Cap.30

2.7K 146 7
                                    

-¿Qué es todo esto?-Preguntó Kendall con una amplia sonrisa, la cual me agradó ver. Todo mi trabajo tenía sus recompensas.-¿Es para mí?-Preguntó ahora mirándome y asentí contenta.-Muchas gracias (Tn)_____.-Me abrazó.-Gracias, gracias, gracias, eres la mejor, te lo digo de verdad.-Ahora besó suavemente mi mejilla.

-No me eches todo el mérito, Dustin me ha ayudado mucho.-Dije señalando a su amigo y ambos se estrecharon las manos. Dustin le abrazó y Kendall soltó un "Auch" por las heridas. Reí y me tomó de la mano.-Felicidades.-Completé.

...

Terminó la fiesta. Kendall se lo había pasado genial, todos le felicitaban y él me incitaba a besarlo, pero no lo haría. No delante de todo el mundo, soy una vergonzosa. Comió toda clase de cosas, y repitió dos veces de la tarta. Nos salió bastante bien. Después de eso, él y sus amigos comenzaron a beber cervezas, pero bueno, era su cumpleaños y por un mísero día no le iba a regañar. Las mujeres nos quedamos sentadas en el sofá, hablando de cotilleos o simplemente, luciendo de nuestros novios. Pero lo que más mal me supo fue cuando comenzó a abrir los regalos. Todos traían uno menos yo, me sonrojé y luego le tendría que pedir disculpas.

-¡Vaya!-Gritó emocionado.- ¡El palo de hockey verde que quería!-Parecía un simple niño.-Muchas gracias, Charlie.-Agradeció a su amigo mientras le echaba un abrazo.-¿Y esto?-Preguntó ahora sacando un nuevo regalo.- ¡Pero si es la sudadera de la tienda de golosinas!-Gritó aún más emocionado que antes. De verdad que lo veía muy infantil. Era una sudadera multicolor, de hombre, pero aún así un poco de niño. Llevaba golosinas dibujadas y por detrás, llevaba escrito su nombre.-Te luciste esta vez, Jason.-Abrazó a otro de sus amigos. 

Yo miraba como abría todos los regalos, y me preocupaba cuando los habiera abierto todos. ¿Qué le diría? Oh, Kendall, lo siento, pero se me olvidó tu regalo. Era la verdad. Pero me sabía fatal, era su cumpleaños y ni siquiera le había comprado una tarjeta de felicitación.

...

-Sí, adiós.-Alargó Kendall mientras cerraba la puerta al úlitmo invitado. Tal vez estaba un poco ebrio. Cerró la puerta y miró todo el desorden.-¿Te encuentras bien?-Me preguntó.-Apenas has hablado en todo el rato.-Asentí fingiendo una sonrisa.-¿Segura? Si es por limpiar esto, no te preocupes, lo limpiaré yo. Al fin y al cabo, ha sido mi fiesta.-Negué con la cabeza riendo. No le iba dejar limpiar todo esto solo, ya que Dustin se había emborrachado demasiado y dormía en un sofá.- ¿Qué te pasa?-Insistió de nuevo. Suspiré.

-Lo que me pasa es que no te he comprado ningún regalo, no he tenido tiempo, y me siento como una mierda.-Dije de un tirón. Abrió la boca a tope.-Lo siento, Kendall, de verdad, no tuve tiempo, mañana nos pasamos por la tienda y te compro lo que sea. Perdóname.

-Hey, hey.-Tomó mis manos divertido.-¿Es por eso?-Asentí triste.-Oh, vamos, (Tn)____, ¿Crees que me he enfadado contigo?-Negué con la cabeza mientras me acurrucaba en su pecho.-Te dije que no quería ningún regalo.-Suspiró.- ¿Y preparar todo esto no ha sido suficiente?-Miré su rostro. Me miraba con preocupación.-No voy a dejar que me compres nada. Además, tengo demasiados regalos. Y este es el más importante.-Acarició mi vientre. No pude aguantar más y derramé algunas lágriamas, ¿Por qué tenía que ser tan tierno siempre? -¿Por qué lloras?-Preguntó ahora más preocupado y se separó de mí para verme a los ojos.

-Tú me haces llorar, estúpido.-Le dije riendo y él comprendió por qué lloraba.

-Bueno, si es de felicidad puedes llorar todo lo que te apetezca, cariño.-Dijo rodeándome de nuevo en sus fuertes brazos.-Pero que no sea de tristeza, ¿Eh? Eso no te lo permito.

-Lo sé, lo sé.-Contesté sonriente. Sequé mis lágrimas y se me ocurrió una idea.-¿Sabes? Creo que tengo un regalo perfecto para ti.-Dije y me miró ahora enfadado. Había dejado muy claro que no quería ningún tipo de regalo, pero tenía que insistir en esto.-Elige el nombre del bebé.-Ahora me miró entusiasmado.

-¿En serio?-Preguntó sorprendido. Se sentó en el sofá y yo me senté en su regazo.

-En serio.-Le confirmé.-Ya sea niño o niña, lo que tú decidas. Puedes usar los que teníamos pensados o simplemente, cambiar de nombre. El caballero elige.-Dije de nuevo haciéndolo reír histéricamente de la emoción.

-Ahm... Olvídate de lo de Francis, no quiero que mi hijo tenga un nombre tan ridículo.-Por fin lo aceptó. Reí.-Si es chico... Lucas. Y si es chica, Helen.-Dijo decidido. Me gustaban esos nombres. 

-¿Segundos nombres?-Pregunté para que también los decidiera.

-Mmm...-Pensó de nuevo un poco.- Te los diré completos.-Asentí.- Lucas Jorge Schmidt Henderson y Helen Marie Schmidt Henderson.

-Perfecto, me encantan.-Sonreí.

-Tú me encantas.-Me abrazó de nuevo, juntando nuestros labios en un perfecto beso.

Criminal con sentimientos {Kendall Schmidt & tú} #CCS1Where stories live. Discover now