Alexitimia

Capítulo 7: Alcohol.

Dos pieles que se encuentran. 34 músculos faciales y 112 músculos de postura en movimiento. La liberación de hormonas como la dopamina, oxitocina y serotonina. El corazón latiendo más rápido y la respiración volviéndose profunda e irregular.

Todo eso significa un beso.

Desde pequeño vi películas en las que siempre había uno. Esas escenas eran las que me causaban más terror. ¿Por qué las personas juntan sus labios? ¿No saben cuántas bacterias y focos infecciosos se transmiten?

Nunca había besado a nadie, ni siquiera a la primera chica que se enamoró de mí. Creía que solo se le daban a las personas que uno ama, por eso no lo hacía. Hasta Eleonor.

Misteriosamente, el cuerpo humano reacciona ante cualquier estímulo externo, no lo podemos controlar. Es por eso que, cuando ella me besó no pude evitar cerrar los ojos y sentir su piel contra la mía. Luego de unos segundos, venzo a mi cuerpo y la aparto.

Ella luce confundida al principio pero después empieza a balbucear y se aleja tambaleando. Agito una mano frente a ella y esto hace que desorbite sus ojos.

-Eleonor, ¿estás ebria? Me acabas de besar.

-¿Quién eres? No te acerques.- Responde mientras empieza a correr por la sala.- Creo que voy a salir por un rato.

-No, Eleonor, tenemos que hablar sobre lo que acaba de pasar.

A pesar de mi negativa, ella sale a la calle y les grita a las personas que pasan.

¡Hola Guapo!¡Señora, ¿Me rasca el trasero?!¡Tus padres no te quieren!

Después de algunos transeúntes asustados y bailar y cantar, logro por fin hacerla pasar y la dejo en su cuarto durmiendo.

Sí, definitivamente estaba ebria, pude oler el alcohol en su cuerpo, además, ninguna persona en su sano juicio haría lo que ella hizo.

Ya no puedo estudiar más. No sé por qué pero mis hormonas están muy alborotadas. Toco mis labios como por séptima vez.

Aún no me creo que mi primer beso haya sido con una borracha, mi madre estaría decepcionada. Decido tomar una ducha muy larga así tal vez el sabor de sus labios por fin desaparece.