Lady Killer II .- Perfeccionando a la Asesina

Adiós a la niña (Parte II)

Audrey’s  PoV.

Escuchaba a la gente que se acercaba hacia mí, intentaban ser silenciosos pero mis oídos eran superdotados.

.- ¿Lograste atraparla?-. Fue la voz gruesa de un hombre.

.- ¿No ha intentado escapar?-. Preguntó una mujer.

.- ¿Seguro que no la has lastimado? Necesitamos viva a la usuaria del agua, Miles-. Dijo el hombre.

.- ¿Creen que no sé lo que hago? Llevo años haciendo esto, maldita sea-. Era la voz de un muchacho, joven por su voz.

.- ¿Lograste verla?-.

.- No, solo pude sentirla a través del suelo-.

.- ¿Creen que esté planeando algo?-. Preguntó la misma mujer.

.- ¿Cómo mierda va a intentarlo? Ni siquiera sabe que jodido está pasando, no es como si diario una pared de tierra se levante hacia ti-. Era la misma voz del chico, quien al parecer tenía mal carácter.

Así que él era un mutado, como yo. Un usuario de la tierra.

.- Bueno, pues hay que llevarla de una buena vez, Grigori la espera-. Dijo el hombre. Me congelé.

.- ¿Cómo lo haremos?-. Preguntó la mujer.

.- Hay que traer a Mika, que él se encargue-. Dijo el muchacho que respondía al  nombre de Miles.

Ahora lo entendía, Zeta me lo había advertido desde antes, Grigori nos buscaba por poder, necesitaba a los usuarios de los elementos para poder levantar el imperio que necesitaba. Por lo que entendía, Miles era un usuario de la tierra, y el tal Mika debía de poseer otro elemento si lo habían mandado traer para mi captura.

Pero debía hacer algo primero. Me concentré y regresé a mi forma humana, si por alguna razón ellos lograban atraparme y lograban verme, sabrían que era muy diferente a ellos, más poderosa. Así que tendría que hacer esto como una humana; una humana muy inteligente. Y aunque ellos, fueran mutados, yo era algo que ellos no… Una asesina.

Y vaya que no iba a dejarles esto fácil.

De la manera más sigilosa posible, utilicé mis Shukos para poder escalar esa muralla de tierra; era unos metros más alta que yo, lo suficientemente alta como para no poder saltarla, pero no tanto como para no poder salir de ella.

Una vez que estuve en la cima de una de las paredes, pude ver algo que antes había pasado por alto; en la cima de la enorme cascada, había una nave, y no era de Aron. Entonces supe que Miles y Mika venían en esa nave, y si podía hacerla caer, ellos no podrían llevarme.
“¿Hermano? ¿Han terminado?” Pregunté mientras analizaba mi posición. Estaba a lo mucho, a veinte minutos corriendo de donde estaban ellos.
“Estos malditos no dejan de pelear, hemos logrado eliminar a la mitad de ellos pero, aún quedan bastantes de pie. Pero no tenemos bajas” Su último comentario hizo que respirara con tranquilidad.
“¿Ya terminaste?” Él se escuchaba ansioso. Si yo le decía lo que estaba pasando, ellos vendrían por mí, y ahora no solo lucharían contra un solo enemigo, sino dos. Y no iba a permitirlo.
“Aún no, pero pronto, concéntrate en la pelea” Pedí.

No me respondió.

Si había algo de lo que estaba segura, es que pasara lo que pasara, Mark estaría ahí para mí. Me encontraba en un gran dilema, no podía bajar usando mis alas porque, ellos no debían saber que tenía unas, pero no podía saltar del todo puesto que mi tobillo aún estaba lesionado por la mordida de Adam. Y sangraba levemente.