Cap.24

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Entré con los ojos cerrados y apretados en esa sala. Cruzaba los dedos por que Kendall estuviera bien, o que por lo menos, estuviera vivo, que su corazón hubiera soportado los daños y que siguiera latiendo. ¡Sólo tenía diecinúeve años, por el amor de Dios! Solté un suspiro, guardé mi estúpido maquillaje y acomodé mi bolso sobre mi hombro. Miré hacia la izquierda, donde había un doctor que levantó la vista al notar mi presencia. No vi a Kendall hasta que miré al otro lado. Dejé caer mi bolso y me tapé la boca con ambas manos, se veía tan mal. Estaba conectado a cientos de tubos, ajugas atravesaban su pecho con más tubos, llevaba suero en ambos brazos y tenía gasas por todas partes. Y también llevaba una mascarilla en su boca para conseguir algo de oxígeno, me quedé asustada. ¿Estaba en coma? No, no podía ser. Pero al menos me alegraba que estuviera vivo, era lo único que podía pedir.

-Oh, usted debe ser (Tn)_____ Henderson.-El médico gordinflón se levantó de su silla de oficina y me estrechó la mano.-Me acaban de pasar el informe, según esto, se encargará una vez salga de coma el paciente Kendall Schmidt.-Asentí un poco perdida. Kendall estaba en coma, todo por culpa de mi padre.- De acuerdo, firme aquí.-Trajo un bolígrafo azul del bolsillo de su bata y me lo paró para que firmara.-Y aquí también, por favor.-Repetí los mismos actos.-Gracias.

-¿C-Cómo está?-Pregunté esperando un "Bien" por respuesta, pero dudo mucho que lo diga, estando el rubio en ese estado.

-Verá, cuando vino aquí, estaba muy urgente, le teníamos que operar de esas heridas en seguida, si hubiéramos tardado cinco minutos más, hubiera muerto.-Tomé asiento, esta charla parecía larga.- La operación fue un éxito. No sabíamos como iba a estar, pero tras dos horas de quirófano, lo reanimamos y pudimos salvarle.-Suspiré aliviada.- Lo malo de todo esto, es que esta en coma.

-¿Cuándo saldrá?-Pregunté interesada.

-No lo sabemos.-El doctor entrelazó sus manos sobre su barriga.- En realidad, está en un coma extraño, puede oír y su cerebro da señales de que entiende lo que le dicen. Pero no puede hablar, ni siquiera abrir los ojos. Lo único que puede hacer es mostrar un poco de fuerza con sus manos, puede apretarlas y no apretarlas, de ahí todo el rollo de ese coma extraño. -Volví a verlo. Parecía estar más mal de lo que decía el médico.- Si quiere unos momentos a solas, puedo dejarla, diez minutos como máximo.

-Por favor.-Sugerí mientras él se levantaba de su silla. Me acerqué a Kendall, tenía los ojos cerrados. No estaba muy segura de que me escuchara, pero aún así, cogí una silla y me senté al lado de la camilla.-Kendall...

Mis ojos se aguaron, ahora lo veía todo borroso. Pero no iba a llorar de nuevo, sería la séptima vez en el día. Eran más de las diez de la noche, necesitaba un sitio para quedarme, pero tenía que estar con él. Tomé su mano.

-Kendall, perdóname.-Dije de un suspiro, conteniendo las lágrimas- He sido una estúpida, debí avisarte antes de que venían mi padre y Logan.-Agaché la cabeza para besar su mano.- Y por mi culpa, tú estás así... Sé que tal vez, no me estés escuchando, pero... Necesito que salgas de la coma, Kendall, te quiero mucho, y no soporto verte en ese estado. El doctor me ha dicho que puedes tener fuerzas en las manos. Todo ha sido mi culpa. Todo. No le hablo a nadie de mi familia, tú eres el único que me queda. Prométeme que te recuperarás...-Las lágrimas pudieron conmigo.- ¿Puedes entenderme? Hazme una señal de que me estás escuchando, por favor...-Digo ya desesperada, al ver que no puedo hacer nada si no me escucha. En ese momento, siento un apretón en mi mano, es él. El doctor tenía razón, puede escucharme. Besé su mano por segunda vez y me levanté de la silla.-Gracias. Tengo que irme, regresaré pronto... Sólo tengo diez minutos para verte, pero... Simplemente, no lo soporto.-Miré por última vez a Kendall, antes de dar el paso al doctor y salir de la sala.

Un mareo se apoderó de mi cabeza, al igual que me entraban ganas de vomitar. Corrí hacia el baño, donde regresé todo el desayuno, era lo único que había comido en todo el día. Me sentía fatal. Dolor de estómago y dolor de cabeza. Horrible día.

Criminal con sentimientos {Kendall Schmidt & tú} #CCS1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora