CAPÍTULO 80. Fiesta de presentación de Lucas.

694 47 5
                                    

Narra Alice.

La fiesta era cada vez más aburrida. Tenía una copa de ponche en la mano derecha para que no me pudieran sacarme a bailar. Esta fiesta me parecía un completo rollo, a parte de que era absurda.

Que Mamá quisiese presentar a Lucas en sociedad como "su hijo" era alucinante. No me parecía mal, pero, Dios, me quedé en shock.

Música moderna empezó a sonar a un ritmo fuerte, pero lo suficiente para escuchar a la persona que tenías al lado. Cada dos horas mis primos pequeños se encargaban de manipular el estéreo para que la gente se divirtiese un poco. Solía funcionar, la mayoría de los empresarios más serios terminaban uniéndose y salían a bailar a la pista de baile temporal de mi salón.

Estaba claro que algunas viejas amargadas y forradas de dinero no lo consideraban adecuado.

Sonreí al ver a Lucas bailando con Alisson y Alexa a la vez de una forma no muy elegante. Ellos se lo pasaban genial. Él agarraba a cada una por una mano mientras les daba vueltas a las dos. Lucas caía bien a todo el mundo o a casi todos.

Los pies me empezaban a doler, sólo quería quitarme los tacones y poner los pies descalzos en el frío suelo.

Para terminar por completo con mi tranquilidad, si eso era posible con tanto ruido, la Sra. Haussman se situó a mi lado. Ya no podría de escapar de la bruja amargada que era una viuda ricachona.

-¿Quién es el pequeño que han adoptado tus padres? -preguntó intentando sonar simpática.

¿Pequeño? Sonreí irónica. ¿Ni siquiera sabía que el pequeño adoptado casi cumplía los diecinueve? No entiendo esta clase de fiestas, en serio.

Señalé divertida al chico que se movía frenéticamente en medio del salón aún acompañado de mis primas.

-¿Ese indigente es el nuevo Thompson? Ya sabía que tus padres tenían mal gusto querida, pero de eso a que adopten a un delicuente...

-¿Cómo dice? -pregunté ofendida.

-Ese vándalo no es bien recibido en esta sociedad. No le pega estar aquí. No encaja -contestó la mujer con una mueca de asco.

-Es una buena persona -musité arrastrando las palabras.

-Tal vez querida deberíais devolverlo al circo de donde lo sacásteis. Los monos deben echarlo de menos.

-Mire vieja verde no permitiré que se refiera así a Lucas. Si está amargada no es mi culpa, cómprese un gato como hacen las viejas que están solas porque ni sus hijos las aguantan. Ahora hay páginas donde puede pagar para desahogarse y...

La cara me ardía y no pude evitar llevarme una cara a la mejilla derecha. Con la música, pocos de los presentes habían presenciado el bofetón que esa vieja me había dado.

Furiosa y aguantando el dolor, guardé la compostura.

-No dejaré que ninguna niñata insolente se dirija a mí de esa forma.

Mi tío Harry junto a mi primo Alex habían presenciado el tortazo. Rápidamente vinieron hacia nosotras para ver que sucedía.

-¿Qué ha pasado aquí? -preguntó mi tío Harry frunciendo el ceño.

-¿Estás bien? - me preguntó mi primo Alex tocando mi mejilla delicadamente.

-Claro, lo tengo todo bajo control. ¿Le gusta el ponche Sra. Haussman? -pregunté sonando amable.

Ella me miró confundida antes de contestar. Mi fingida tranquilidad la estaba asustando.

-Sí, ya lo probé antes y estaba delicioso -dijo volviendo a aparentar simpatía como si lo de antes no hubiera existido.

Tal para cual.Where stories live. Discover now