Capítulo XXVII: Zoológico.

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Uno de los hombres delante de ellos se dio la vuelta y disparó una sonrisa de disculpa a Light. "Comprendo tu dolor."

El chico de ojos caramelo se inclinó hacia adelante. "¿Qué?"

"Sé cómo se siente." Hizo un gesto hacia el hombre junto a él. "Él es así, también. Piensa que puedes aguantar todo, incluso si es demasiado grande."

"Oh. B-Bueno," dijo Light, claramente confundido.

"¿Quieres uno?" gruñó L hacia el hombre, tendiéndole la bolsa.

"Oh. Em... No, gracias." Giró otra vez.

"Buen trabajo, Ryuuzaki. Espantando a todos con tus caramelos."

DNDNDNDN

Finalmente entraron y miraron el mapa por un par de segundos antes de decidir a donde ir:

"Quiero ver a los monos."

"Para de actuar como un niño. Vamos a ver a los avestruces."

"Oh, ¿yo soy un niño? ¿Y quién es el que está con una bolsa de gomitas?"

"Light-kun no usará mi necesidad de dulces como base para llamarme inmaduro."

"¡Eres tan engreido!"

"Estamos perdiendo el tiempo."

"...Pero quiero ver a los monos."

"No me mires así, Light-kun."

"..."

"Bien. Iremos a ver a los monos."

DNDNDNDN

L miró como los ojos de Light se iluminaron cuando uno de los monos se les acercó por detrás de la jaula.

Bajando a dos por cientos por obtener placer simplista de ver los a animales.

"¡Míralo, Ryuuzaki!"

L rodó los ojos y comió otra gomita, para después agarrar un caramelo y dárselo a Light.

"No quiero esto," se quejó Light, mirando fijamente el dulce. Trató de devolverlo, pero L ya había ido arrastrando los pies hasta la tienda de regalos de monos.

Hubo un grito repentino y Light levantó la cabeza para ver al monito lindo dejando al descubierto sus dientes contra él y tratando de llegar a su gomita.

"¡Dios! ¡No tienes que gritar!"

Chilló de nuevo y sacudió la jaula.

Asustado, Light arrojó la gomita al mono y éste la consumió rápidamente y se alejó. Todavía estaba tenso cuando algo se envolvió alrededor de sus hombros.

"Cálmate, Light-kun."

Light miró hacia abajo y vio que dos brazos de mono de peluche con velcro en las manos habían sido puestos a su alrededor.

"¿Me compraste un mono?"

L acomodó el mono en la espalda de Light. "Sí."

"...Gracias."

"Esperamos que esto abstenga a Light-kun de quejarse de nada durante el resto del día," dijo L, encaminándose hacia los avestruces.

DNDNDNDN

"¿Por qué estás tan interesado en los avestruces?"

Se pararon en el borde de la exhibición de avestruces, Light comiendo a regañadientes algunos de los dulces y L mirando fijamente las aves, pulgar en la boca.

Molestias MenoresWhere stories live. Discover now