Hijos de la calle (2.0)

22

- Kirishima, te ves como un estúpido -dijo Todoroki con las manos en los bolsillos junto a Kirishima, quien le sacaba fotos a Izuku en la puerta de su casa con el fin de celebrar el primer día de escuela de Midoriya.

Deku le sonreía, pero realmente se sentía incómodo, sentía que la ropa era ajustada e invasiva para su cuerpo, y se había frustrado bastante porque no lograba hacer un simple nudo de corbata. Sin embargo, no quería arruinar ese día para Kirishima, quien se había levantado un tanto más temprano de lo normal para poder prepararle un desayuno nutritivo con el fin de comenzar de buena manera el día.

Desde el interior del auto, Katsuki miraba como el pelirrojo le sacaba fotos a Deku, podía notar algo distinto en el pecoso, sentía que había algo que no estaba bien y eso lo hacía molestar. Observó como el heterocromático se dio vuelta y volvió al auto, sentándose en el puesto del piloto y cerrando la puerta tras de sí, ambos vieron como los chicos seguía hablando y ahora Kirishima se sacaba una selfie con Midoriya.

- debes cuidarlo, si no se lo van a comer vivo -dijo Todoroki con seriedad, Bakugou se rió un poco y negó con su cabeza, mirando por la ventana aún como el peliverde rechazaba sacarse otra foto, moviendo sus hombros ante la incomodidad de la ropa.

- no, tú me dijiste que le dejara hacer su vida y que yo hiciera la mía, no me fue fácil despegarme de él y no pienso hacer nada que me condene otra vez -dijo con tono sarcástico, el bicolor se giró en su asiento y miró a Katsuki de forma amenazante, señalándolo con un dedo.

- mira, mocoso, me tienes cansado con tu aire de pretensión, si tanto te importa Midoriya, no vas a dejar que le pase nada, cuando estuve en esa escuela vi como tipos se trataban de matar entre ellos, uno de ellos quedó ciego, ¿quieres eso para tu Izuku? -siseó, haciendo que el rubio le mirara y apretara su mandíbula, imaginando la simple idea de ver a Deku cubierto de sangre y luego se le pasó por la cabeza el recuerdo de esa vez que Tomura se reveló contra ellos. Katsuki cerró sus ojos al recordar al chico con su rostro lleno de sangre mientras que de su boca colgaba piel de Mirio hecha jirones.

- no -dijo, volviendo a abrir los ojos y estiró sus manos con fuerza, haciéndolas puños luego, tragando fuertemente saliva- no quiero eso para él, no lo quiero ver sufrir -susurró con timidez, apartando su mirada hacia sus manos, cubriendo su rostro con esta por unos segundos.

- mientras ese niño y tú salgan con vida de ese instituto, va a estar bien -dijo Todoroki al ver que Eijirou con Izuku venían en camino al auto. Ambos se subieron con tranquilidad, comenzando el trayecto hacia UA, pero en el momento en que Deku se sentó junto a Kacchan, le dio una mirada simple y luego clavó los esmeraldas en la ventana, dispuesto a ignorarlo lo necesario.

Contra todo pronóstico, a las 2 de la tarde fueron llamados por teléfono Todoroki y Kirishima ya que Midoriya y Bakugou habían golpeado a un tipo.

Deku miraba al piso y se mordía los labios tratando de ignorar su brazo, que a pesar de que estaba vendado le seguía doliendo y manchando las gasas con sangre, a su lado estaba el tipo de tercer año que se había agarrado a golpes con Midoriya por haber tratado de abusar de él, se encontraba amordazado y con un bozal en su boca, la cual tenía sangre seca y a su otro lado estaba Kacchan, en las mismas condiciones que el mayor de los tres, solo que tenía su mejilla con un apósito para detener el sangrado.

- realmente todos ustedes son unos bestias -dijo Aizawa, quien era encargado de la convivencia escolar de gente que había salido del experimento, estaba parado al frente de ellos, mirando con completa decepción a los tres.- ¿con qué fin actúan así? Sobre todo ustedes dos -dijo señalando a ambos jóvenes que estaban contenidos- espero que Midoriya sea todavía un poco más salvaje o instintivo, pero ustedes llevan un tiempo fuera, ya deberían saber controlarse, sobre todo tú -dijo mirando al de tercer año. El chico sonrió, asintiendo con su cabeza.

- no me pienso controlar, señor Aizawa -dijo con una sonrisa, ladeando una cabeza mientras lamía la sangre seca de su labios, mirando con total atención al profesor- debió haberme cooperado cuando le dije, si hubiese hecho eso, nada de esto hubiera pasado.

- cállate, Chisaki -dijo con molestia el adulto, viendo como la puerta de la enfermería se abría y entraban Todoroki, seguido de Kirishima y un señor que los jóvenes no conocían, este último cerró la puerta de la enfermería en lo que Kirishima caminaba donde Izuku y tomaba su brazo con cuidado, jadeando al notar como este estaba vendado y tembloroso.

- ¿qué fue lo que hiciste? -le dijo en un gemido, viendo las vendas y luego subiendo su carmesí mirada a la magullada cara del pecoso, quien solo miró al piso con molestia, arrugando su nariz- Midoriya, dime lo que has hecho! -le exigió con molestia, soltando su brazo con molestia.

- delicioso hijo -dijo Kai a Kirishima con una sonrisa ladina, enseñando levemente los dientes por costumbre, Bakugou escuchó eso y antes de que pudiese tirarse sobre él, Todoroki lo había detenido y el tutor del mayor se encontraba dándole un puñetazo en la mandíbula a su joven asignado. Aizawa solo se limitó a mirar, si se hubiese tratado de alumnos normales hubiese detenido ese trato, pero él sabía por experiencia propia lo indomable que podían ser alguno, por sobre todo como fue él con el padre de Eijirou los primeros meses.

- Chisaki andaba con una cortapluma dentro de la institución, siguió a Midoriya al baño y ahí lo amenazó -dijo Aizawa, mirando por la ventana en lo que escuchaba como el tutor del mayor de daba otro puletazo en el rostro del chico, Midoriya al ver como de su mandíbula voló un hilo de sangre que llegó al inmaculado piso desvió la mirada en dirección a Kacchan, quien escuchaba como Todoroki le decía algo muy bajo cerca de su rostro, haciendo gestos restrictivos con sus manos. Sin embargo, ninguno se veía molesto o nervioso, sino que ambos trataban de resolver el problema con la cabeza fría.

- comenzamos a golpearnos y luego llegó Kacchan para tratar de detenerlo, se pusieron a pelear y yo solo pensé en gritar por ayuda en una de las ventanas, le cortó la mejilla a Kacchan y luego él me cerró la ventana en el brazo -murmuró bajito el ojiverde, viendo como el peliteñido miraba a Kacchan y luego de estiraba a acariciar su mano.

- gracias por defender a mi Izuku -dijo bajito, mirando al rubio quien dejó de ponerle atención al bicolor para mirarle, miró por un par de segundos al pelirrojo y luego chasqueó su lengua, apartando su mirada hacia la puerta mientras negaba con su cabeza suavemente, esbozando molestia

- lo que sea -dijo como pudo con el bozal, volviendo a mirar a Todoroki cuando él le chasqueó los dedos y lo tomó del bozal, girándolo para que le volviese a mirar.

Deku sonrió amplio al escucharlo y luego de estiró a dejar su frente en el hombro de Kirishima, sintiéndose protegido al saber que él estaba siempre para él.