She Saves Me

Capítulo 26.

Valerie Haynes
~3 años después ~

—Valerie— escuché como me llamaron entonces separé mi cabeza del casillero rápida y bruscamente.

—¿Si?

—Tu turno ya acabó, ¿Por qué sigues aquí?

—Creo que me quedé dormida— le respondí bajo a Janis.

—¿Tan pesado estuvo?

—Si— asentí rápidamente sin pensarlo dos veces.

—Por suerte mañana descansamos. ¿Planeas ir a la fiesta de Robert?

—No lo se. En mis descansos me gusta... descansar— Me quité la filipina y reí levemente mientras la miraba.

—Es bueno divertirse.

—No digo que no pero en serio extraño pasar tiempo de calidad con mi cama— terminé de desvestirme y luego coloqué mi uniforme en mi bolsa de reciclaje.

Me vestí rápidamente. Lo único que quería era ir a casa. Ponerme pijama y comer mientras estaba acostada viendo la tele.

—Ve un rato. Será divertido.

—Lo voy a considerar.

—Hazlo, las fiestas de Robert siempre son geniales.

—Dije que lo voy a considerar— me acerqué a ella, besé su mejilla para luego alejarme y salir de los vestidores.

Me despedí de los compañeros conocidos que miraba hasta que finalmente salí del hospital. Atravesé el estacionamiento y subí a mi auto rápidamente.

Quería mágicamente aparecer en mi cama, lo juro. Estaba demasiado cansada. No veía la hora de estar en casa.

Varios minutos después llegué a casa y finalmente fui feliz.

—Hola, mi amor— dije feliz apenas abrí la puerta y lo vi —¿Qué tal estuvo tu día? ¿Me extrañaste?— una vez que entré, cerré la puerta detrás de mi.

Me coloqué de rodillas sobre la alfombra y el rápidamente corrió hacia mi. De una manera muy torpe y graciosa, debo admitir.

Se colocó sobre mis piernas y acaricié su pelo.

—Eres tan lindo— me levanté con Oggy en brazos y caminé hasta mi habitación, apenas entré lo dejé en la cama y me recoste a su lado.

Tomé el control de la televisión y encendí ésta para luego ver la guía.

—¿Qué vamos a ver hoy?— comencé a revisar los canales —No parece haber nada interesante.

Miré a Oggy y cuando menos pensé el ya estaba dormido.

—Te duermes muy rápido, amigo.

Reí levemente mientras jugaba con su cola enroscada.

Oggy comenzó a roncar un tanto fuerte y solté una carcajada.

Me levanté de la cama y salí de la habitación. Fui al baño y lavé mis manos para luego ir hacia la cocina. Planeaba comer algo, no porque estuviera hambrienta sino porque estaba aburrida.

Vivir con un pug no era siempre tan divertido, tal vez debería conseguir más perros.

Sería la loca y solterona de los perros. Se que originalmente es de los gatos pero no soy muy fanática de ellos.

Caminé hacia el refrigerador y de arriba tomé la caja de pop tarts. Agarré el paquete de sabor s'mores y las metí en el tostador una vez fuera del papel.