Sonríe [KookJin]

-Sonríe LX-

1° de agosto.

Tal y como habían planeado, Lee los llevaría a Daegu en el auto. Al principio se había pensado en viajar en tren, pero estarían más cómodos si una persona conocida los llevaba. Lee estaba encantado en realizar el viaje así que estaba feliz de ayudarlos.

Subieron las maletas y emprendieron marcha. Eun Yeong junto con su esposo y los empleados irían en tren a Daegu para estar presentes en la boda, por lo que llegarían después que ellos.

Seok Jin terminaba de escribir algo en su cuaderno, cosa que no quería dejar ver a JungKook, y lo cerró para guardarlo en un pequeño bolso que llevaba consigo. Podía sentir la mirada de su próximo esposo intentando leer aunque sea algo pequeño de lo que tanto escribía, pero sabía en qué ángulo poner su cuaderno para que eso no sucediera. Sonreía divertido, él había suspirado por quinta vez frustrado hasta que guardó el cuaderno y le dio un pequeño beso en la mejilla.

-Todavía no es momento de que leas lo que escribo.-dijo dándole otro besito-sólo espera un poco más.

-No quiero esperar, quiero leer ahora.-JungKook en ocasiones era como un niño pequeño.

-No comas ansias, cielo. Sé paciente.

-La paciencia no es una virtud mía, bebé.-Jin rodó los ojos divertido.

-Lo sé, te conozco, tonto-dejando el bolso a un lado se sentó más cerca de él, apoyándose en su hombro y sintiendo un brazo en su cintura.

-¿Qué te gustaría lucir más? ¿Blanco o negro?

-Teniendo en cuenta que ya no soy tan puro y casto, el negro me gustaría más.-Kook lo miró arqueando una ceja.

-¿Acaso tú...? ¿Por qué nunca me dijiste sobre tus experiencias sexuales?

-Nunca preguntaste y no es un tema del que puedo hablar tan de repente ¿o sí?

-Debiste decirme quiénes ya te disfrutaron para enviar un sicario a que los incinere.

-Celosito-murmuró divertido dándole un beso en la mandíbula-y no fueron tantos, sólo una chica y un muchacho, con ambos duré pocos meses.

-Pero conmigo no, yo no te dejaré ir tan fácilmente...y además seré mejor amante que ellos.-agregó en un susurro desviando la mirada a la ventana.

Seok Jin estuvo a nada de reírse ante ese comentario, había sonado tan infantil de parte de Kook que lo había inundado una ola de ternura. Sus manos inquietas tomaron el rostro del mayor para hacerlo voltear, sus dedos acariciando suavemente la tersa mejilla. Sus miradas se conectaron hasta que cerró los ojos para besarlo en los labios sintiendo el agarre en su cintura intensificarse y empujarlo más hacia ese cuerpo cálido contra el que estaba apoyado.

-No te preocupes...-dijo al separarse-tú ya eres un muy buen amante.

~Sonríe~

JiSoo y Cho Hee salieron a recibirlos cuando llegaron. Su madre lo abrazó emocionada antes de dirigirse a JungKook y llenarlo de besos, mientras que ambos hermanos se veían. Ella aparentaba ser fuerte, pero era notoria la tristeza en su mirada. Él sonreía comprensivo, abriendo los brazos para recibirla, estrechándola con fuerza y sabiendo que ese gesto su madre lo confundiría pensando que era porque se habían extrañado y no porque algo malo ocurría.

Sintió a su hermanita aferrarse a él con fuerza, reteniendo las lágrimas y apretando su ropa. Podía sentir su dolor en ese gesto, el cuanto anhelaba que todo fuera mentira, un sueño, despertar y darse cuenta que la realidad era completamente distinta. Pero Seok Jin odiaba no poder decirle que todo estaba bien, que nada ocurriría ya.