Capítulo 19

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Ya casi amanece, los primeros rayos de sol ya aparecen, saco mi mano con cuidado, pues pasó toda la noche por debajo de su cuello y me retiro unos centímetros para verla desde un mejor ángulo. Su cabello desaliñado, el subir y bajar despacio de su pecho, el sonido de un celular me hace salir de mi embelesamiento, lo visualizo rápidamente y lo silencio, pero antes de volverlo a poner eb su lugar me da yn poco de curiosidad ver si ha escrito más. Aquella vez que me enseñó aquella prosa, la verdad me gustó mucho.

Volteo mi mirada hacia donde ella yace aún dormida para asegurarme de que aún sigue dormida, pero carajo ¡no me canso de admirarla! Al ver su belleza soy consciente que cualquier mortal e inmortal podría enamorarse de la beldad que ella irradia. Le acaricio el rostro suavemente, se remueve en el mismo lugar y retiro mi tacto rápidamente.

Sigo con la curiosidad de lo que ella ha escrito, así que tomo su celular y reviso sus notas.
Tiene varios escritos. Así que abro el que más me llama la atención.

Él.
La luz de su mirada, su intrigante carácter. La luz y oscuridad que solo en él hay.

Ante mis ojos él es lo más complejo, eso me atrae.
Pero el miedo inunda mi alma, y me siento perdida, pero cuando está a mi lado encuentro el camino y me doy cuenta que es a su lado.

Busqué el amor con tal diligencia, que ahora no sé identificar si de verdad él lo es.

Ya se me es difícil eludir su calidez y frialdad con la que él enfrenta el mundo. Aún es un enigma para mi. Y siento que no tengo lo suficiente de él.

Y falta mucho para completar este rompecabezas en que se ha convertido esto. Y es que lo nuestro no tiene nombre, pero aún sin tener Etiquetas para "esto", me gusta lo que somos cuando estamos juntos.

—¿Te gustó lo que leíste? —sus palabras logran sacarme de mi meditabundo estado.
Y no sé que decir.

—Tu celular dijo "Metzy quiere que leas esto, así que tómame" —digo fingiendo la voz.

Ella da una carcajada escandalosa. Y eso me relaja, pensé que se enojaría.

De repente para de reír y su semblante se torna serio.
—Ni creas que me ha gustado que hayas tomado mi celular. Estoy muy molesta Gideon.

—Disculpa ojitos, es que no aguanté la curiosidad. Quería ver si habías vuelto a escribir para mi. Y ya veo que sí.

Ella se sonroja, se ve tan adorable y a la vez está muy molesta.
Me arrebata de un tajo su teléfono.

—No quiero que lo vuelvas a hacer. Te queda claro.

—Sí señora —pongo mi mano en señal de la que hacen los militares cuando obedecen una orden. Ella ríe pero al segundo se pone seria. —Eres bipolar ojitos.

—Ja ja ja que chistoso —se nota su entusiasmo al reír.

Le deposito un beso en los nudillos y luego uno en sus labios, queda algo sorprendida pero luego reacciona y corresponde mi beso.

—Tu alarma sonó hace unos minutos —susurro en sus labios.

—¡Qué! —se espabila —Tengo prueba, tengo que llegar temprano. —se pone en pie rápidamente y toma su celular —Gideon es tardisímo —toca su cabello y lo desordena más si es que eso  fuese posible.

—Entonces me iré a darme un baño y te vendré a recoger.

—Está bien —toma su bata de baño, y luego me ve —¿Qué dices que dijiste?

—Te vendré a recoger en un rato.

—NO

—¿Por qué no?

—Porque Lotti vendrá.

—Está bien, entonces nos vemos en la Universidad.

Ella asiente y entra al baño rápidamente.

Narrado por Metzaly.

Aún no sé si todo fue un mal sueño, si me golpeé la cabeza, no lo sé, y tampoco quiero descubrirlo ahora. Prefiero pensar en que solo han sido alucinaciones.

Al irse Gideon entro al baño, y ya ahí recuerdo que tengo tanto sin verl a Lotti, no he sabido nada de ella, como le ha ido ni nada.

Durante el agua cae sobre mí, recuerdo todo lo que pasó anoche, es como si fuese una película, es todo tan irreal, no puedo dejar de pensar en cada detalle.

Al salir de la ducha, me visto con una camisa amarilla y unos
Jeans rotos.
Mi celular suena y veo un mensaje en Whatsapp de Lotti.

M.A Lotti💓
Ya voy llegando, espero ya estés lista. Siempre llegamos tarde

Yo
Ya estoy lista, te estoy
esperando.

Guardo mi celular. Me hago una trenza de lado, improvisada y bajo corriendo las escaleras, ¡Rayos! Me doy un golpe en la frente. Sigo sin zapatos, que distraída soy,  ¿será que así fui en mi vida pasada?   Vuelvo a subir y me pongo unos Converse blancos, ni tan blancos porque aún no los lavo.
Vuelvo a bajar, y escucho ya el pitido del auto de Lotti. Así que solo agarro una manzana de la canasta que está en el centro de la mesa y salgo.

—Hola mi loca favorita, perdón, digo, mi Lotti, amiga favorita.

Ella ríe. Y entro al auto. Le doy un beso en el mejilla.

—Tanto tiempo sin hablar Lotti, dime qué has hecho —indago, tratando de sacar todo aquello que aqueja mi mente.

—Estás muy animada hoy —hace una pausa a la vez que encamina el auto hacia la universidad —Y pues, qué te digo. Ya tengo novio.

Pego un gritito de emoción—¿Steve? —digo entusiasmada. Steve es un buen chico. No hablamos tanto, pero en lo poco que hablábamos logré notar su personalidad algo extrovertida, alegre y contagiosa.

—Sí —afirma, con una sonrisa tímida — espera cómo lo sabes.

Yo sonrío algo sarcástica—Lotti es obvio, salieron juntos. Es normal mi deducción.

—Bueno, sí.

—Y cómo van, con su nueva relación

—Él... no sé. Su forma de ser conmigo. Es lo que estaba esperando, pero...

—¿Pero?

—Pero él no es del todo sincero conmigo. Eso es lo que siento, es como si me ocultara algo.

Yo me quedo meditabunda ante eso. Y más interrogantes se crean en mi mente.

Al fin llegamos a la Universidad. Nos despedimos. Y quedamos de vernos a la hora de salida para hablar.
Ambas lo necesitamos.


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Dedicado a kathy_tamariz99, que mañana 21 de Noviembre estará de cumple. ¡Felicidades!


Lazos del destino ©  [TERMINADA]  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora