Lazos del destino © [TERMINADA]

Capítulo 35

—Tú, ni nadie nos habla así —dice levantándose el hombre cabecilla de ese llamado consejo de ancianos. Se dirige a mí, veo sus colmillos salir.

—No te atrevas Bernardo —la voz de Gideon lo saca de su ensañamiento hacia mí. La mirada triste de Gideon recae en mí, y es como si acribillaran con más fuerza mi ser, como si el dolor no tuviera un limite. Mediante sus ojos me manda mensajes que quizás en otra situación completamente distinta me hubiesen hecho lanzarme hacia él y besarlo hasta más no poder.

—Y tú, ¿qué harás? Sólo mírate. A penas puedes hablar —se burla de Gideon mientras sus colmillos se acercan a mí cuello, trato de evitarlo pero el agarre de estos tipos se vuelve más fuerte. Veo como Gideon trata de llegar a mí, pero se interponen en su camino. Dejándolo completamente inconsciente esta vez.

—Quizás él no pueda pero yo sí —espeta Adam, golpeando a la vez a Bernardo. Este sale por los aires.

—¿Cómo te atreves insensato? Esto te costará caro

Adam se dirige a mí, uno de los hombres me suelta y se interpone, Adam lo Aleja de un tajo, al tiempo que yo logro soltarme.
Adam me abraza, pero no por mucho tiempo, porque Santiago se abalanza sobre él, ya con los ojos rojos. Tiene a Adam en el suelo. Veo de soslayo que apartan a Steve de Gideon.

—Aunque decidieras ayudar a alguno de los dos sería inútil, no puedes ayudarles. —espeta con burla, Bernardo.

Ryan se ha recuperado y me ve asintiendo con la cabeza.
A Steve lo tienen sujetado. Así que sólo somos Ryan y yo...
Decido ir donde Santiago que aún tiene a Adam tomado por la garganta, asfixiándolo sin siquiera ponerle un dedo encima.

Reúno fuerzas que parecían ya una entelequia en mi cuerpo, y lo empujo fuertemente, él ni se inmuta y ríe cínicamente.
—¿Qué tratas de hacer Metzaly? —dice casi burlándose el idiota de Santiago. Se levanta dejando a Adam en el piso.
Quizá no logré moverlo con mis manos, pero al menos logré que apartara su atención de Adam, aunque no sea nada positivo hacia mí.
Doy un paso hacia atrás al ver que Santiago avanza hacia mí.

—Aún no te haré nada, —ríe de lado —Mira como matan a tu querido Gideon —toma mi quijada y la gira bruscamente hacia Gideon, un hombre lo toma del cuello ya con la intención de arrancar su cabeza, !por Dios! ¡No! Las lágrimas ya resbalan sobre mis mejillas. Una maldita impotencia llena mi cuerpo.
En un parpadear veo a Ryan abalanzarse sobre aquel tipo que tenía a Gideon.
Mi sangre corre tan rápido, mi visión comienza a ser un poco turbia !oh no! Perder la conciencia, otra vez no. Todo da vueltas, mi cabeza arde.

Narrado por Ryan

No soporto ver sufrir a mi hermana, parece inverosímil como las cosas, ¡cómo la vida! pueden cambiar en un abrir y cerrar de ojos.
Ahora me encuentro en una situación que jamás en mi vida hubiese imaginado, el simple hecho de ya no ser un humano es algo tan irreal.
Desde que me quedé prácticamente perdido en aquel bosque, me di cuenta que no había sido buena idea haberla dejado sola, pero ¿qué podía hacer? No podía llevarla a verme cazar y devorar a un animal como un troglodita. Al cabo de unas horas pude salir, y darme cuenta que alguien había estado jugando con mi mente. Steve y Adam decidieron venir conmigo en busca de Metzy, en este momento ya Adam se encuentra en el suelo y a Steve lo tiene inmóvil, y pues a Gideon bueno él, están a punto de matarlo, talvez no tenga alguna buena relación con él, pero como dije, no soporto ver sufrir a mi hermana. En un impulso me abalanzo sobre el tipo que está a punto de matar a Gideon y logro tumbarlo al suelo. Veo por el rabillo del ojo que mi hermana está forcejeando con aquel loco, y al fin logra correr hacia Gideon, todos quedan estupefactos, un tipo se interpone en su camino pero logra esquivarlo.
Un golpe me trae de vuelta hacia con quien estoy, Adam ya me ha enseñado un par de técnicas así que no dudo más y las aplico.

Al fin logro terminar con este tipo. Y al voltear veo como mi hermana sostiene a dos personas, por los aires sin siquiera tocarlos, se le ve tan furiosa, ciertamente me da terror de que le puedan hacer algo por esa persona en la que se convierte. Veo como Santiago se apresura a llegar a ella sacando un arma, pero un arma diferente a la que usan los humanos, apunta hacia Metzaly. Y decido ir hacia ella, pero antes de que pueda llegar Adam esta ahí.

—Quítate idiota, que no ves que ella es un peligro para todos —dice casi gritando Santiago —pero de igual forma si no lo haces sería un placer matarte.

Trato de llegar hacia ellos, trato de moverme pero mis pies no me responden, estoy inmovilizado completamente, giro mi cuello, que al parecer es lo único que puedo mover y con mucha dificultad, y a mi derecha está uno de los hombres que se encontraban dentro del lugar con su vista fija en mí, y con una sonrisa despectiva.