~06~

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LAUREN POV

-¿A ti te gusta Camila?

- Si apenas la conozco

-No necesitas conocer a alguien para que te guste

La reflexión de Normani me hizo pensar todo el trayecto hasta mi casa y cuando finalmente la morena me dejó en la puerta de mi casa le contesté. -¿Tú crees que si mañana la voy a visitar al club voy a parecer una desesperada?

- Si pero serás una desesperada adorable

Camila tenía algo que me atrapaba y mi cuerpo pedía saber más sobre ella. Por eso pensé que sería buena idea visitarla al día siguiente o mejor dicho en unas horas porque esa noche acabé llegando a casa casi a las 9.am.

CAMILA POV

Dormí como hacía meses que no dormía, tranquila. Tenía la extraña sensación de sentirme protegida, sensación que no había vuelto a sentir desde la muerte de mis padres aunque Dinah para mi era un apoyo muy grande pero no siempre podía estar por mi porque tenía una familia, hermanos a los que cuidar y algún que otro ligue que reclamaba su atención.

Al despertarme vi en la mesilla de noche una nota que supuse que sería de Dinah.

"Me tuve que ir, Regina se puso mala y mis padres tienen que trabajar. Ya me contarás como te fue con esa chica. Te quiero. Pd: Sofi ya desayunó y está en el salón viendo Mora la investigadora o la detective o algo así"

La noche anterior antes de irme a la cama, Dinah me hizo un interrogatorio porque no era lo normal verme sonreír al llegar de trabajar y menos cuando llegaba con Justin.

Era sábado y como siempre ayudaba con las tareas de la escuela a Sido, luego limpiaba la casa y si me quedaba tiempo me ponía al día con la carrera. A la universidad sólo tenía que ir para hacer los examenes y para alguna asignatura práctica, eso me permitía tener un trabajo y estudiar porque mi sueño no era servir copas hasta las tantas sino que yo quería dedicarme a la medicina.

Después de hacer todas esas tareas, llevé a Sofi a un cumpleaños en casa de una amiga donde se quedaría toda la noche. A mi eso me venía bien porque de esa forma podía trabajar sin tener que preocuparme de dejar a la niña sola en casa o peor aún, con Justin.

Aún me quedaban unas horas para ir a Templo así que decidí ir a casa, darme un baño y dedicarme un poco de tiempo a mi misma. Tenía pensado practicar con el piano, el que me había regalado mi padre cuando cumplí 10 años pero esos planes si derrumbaron cuando me encontré en el sofá a Justin borracho, con la camisa arrugada y con algún botón roto.

-¡¡Sorpresa!!

-¿Qué haces aquí?

-Soy tu novio y entro cuando me da la puta gana

-Apestas a alcohol

-Y tu a perfume barato y aquí nadie dice nada

Narrador omnisciente

Justin tiró de Camila para traerla al sofá, esta intento zafarse de su agarre pero fue en vano ya que el chico era mucho más fuerte que ella. De una forma agresiva acostó a Camila en el sofá, debajo de él y empezó a quitarle la camiseta.

-¡¡JUSTIN PARA!!

-2 semanas llevamos sin follar

-Tengo la regla hoy no puede ser

-Siempre pones la misma excusa de mierda. Veamos si mientes...

Justin desabrochó el vaquero de Camila, lo bajó hasta la altura de los tobillos de la morena y después, hizo lo mismo con su braga blanca.

-Puta falsa... No tienes la regla. Llevo sin follar días sólo porque eres una amargada de mierda. Te las has buscado, te lo dije, si no son por las buenas son por las malas.

Justin agarró por la mandíbula a Camila impidiéndole gritar o incluso llorar. Con la mano libre se quitó los vaqueros, el boxer y lo que le quedaba a Camila de su ropa. Sacó de su cartera un preservativo y se lo puso con cuidado en su miembro, paseando la punta sobre sus pliegues. Después, masajeó varias veces su miembro eréctil y lo introdujo dentro de Camila. En el salón sólo se escuchaban los gemidos de placer de Justin, Camila estaba destruída por dentro, se sentía un objeto, no sentía, nadie la acariciaba, besaba o le decía lo mucho que la quería. Las caderas de Justin se movieron más y más rápido hasta que no pudo más y acabo rendido encima de la chica.

-Toma tira esto, me voy a dar una ducha.

Justin se sacó el preservativo y se lo tiró en el sofá a Camila para que esta lo tirase a la basura. Camila no sólo cumplió sus órdenes, sino que le llevó a la ducha toallas limpias, toallas que tenía pensado usar ella para darse aquel baño relajante antes de que su novio apareciese. Cuando el rubio acabó, se vistió, le dio un beso en los labios a Camila, un beso seco sin amor sin una pizca de cariño y se marchó.

Camila se duchó, intentando olvidar lo sucedido, esperando que alguna vez él cambiase aunque sabía que era imposible, cenó algo rápido y se marchó con el uniforme ya puesto hacia el club.

Ya en el club, repitió su rutina de siempre, saludó a sus compañeras en especial a Ally y se puso a servir copas por las mesas, limpiar los lavabos que era la parte más desagradable porque la gente nunca hacía sus cosas en el lugar exacto y por último recogía vasos rotos del suelo o limpiaba las cientos de copas que estaban en el fregadero. Así hasta las 5 de la mañana como todos los días a no ser que hubiese más gente de la normal.

-Cariño, estuviste muy callada hoy ¿Te pasa algo?

-No tranquila Ally sólo estoy cansada

-¿Segura? Sea lo que sea estoy aquí ¿De acuerdo? Anda vete a casa cubro lo que te queda de turno.

-No, creo que puedo aguantar...

-Mejor, así me sirves una copa de whisky.

-¿Jauregui tú por aquí?- Ally preguntó y Camila miró a la chica de increíbles ojos esperando la respuesta.

- Pues verás, es que Templo tiene a la camarera más increíblemente hermosa del mundo, no mejor, del universo y me preguntaba si me la prestaríais un ratito.

-Vaya Jauregui siendo toda una romántica... ¿Camila sigues pensando en quedarte?












Crying in the club (CAMREN ESPAÑOL)Where stories live. Discover now