-Tú sabrás, fuiste tú la que apareciste en mi puerta diciéndome cosas, y queriéndome violar. Y a mí me gustas más así.-Lo miro enfadada.

-No puede ser, dime que no fue así… -Busco corriendo mi ropa, y como no está decido irme hacia la puerta tengo que salir no puedo mirarlo más ni hablar, que vergüenza, a saber lo que le diría ayer. Además este maldito dolor no me hace ni pensar. ¡Y encima estos cojines no tapan nada! -¿Y mi ropa? Le digo intentando buscarla y salir corriendo.

-¡Joder!  Logro decir en el suelo. Me acabo de tropezar otra vez y acabo de caer. Encima boca abajo, vaya que ha podido ver todo mi trasero.

-¿Te quieres sentar y dejar de hacer el tonto?- Dice Aitor ya un poco serio- Siéntate, tómate la pastilla y luego irás a casa. Ayer cuando apareciste, toqué a tu casa y no había nadie y tú no llevabas nada…. -Lo miro preguntándole con la mirada que si era así como me había visto- Solo el vestido.

Que alivio. Pensaba que había parecido así en su casa. Definitivamente no bebo más.

-¿Y mi bolso y mi móvil?- Le miro aterrada

-Nada, no llevabas nada más ni zapatos, ni bolso, nada, solo el vestido y una borrachera increíble.- Me ruborizo.

-¿No se supone que eres responsable?- Dice riéndose.

- ¿Y tú no se supone que eres idiota?-Aitor me mira, se ríe mientras me tiende el vaso de agua con la pastilla. -Tómatelo

-Gracias.

-Anda, túmbate un rato, toma mi camiseta y póntela, voy a preparar el desayuno para que comas algo y a por más agua, estás deshidratada.

¡Joder con la resaca! Mientras se va me pongo su camiseta y me relajo en la cama. Miro hacia el reloj de la otra mesita. Las 10:00, me tumbo y empiezo a recordar un poco más.

--------------------------------------------------

Sigo bailando en la pista, y veo a Laura que viene hacia mí, me escondo de ella.

-Que pesaditaaa estaaaaaaa. Sigo saltando y bailando.

De pronto siento que alguien me coge de la cintura

-Cris, anda vamos, te llevo a casa.- Miro hacia atrás y veo a Alex.

-Que noooo. Que yo quiero estár más aquiiiii. Si me lo estoy pasando genialllll.

-No, vamos, te llevo a casa.- Alex me coge de un puñado, y me lleva. Otra vez en blanco.

-----

Aitor aparece con una bandeja, me la tiende y veo un par de magdalenas, un zumo de naranja, un café, unas pastas y unas tostadas. Lo miro.

-¿Pero cuanto te crees que como? ¿Cómo 20 personas?-Me mira y se ríe.

-No, pero yo también voy a desayunar. ¿Qué quieres de aquí?-Me señala la bandeja- Yo me cojo lo que no quieras.- ¿Qué bien me está tratando no? Miro la bandeja, que hambre…

-Vale. Me cojo las magdalenas y el zumo de naranja.- Veo que me mira atentamente. Y me ruborizo.

-¿Me puedes contar que pasó ayer?

-Pues no lo sé. Tu sabrás. Esta madrugada tocaste a mi puerta como una loca, abrí y te vi pues como te he dicho, con el vestido  y ya está. Pero olías a alcohol que echabas para atrás. Te acercaste y me besaste.

-¿Te besé?- El asiente, No puedo más, con esto he escuchado bastante, me levanto – Tengo que irme Laura debe estar preocupada.

-No te preocupes por Laura, al despertarme he ido a tu casa, y le he dicho que estabas dormida aquí, que será mejor no levantarte. Estaba enfadada…. a saber la que montaste tu ayer, gata borracha. Pero se ha ido a dormir, se le veía preocupada. Pero ha sido decirle que estabas conmigo  y se ha tranquilizado.

Mi peor pesadillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora