Tal para cual.

CAPÍTULO CINCUENTA Y UNO.

Narra Alice.

Las siguientes cinco horas fueron demasiado aburridas. Exceptuando las dos horas que hablé con Robin por teléfono. Me dijo que debíamos quedar más y le propuse quedar la semana que viene. Este chico era increíble y conseguía que me olvidase de todo.  El Dr.Mcgonavy apareció por la puerta doble haciendo que todos nos pusiéramos en pie.

-Todo ha salido bien -nos dijo.

-¿Cuándo despertará?  -preguntó Alisson impaciente.

Sentí un deja vu. En la primera operación Alisson preguntó lo mismo y yo le respondí, como pensaba hacer ahora.

-No lo saben Alisson, despertará en cualquier momento -aclaré con una sonrisa.

Sentía una felicidad inexplicable, estaba segura de que esta vez saldría todo bien. A pesar de que Ed Murphy quisiese que saliese todo mal, esto no iba a ser así.

Fuimos a la UCI, repitiendo los pasos de la primera vez. El Dr.Mcgonavy explicó de nuevo el horario de visitas y nos dijo que Jake sólo se quedaría esa noche allí, si reaccionaba bien. Esperaban que despertarse en unas horas y si no lo hacía, bueno,

menos dinero tiene que seguir gastando mi padre.

-¿Te quedas tú? ¿No te importa, verdad?  -me preguntó Matt amable.

Asentí con la cabeza confirmando que me quedaría allí toda la noche, pero luego me arrepentí. Iba a dejar de ser la tonta que se comía los marrones de todo el mundo, iba a dejar de preocuparme por las demás personas. Tenía que preocuparme más por mí y ahora mismo, necesitaba dormir.

-¿Sabes que Matt? En las últimas 48h lo único que he podido dormir han sido dos minutos en el pasillo de este hospital, así que, paso. Me voy a casa a dormir

Salí de la habitación con Alexa pisándome los talones. Me alcanzó dentro del ascensor.

-¿Qué se supone que haces Alice? -preguntó enfadada cruzando los brazos en su pecho.

-Me voy a casa, ya lo he dicho. Es un momento único en la vida. No me había parado a pensarlo, pero no tengo que aguantar los estúpidos y narcisistas comentarios de Sullivand. Y voy a disfrutarlo.

-Estás siendo egoísta Alice. Te necesita aquí -me dijo enfadada.

-No me necesita para nada Alexa, tal vez ni despierte y tal vez sea bueno. Voy a disfrutarlo.

Me fui sonriendo a casa en bus. Eran las tres de la mañana cuando llegué a casa. La operación había tardado más de lo esperado y nos habíamos quedado allí hasta muy tarde.

Cuando llegué al salón encendí el equipo de música. Era un equipo genial, tenía altavoces por toda la sala. Lo puse al máximo y me puse a bailar y a cantar como una loca. Sabía de sobra que mis padres no estaban en casa y por eso lo había hecho.

-¡CALLATEE LOCAA! -gritó Lucas desde el piso de arriba.

Solté una carcajada antes de cantar más fuerte. En unos veinte minutos los vecinos llamarían a la policia y tal vez sólo lo dejaría puesto unos minutos más. Tenía que aprovecharlo al máximo.

El sonido de la puerta principal cerrándose me hizo interrumpir mi canción. Miré a Tommy sorprendida, ya pensaba que estaría durmiendo.

Apagué la música para hablar con él y abrí la ventana de la parte derecha del salón para que entrase corriente.

-¡GRACIAS! -gritó una voz masculina. Creía que había sido Lucas pero vi a mi vecino por la ventana mientras le decía a su hermano algo como: "Deben llevarse a esa a un reformatorio". Solté otra carcajada antes de dirigirme a Tommy.