Capítulo 01 - Parte II.

15.7K 941 22
                                    

Eran las 7:30 pm y salí del centro comercial con bastantes bolsas, comencé a caminar hacia la camioneta, dejé las bolsas en la cajuela, subí al auto y comencé a conducir lento pues quería ver con atención todo, sonreía mientras conducía. Los ángeles era muy lindo.

Cuando menos me di cuenta la velocidad iba disminuyendo.

—¿Qué pasa?— miré el tablero y seguí avanzando hasta estacionarme frente a un bar pues fue el primer espacio que encontré.

Bajé del auto, abrí el cofre y de éste salió mucho humo, supuse que se había calentado y necesitaba agua.

Crucé la calle con un galón vació y comencé a llenarlo de agua para luego volver al auto y echarle el agua en su lugar, nuevamente fui al parque pero esta vez me topé con un chico, él estaba tirado sobre el césped.

—¿Hola?— me hinqué a su altura y comencé a moverlo  —¿Estás bien?

El chico rodó entonces me dejó ver su rostro.

—¿Eres un ángel?— habló con un gracioso tono de ebrio.

—No— reí —¿Estás bien?

—Ahora lo estoy— sonrió.

—Te ayudaré a levantarte, ¿está bien?

—Seguro, ángel— reí y lo ayudé a levantarse.

—Creo que estás muy bebido— lo hice sostenerse en el árbol y lo miré —¿Tienes dinero para un taxi?

—Yo creo— palmeó sus bolsillos traseros, rió y sacó un preservativo.

—Con eso no llegarás muy lejos— bromeé.

—Tengo dinero, está aquí— sacó una gran cantidad de billetes.

—No deberías cargar con tanto dinero, es peligroso— tomé sus billetes —¿En dónde vives?

—Uhm— miró a los alrededores y rascó su nuca —Por allá— señaló —Creo.

—Creo que con esto debe alcanzarte para llegar "por allá"— lo miré y le di en una mano dos billetes de 20.

—¿Si?

—Sí— sonreí y le dejé en la otra mano el resto de su dinero.

—Gracias, ángel— sonrió.

—No es nada— asentí y crucé la calle para echar el último galón de agua en la bomba de agua.

Escuché las llantas de un auto rechinar y unas bocinas entonces volteé.

—¡Relájate, idiota!— dijo el chico mientras cruzaba la calle hacia donde yo estaba —Imbécil de mierda— sacó ambos dedos medios, se los mostró al conductor y reí.

—Eso fue rudo y grosero— señalé la calle y el levantó los hombros.

—¿Cuál es tu nombre, ángel?— me miró.

—Valerie, Valerie Haynes— sonreí y le di mi mano.

—Bryce, Bryce O'Connor— sonrió, tomó mi mano y la estrechó.

—Un placer, señor O'Connor— reí.

—Así le decían a mi padre— dijo él con el ceño fruncido.

—¿Sí?

—Si— asintió —Claro que eso fue antes de que muriera.

—Oh, lo siento mucho.

—No importa, era un hijo de puta.

—Bien...— dije un tanto incómoda —Es tarde, debo irme, Bryce— sonreí leve para luego subir a mi auto.

—¿Cuándo nos volveremos a ver, ángel?— me preguntó por la ventana.

—Ni siquiera me recordarás mañana, Bryce— reí leve.

—Claro que lo haré, nunca olvido a chicas tan bonitas como tú— me miró —Tienes unos hermosos ojos, tan grandes y verdes— reí al escucharlo al mismo tiempo que negaba con la cabeza.

—Gracias, Bryce— sonreí —Tu eres muy atractivo— miré hacia el piso y reí leve.

—Gracias a ti— sonrió sin dejar de verme.

No, Valerie. Ni siquiera lo pienses. Es peligroso y una locura.

Simplemente no.

—Sube— reí —Te llevaré a "Por allá"— él rió igual, rodeó el auto y caminó sosteniéndose del auto para luego subir al asiento copiloto.

She Saves MeWhere stories live. Discover now