Dating with style(s)

Capítulo 26.

Perfecto. Harry estaba ebrio. ¿Qué hago con él?.Dios, entramos a casa, Harry fue directo hacia el sofá y se tiró sobre el como si no hubiera mañana, donde cayó noqueado. Me acerqué lentamente hacia el, acaricié sus risos y este no se movió.

— Harry...- acaricié su mejilla. 

—Mhm...- hizo un ruido con la boca.

Bien, creo que no se levantará de el sofá. Fui a la cocina por unas pastillas para Harry. Cuando regrese este estaba boca arriba en el sofá con un brazo tirado en el piso. Se veía gracioso «efectos del alcohol», pensé para mis adentros. Me quité los zapatos y me senté en el suelo al lado del brazo de Harry. Dejé el vaso de agua en la mesita de centro y puse la pastilla a un lado del vaso.

Acaricié suavemente el brazo de Harry, su piel era tan suave. Quité su reloj de su muñeca y lo dejé a un lado. Me puse de pie del suelo y miré mi vestido, no me di cuenta que cuando me senté en el suelo el vestido se subió un poco, antes de tomar el vaso lo bajé. Tomé el vaso y la pastilla y me puse a la altura del sofá. El rostro de Harry estaba un poco cerca del mío.

—Cariño despierta.- ¿debería de darle palmaditas en el rostro?.

Y como por arte de magia, Harry abrió lentamente los ojos, sus hermosos ojos verdes ahora estaban rojos por el alcohol. Me miraba fijamente. Iba a morir si me seguía viendo así. De nuevo, puse el vaso en la mesita, y con mi mano restante acaricié su mejilla.

—Tienes que tomar esto.- le enseñé la pequeña pastilla blanca.

Seguía sin decir nada.

-Abre la boca, cariño.

Puse la pastilla en su lengua.  Alguien diría que eso es asqueroso, pero es Harry Styles, cualquiera moriría por estar haciendo esto.

—Traga.- le ordené. 

Vi como su manzana de adán, bajaba y luego subía, dándome a entender que ya había tragado el medicamento.

—Ten, bebe esto.- puse el vaso en sus labios, estos se cerraron en el borde y el líquido pasó por su garganta.

—Gracias, princesa.- dijo mirandome tierno.

—Vamos, ponte de pie, hay que ir a dormir.- le tendí mi mano.

Harry tomó mi mano y nos dirigimos a la habitación. Harry estaba más dormido que despierto, lo cual se le dificultó para caminar.

Llegamos a la habitación y Harry cayó muerto en la cama. ¿Cómo dormiría con esa ropa?. Por un momento pensé en quitarle la ropa yo misma, pero luego me arrepentí. «Vamos es tu novio quítale la ropa» habló mi estúpida conciencia. Bah, no se acordará de nada mañana.

Acerqué mi mano a el botón de sus ajustados jeans, y lo desabotoné, Harry soltó un gemido, bajé la cremallera con sumo cuidado de no despertarlo y morir en vergüenza. Tomé los bordes de el jean y comencé a deslizarlo por sus piernas, tiene mejor piernas que yo. Y..¡BUM! su amiguito salió. Me sonrojé. Saqué el jean y lo puse a un lado. Harry no se había movido para nada. Ahora seguía la camisa, fui desabotonando su camisa, pero su mano sobre la mía me asustó. Harry sonrió pícaramente y me tomó por las dos manos haciéndome caer sobre él. Empezó a besar mi cuello y sus manos vagaron hasta mis caderas. Nos besábamos furiosamente. Sus manos subieron por mi espalda y comenzó a bajar la cremallera del vestido. << Detenlo >>

—Harry...por favor, estás ebrio.- no me agradaba esto. 

—Lo siento, nena.

Terminé de desabotonarle la camisa y nos fuimos a dormir, no sin antes quitarme el vestido, fui al baño, no me lo quitaría en frente de él, sabiendo que esta ebrio y puede hacer cualquier cosa en ese estado sin aun pensarlo.

Cuando regresé a la habitación Harry estaba dormido como un bebé. Me acomode a su lado y este me abrazó. Me importaba un comino que ambos estábamos en ropa interior.

-Te quiero _____, gracias por cuidar de mi.- dijo por ultimo Harry.