After [Emiliaco]

03

EMILIO

¿Cómo consigues valor? ¿De dónde sacas valentía para ser libre con quien amas?
Me encontraba en mi habitación tratando de pensar en algún trabajo ajeno a mi padre para cuando se enterara que estaba con Joaquín y no quisiera apoyarme más.

No es que yo fuera cobarde, al menos no me consideraba así, más bien me preocupaba un poco lo que iba a pasar después y el hecho de que le reclamara otra cosa a Joaquín.

A mi padre se puede decir que le daba igual con quién estuviera mientras no fuera un hombre, ahora ya no sé cuál fue el objetivo de su último proyecto, se suponía era la inclusión y aceptación de la diversidad pero él no tenía nada de eso.
Por su parte, mi mamá era igual, nunca había aceptado la idea de que Joaquín y yo fuéramos amigos, en repetidas ocasiones me habló de él de una manera muy despectiva, yo lo defendía, pero eso mismo hizo que pensara que teníamos algo más; y por lo que me dijo mi padre, ella estaba de acuerdo con su plan.

Por cierto, hablando de eso, me molestaba mucho que quisiera llevar a cabo ese arreglo, se supone que si yo iba a estar en una relación tenía que ser porque yo quería estar con esa persona no por cuidar mi imagen o por la opinión de los demás.

Hubiera querido hablarlo con alguien pero hasta ese entonces nadie lo sabía, o más bien no confiaba plenamente en alguien como para hablar de eso.
Mi hermana estaba de lado de mi mamá, o mejor dicho, se mantenía al margen, decía que era algo que a ella no le afectaba ni le beneficiaba, así que tampoco podía pedirle un consejo porque por la manera en que nos educaron era más probable que se pusiera de lado de nuestra madre y sabía entonces que tampoco iba a apoyarme.

Pasara lo que pasara yo quiero que sepan que amaba demasiado a Joaquín y en ningún momento quise que él sufriera, pero eso era más fuerte que yo y no sabía qué hacer.

[...]

Me encontraba en la casa de la familia de Joaquín, el día que transmitieron el segundo capítulo de la serie sí pude escapar de mi casa para ir a verlo.

— Tenía que ser Imelda 2, ya me cayó mal esa señora — exclamó Renata cuando Doña Dora riñó a Aris y Temo por abrazarse.

— A nosotros también — mi novio y yo hablamos al unísono. Últimamente estábamos más conectados.

No podía creer que en pleno 2019 siguiera habiendo gente con la mente tan cerrada, que pensaran que ser gay está mal, o peor aún, que es una enfermedad y se puede curar.

Todos estábamos muy atentos al programa. Después de un tiempo Renata volvió a tomar la palabra.
— Pero qué lindos ustedes, de verdad tienen mucha química en escena también, ya entiendo porqué sus fans piensan que están juntos —

Mi novio habló por los dos al tiempo que entrelazada sus dedos con los míos. — Es lo mejor de que en la vida real también estemos juntos, así podemos transmitir mucho más —

— Ya, ya, no sean tan melosos que yo no tengo a nadie — habló Renata mientras lanzaba un cojín del sofá en dirección de su hermano.

— Ni empieces, tú aún estas pequeña para tener novio — ese fue Joaquín. Ahora entiendo que no solo era celoso conmigo, sino con su hermana también, pero era lindo, fueron de esos celos que te hacen sentir querido y valorado no de los que son posesivos.

Una vez tuve una novia así, era realmente incómodo tener que soportar el hecho de que qusiera tenerme controlado siempre; una relación así no te lleva a nada bueno, no se disfrutan el uno al otro por las mismas prohibiciones.

Cuando tenemos una pareja, debemos entender que no somos sus dueños, simplemente estamos juntos pero cada uno sigue teniendo vida propia y no puedes prohibirle que haga ciertas cosas solo porque a ti no te gusta. Hablo de actividades, porque obviamente no puedes seguir tu vida de soltero, debes respetar.