, tenemos compañía-. Me susurró al oído antes de soltarme.

Me puse en alerta, esto no estaba bien. Damon miró hacia un punto detrás de nosotros, yo seguí su mirada.

Al principio no pude ver ni oír nada fuera de lo normal, pero era obvio, Damon tenía un oído y vista súper aguda; después de unos minutos, un grupo de hombres armados. Parecían personas normales.

.- Escuché ruido en esta dirección-. Dijo uno de ellos.

.- Probablemente fue un animal-.

.- O ellos también nos escucharon-. Respondió mirando a su alrededor.

Nos estaban buscando.

.- No pueden haber ido lejos-.

.- Enfócate en ella, es por quien vinimos-. Dijo un fortachón saliendo de un árbol.

Estábamos en una mala posición, si ellos se acercaban lo suficiente, podrían vernos, pero si nos movíamos ellos nos escucharían. Damon y yo estábamos desarmados y por experiencia sabíamos que probablemente ellos también estuvieran mutados, y fácilmente eran dos docenas.

.- ¿Dónde está Frank?-. Preguntó el fortachón.

.- Dígame, señor-. Respondió un menudito.

.- Tienes la mejor nariz de nosotros, quiero que cambies y me digas si hueles algo diferente-. Ordenó.

Damon se tensó a mi lado y cambió de forma; yo hice lo mismo.

Aunque estaba agotada, el cambio me proporcionó cierta vitalidad.

.- No gastes tu energía-. Damon me reprendió.

.- Intentaré llamar a los demás-. No lo miré.

Cerré los ojos y me concentré; intenté ignorar a los hombres que se acercaban poco a poco y a Damon, quien respiraba casi en mi cuello.

La vez que les demostré los límites de mi poder, había sido muy sencillo comunicarme con sus mentes, puesto que estaban cercanas, y era un mensaje grupal; esta vez tendría que concentrarme el doble para poder mandar el mensaje a esa distancia y a las personas correctas.

Mi mente fue registrando las distintas mentes que abarcaban la isla; y me tensé pero seguí buscando una mente en particular. Y la hallé, sus pensamientos eran ruidosamente preocupados por mi tardanza.

“¿Jaziel?” Pregunté en su mente. Supe que me había escuchado puesto que su mente se congeló por la sorpresa.

“Estamos atrapados, necesitamos que vengan” Envié apresuradamente.

“¿Dónde están?” Pensó para mí.

“A unos 70 kilómetros de la orilla en dirección Oeste, estamos atrapados en un árbol y hay hombres de Aron debajo de nosotros, son cerca de treinta, pero eh captado la presencia de muchos más en la otra orilla de la isla”