XXXVI. A cada paso que daba sin él

Start from the beginning
                                    

- ¿Tienes bastante con eso? -Preguntó.

Lo miré maravillada. Cercó con sus manos mi cintura y me aprisionó, pegándome a él. Nos besamos varias veces con melosidad, sonriendo, y sentí de nuevo que la conexión entre ambos era total y absoluta.

- Definitivamente quiero pasar el resto de mis noches contigo, señorito Tomlinson. O, al menos, el resto de mis mañanas.

Rió y me besó con ganas, hasta que la melodía establecida como tono de llamada para mi teléfono interrumpió ese momento. Abandoné sus labios y me apresuré a ver de quién se trataba.

- Es Chloe -anuncié.

- Contesta, pero voy desayunando.

Le saqué la lengua y descolgué la llamada, sentándome al mismo tiempo en el taburete contiguo a donde estaba Louis.

- Dime, Chloe.

- “¿Qué tal, Alice? ¿Todo bien?”

Miré a Louis, que daba un primer mordisco a una de sus tortitas.

- Todo muy bien -admití-. ¿Tú qué tal? ¿Cómo fue la noche?

- “Bien, muy bien. En fin... ya te contaré”.

- Eso no suena muy bien, la verdad -fruncí el ceño, cogí el vaso lleno a rebosar de zumo de naranja y di un sorbo-. ¿Qué ha pasado?

- “Luego hablamos, ¿vale? Sólo quería que supieras que sigo viva. Si quieres, podemos cenar juntas hoy”.

- Sí, claro, estupendo. Mi casa sigue siendo tu casa tanto tiempo como quieras, aunque ayer decidieras abandonarme.

La escuché reír y me sentí algo aliviada.

- “Genial, entonces a media tarde me paso y empiezo a preparar la mejor cena que te han preparado en la vida. Estará lista cuando llegues del trabajo, prometido”.

- Con unas patatas fritas soy la persona más feliz del mundo, no te compliques.

Louis giró de inmediato su cabeza y me taladró con la mirada. Suprimí una risa. Desde luego, él parecía haberse complicado preparando el desayuno. Le lancé un beso pero continuó mirándome de igual manera.

- “Ya veré que se me ocurre. ¡Luego nos vemos!”

- Hasta luego, tonta -colgué y dejé el móvil sobre la mesa, esperando que Louis censurara mi comentario de forma divertida-. Con el desayuno sí me gusta que la gente se complique -comenté, queriendo provocarle.

- Prefiero no decir nada al respecto -suspiró, haciendo que riera de nuevo. Dejé caer mi cabeza sobre su hombro y me llevé un trozo de tortita a la boca-. Me gusta la canción que tienes de tono de llamada.

- ¿Te gusta Maroon 5? -Pregunté, sorprendida.

Estaba segura de que la había escuchado sonar mil veces en mi teléfono y nunca me había comentado nada.

- Sí, claro. Y esa canción es de mis favoritas -bebió del vaso de zumo y dejó escapar una tos-. You push me... I don't have the strength to resist or control you... -Tarareó.

Levanté la cabeza y lo miré, esperando más. Queriendo más. Deseando más. Rezando por más.

- Sigue -pedí. Rio y negó con la cabeza-. Por favor...

- Wake me up in the middle of the night to say I will never walk away again... I'm never gonna leave this bed...

Sus ojos se clavaron en mí y me derretí. Por completo. Nunca había tenido, hasta entonces, el placer de escucharle cantar delante de mí. Era algo que no le había pedido, para no incomodarle, y algo que él tampoco había querido hacer. Sin embargo, en esos momentos...

More than this | Fan-fic de Louis TomlinsonWhere stories live. Discover now