Mi peor pesadilla

19. Simplemente perfecto

Acabo saliendo de la habitación y todos siguen mirándome… Me están poniendo nerviosa.

-Lo siento, creo que no debería haber dicho eso.- Mientras busco a Aitor con la mirada. El no está.

-Al contrario querida.- Dice la madre de Aitor- Es la primera vez que alguien le dice las verdades a mi marido. Le has sorprendido.

Ahora mismo no entiendo nada, pensaba que iban a enfadarse o a decirme algo, ¿pero por el contrario me felicitan?

-¿Dónde está Aitor?

-No te preocupes, siempre pasa lo mismo cuando se ven- Dice Em.- Ha ido a la cafetería.

-Voy para allá.

-No te lo recomiendo- Dice Javi- Es mejor dejarlo solo un momento.

-Bueno querida voy a la habitación. Seguramente mi marido estará alterado. Encantada de conocerte. Espero volver a verte.- Dice mientras se despide de mí con dos besos.

Javi recibe una llamada y se va. Genial, me he quedado sola con Em.

-¿Cómo has hecho lo que has hecho?

-No te entiendo.

-Enfrentarte a mi padre. Es la primera vez que alguien se enfrenta a él.

-¿Por qué?

-Todos le tememos. Siempre ha sido muy duro con nosotros, en especial con Aitor. Siento haberme presentado así, esperaba que la novia de Aitor fuese más su tipo.

Vaya, que forma más bonita de disculparse vamos…

-No me malinterpretes, siempre está con altas y rubias, demasiado estiradas, nunca me han caído bien sus ligues. Por el contrario tú eres bajita, guapa y simpática.  Seguro nos llevaremos bien, eres la primera novia que tiene mi hermano.

Me sonrojo.

-Gracias, pero no soy la novia de tu hermano.

-¿No?- Dice sorprendida.

-No, solo soy una amiga.

-Ahh pues perdona… Pensaba que sí. Me suenas mucho, ¿te he visto antes alguna vez?

Espero que no. Aunque según Aitor si conocía a mi hermano seguramente ella también.

-¡Ya caigo!- Dice riéndose- tú eras la del restaurante, la que no paraba de mirar a mi hermano y se escondía.

-No creo- Le digo un poco desinteresada

-Sí, si eras ¡tú! ¿Eso no fue en Granada?

-Sí, soy de allí, pero me he venido por trabajo, estoy trabajando de directora junto con tu hermano.

-Ahh ya entiendo…

Aitor viene hacia nosotras. Es hora de irme.

-Bueno Em, encantada de conocerte. Nos vamos.

-Igualmente, toma mi número, por si necesitas algo en Madrid. Lo conozco muy bien.

-Gracias.

Aitor no ha hablado nada desde que hemos bajado a coche.

-Aitor, lo siento. No pensaba que fuese así.

-No pasa nada, estoy acostumbrado.

Cuando vamos a salir del parking suena el móvil de Aitor. Se pone blanco.