ODISEA ÁNIMA

Acto 6: Lidiar con el conflicto -Escena 02-

La multitud revoloteba, estaban impacientes. Algunos individuos en la cercanía llevaban un rato tomando His, volvían a rellenar el vaso y luego regresaban de nuevo. Se impregnó en el aire un sabor amargo, difícil de digerir.

Dentro de la investigación, parecían recurrir a diversas herramientas, prueba y error de muchas formas. Parecian estar mas lejos de una respuesta.

—Supongo que Thiyya no se ve nada hermosa en pantalla—dijo Kella mientras juntaba sus manos ocultándolas entre sus piernas. Se acomodó en su silla y continúo mirando el panorama.

—Sabes, es difícil verse bien, por mas esfuerzo y empenio que quieras demostrar en lo bien que puedas verte, al final. Bien...—sonrió Lautaro

—Pues en verdad puede serlo. En tus películas pareces una persona más alta y de un cuerpo más redondo—mencionó de forma comica.

—Eso ni quien pueda negarlo.

— No he tenido la oportunidad de decirte que espero con ansias tu nuevo film. Una adaptación de un héroe, un héroe, un dios que fue interpretado por diferentes culturas no hace mucho, parece ser que será bastante buena. Yo lo espero en verdad.

—B-bueno, eso es magnifico. Estoy seguro que no te defraudara. El director buscó información de primera mano, no es por presumir pero igual lo ayudé un poco.

Lautaro decidió ponerse de pie, hizo una mueca al sentir un hormigueo en su trasero, un dolor por permanecer sentado. Deicidió buscar un lugar en donde recargarse, puso su pie detrás apoyándose en una barda, se encontró comodo y siguió con la mirada a Kella.

— ¿En serio?

Lautaro sintió una sensación de responder lo siguiente:

—Pero igual me tomé el tiempo de leer mucho de tus artículos—comenzó a citar—. La muerte de los Guij, la sangre de la dinastía Dofur, los expedientes del pueblo Zanir. Por supuesto que han sido de grandiosa utilidad.

Kella se alegró, su expresivo rostro no se preocupaba en ocultarlo.

—Pero vaya. ¿Asi que no solo eres un actor, eh?

—Es mi profesión si— echo una vista al cielo—. Pero siempre he estado interesado en lo que se oculta mas alla de Martyr, mas alla de nuestra galaxia—regresó hacia Kella—. Y conocer historias, leyendas y acontecimientos como el de hoy, parece que esa absurda idea puede llegar a ser.

Los ojos de Kella tornaron una inocencia y admiración.

—Quizás algún dia nos encontremos en algún lugar lejano. Siempre he deseado llevar a mis padres más alla de los sistemas solares cercanos. Quiero hacerlo antes...

Los brazos de Tavin apartaban a las personas que se encontraban a su paso. Joss carecía de silencio, hallaba su longeva sonrisa hacia los ciudadanos que disponían una conversación con él. Arrojó un vistazo al joven de un rostro alargado y de unos ojos claros como un zafiro púrpura. Tenía tiempo que no le veía, se alegró de que viniera hacia él.

Joss pidió un poco de espacio a los cercanos y abrazó al joven.

—Hijo, Tavin ¿cómo has estado?— dijo con una voz agradable.

—Muy bien Joss, ¿hace cuanto tiempo? Seguro que has estado ocupado últimamente, y mucho mas con lo que ha estado pasando—comenzó a rascarse en su nuca nerviosamente.

—De seguro te lo dijo tu padre—se acercó, le miró a los ojos—. Estare ocupado, pero nunca para mi familia Tavin. Muchas veces se los repetí—suspiró y dio una palmada en el hombro a Tavin.

Tavin agachó la cabeza y dilató sus ojos.

—Lo siento.

Joss interrumpió:

—No. Tu padre prometió visitarme mas seguido y traerte con él.

Sonrió levemente y después la ocultó tras una seriedad.

—Entonces asi será.