-Sonríe XXXV-

5.4K 690 54
                                    

Habían pasado cinco días desde que salieron esa noche. JungKook había vuelto a ser el mismo con él, cada vez que podía lo jalaba hacia sus piernas y entonces lo besaba cuando nadie estaba en la cocina o la sala...o en el jardín. Lo tomaba desprevenido como siempre y entonces probaba sus labios sin vergüenza alguna.

Al menos así fue hasta hace dos días atrás en que el mayor comenzó a comportarse distante con él, encerrándose en su despacho y evitando cenar con sus padres. No le hubiera dado tanta importancia, por lo general Kook solía trabajar bastante así que no era extraño que se encerrara en su despacho a hacer planos y a contestar llamadas con las personas con las que trabajaba. Pero que lo evitara y le hablara cortante...comenzaba a preocuparle.

Así que dando punto final a esa situación, fue al despacho de JungKook y sin preguntar entró encontrándolo con una hoja más grande de lo normal y muchas líneas las cuales apenas y entendía. Kook lo miró frunciendo el ceño molesto.

-Ni siquiera tocaste la puerta.-fue lo que dijo cuándo se acercó luego de cerrar para tener mayor privacidad.

-Tenemos que hablar.-lo vio dejar sus cosas antes de echarse hacia atrás con los brazos cruzados.

-¿De qué?

-Has estado extraño en estos últimos dos días ¿Por qué?-JungKook desvió la mirada jugando con unos dedos sobre sus labios, como si pensara en una mentira creíble y al mismo tiempo quisiera decirle la verdad.

-Hablamos luego.-dijo, sus ojos fijos en la pared.

-¿Cuándo? ¿Acaso será cuando inventes una buena mentira?-no pensaba irse de ahí sin una respuesta, la necesitaba para arreglar lo que sea que hubiera pasado con Kook para distanciarse de él de esa manera.

-No, será cuando esté de ánimo para hablar. Ahora vete.-su mirada por fin se fijó en él y la molestia que vio no lo cohibió.

-Tendrás que estar de ánimo ahora porque no pienso irme de aquí-levantándose de su asiento fue hacia el mayor.-JungKook ¿Qué pasa?-en cuanto su mano viajó a la mejilla contraria, Kook la esquivó negándose al contacto.

Jin sintió una presión desagradable en el pecho.

-Vete, no quiero hablar ahora.-su mano se volvió un puño tan apretado que sus nudillos se tornaron blancos.

Apretó los labios, reprimiendo las palabras que deseaba decir para dar media vuelta y salir del despacho.

~Sonríe~

HoSeok se preguntó por qué TaeHyung llevaba evitándolo durante días. Chae Young y JiMin no sabían qué le ocurría, según su amigo evadía la pregunta cada vez que se la formulaba. Momo comenzaba a extrañarlo con el pasar de los días y le había llegado a preguntar si papá TaeTae ya no la quería como hija y por eso ya no quería verlos. Él intentaba mentirle, decirle que solamente TaeHyung estaba trabajando, pero Momo era lista y sabía que algo pasaba. Los niños solían ser muy intuitivos.

En un pequeño receso que se tomó con los niños de tres años, sacó su celular y marcó el número de Tae. Había probado con mensajes para no molestarlo tanto y esperar a que le contestara, pero él nunca lo hizo así que sintió que no le quedaba más opción. Tras el tercer tono escuchó su voz.

-Diga.

-¿Qué está pasando contigo, Kim TaeHyung? ¿Se puede saber por qué no sé nada de ti desde hace días?-mantuvo un tono bajo de voz, pero no menos molesto.

-HoSeok, estoy trabajando, preferiría...

-Yo prefiero que seas sincero y digas la razón por la cual has estado alejado de mí y Momo. Está muy triste, te extraña tanto como yo lo hago, piensa que es su culpa el que ya no vuelvas.-lo escuchó suspirar.

Sonríe [KookJin]Where stories live. Discover now