VAUP

259K 16.6K 11.4K
                                    

Este se supone es un epílogo con extra incluido, o no sé, aish v: soy primeriza en esto, no sé ni mierd- piiii♪ xd

🔸🔸🔸

11:55 a. m.

Había pasado el tiempo; demasiado para él. Sus ojos puestos en la figura de Lucía a lo lejos, ésta observando con una sonrisa su celular.

     Jorge sabía la causa.

     No dudaba que estuviera en ese momento escribiéndole a su esposo...

      "Nicolás Cavalier".

     Pensó antes que tenía una pequeñísima oportunidad con ella, y claro, éstas murieron esa vez que la vio en aquel altar.

     Estaba molesto consigo mismo, porque fue un ciego.

     Sí, un ciego.

     Después de tantas veces que se percató de la cercanía entre Lucía y su ex-jefe, siguió insistiendo, patéticamente.

      Caminó rápidamente, alejándose de ella; recordando perfectamente la vez que se le declaró... Aun sabiendo que aquel día se casaría.

      Recordando su promesa.

[Tiempo atrás]

      La puerta fue abierta con brusquedad, haciendo que Lucía tanto Eva se sobresaltaran.

      —¿Jorge? —preguntó la primera, confundida—. ¿Qué te pasa? ¿Por qué...

     —No puedes casarte con ese maldito hijo de-

     —Llamaré a Nicolás —dijo Eva, caminando fuera de la habitación. Mas Jorge se mantenía quieto, aún observándola completamente...

     Con aquel blanco vestido, un vestido de novia.

     —Sal de aquí, Jorge. No sé de qué hablas, sólo...

     —Me gustas, Lucía —murmuró, mientras se acercaba—. Desde que te vi...

     —No —Lo detuvo—. No sigas.

     —Lucía... yo... yo te amo —Se apresuró en decir.

     —Yo a ti no.

     —Lucía...

     —Hoy es el día de mi boda —Suspiró—. Me casaré con quien amo, Jorge. Por favor, no hagas esto. No te hagas esto —Lo observó a los ojos—. No me amas, no te engañes.

      Pero él hacía oídos sordos.

      —Vámonos, escapemos de aquí. Seamos felices nosotr-

      —No.

      —¡Tienes que obedecerme!

    Ella parpadeó, y luego frunció el ceño.

      —Sueña con que lo haga.

     Enojado, Jorge en un rápido movimiento la tomó del brazo y ejerció un fuerte agarre.

      —¡Es una orden!

Vendida A Un Playboy © | Libro 1&2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora