Epílogo

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Diciembre, treinta y uno de diciembre para ser exactos. El reloj de la muñeca de Kelsey marcaba las cuatro y cuarenta y cuatro y ella aún no tenía los regalos para su familia y sus amigos.

¿Se reunirán para navidad? No. Kelsey se los mandaría por correo a cada uno de ellos y la pasaría con Aaron tomando chocolate caliente en su casa. Además de una bonita fogata en el patio trasero y viejas canciones con los abuelos de el chico pelinegro.

Ahora estaban recorriendo el centro comercial juntos. Kelsey miraba un par de artesanías para su madre y su tía Teresa que venía desde Uruguay para pasar la noche buena. También venían más familiares, aquello era casi un milagro. La mayoría de las navidades sólo la pasaban la madre de Kelsey, su padre, ella, Zack y Zeus, su cachorro.

—¿Crees que les guste esto?- preguntó Kelsey tomando un par de cosas que eligió con mucho esfuerzo de su parte.

—Se ven bonitas.- Aaron se encogió de hombros. Kelsey miró el piso preocupada y mordió su labio inferior.—Kelsey, incluso si le regalas una tableta de chocolate a tu madre le encantará.- admitió. Kelsey sonrió y asintió.

Fueron a pagar sus regalos envolviéndolos. Se despidieron y salieron de la tienda charlando sobre temas equis. Hasta que Kelsey vio una tienda de mascotas. Estiró el brazo de su amigo y lo arrastró hacia allí.

—No me digas que vas a adoptar otro perro, Kelsey. ¡En tu casa hay dos!- se quejó el chico.

—¡No! Voy a comprarle un par de cosas para ellos.- sacó la lengua infantilmente.—Aunque no sería mala idea.- susurró para ella misma.

Venían cantando una canción de Drake, rapeando y haciendo miles de gallos salidos de las gargantas de los chicos. Al llegar, colocaron los regalos debajo de el gran árbol que adornaba la sala y Aaron se fue a su casa. Kelsey corrió escaleras arriba y se dio una ducha para luego elegir el atuendo que usaría hoy.

Nada formal, ni nada casual. Un sweater suelto hasta el ombligo y una falda al cuerpo negra. Unos tacones negros no tan altos acompañado de un par de pulseras. Su cabello lo dejó normal, lo secó y lo peinó.

Perfecto.

Bajó con cuidado las escaleras, el reloj de la sala marcaba las diez y cuarenta. La familia ya estaba allí, reunida charlando en la sala. No eran muchos, unos siete u ocho tal vez. Kelsey sonrió, hace mucho veía a su familia reunida. Saludó a sus tíos, primos y sobrinos. La señora Brave anunció que la cena estaba servida. Kelsey estaba a punto de marcar el número de Aaron en su móvil pero unos toques en la puerta la hicieron sonreír.

Aaron se encontraba allí parado con varias bolsas que de seguro eran regalos. Le dejó pasar, abrazando a su amigo.

O lo que le quedaba.

Sacudió la cabeza ante ese pensamiento y caminó hacia la cocina con sus amigos. Lo presentó a su familia y los recibieron gustosos.

Una cena familiar muy hogareña. La mesa llena de risas, caras sonrientes y conformes a todo. El reloj hizo un sonido, como una alarma, todos la miraron. Once y cincuenta. Thomas Brave se paró y propuso un brindis, agradeciendo a Dios todo lo bueno que les había pasado, la recuperación de Kelsey, la cena familiar, dio las gracias y todos gritaron al coro de "¡Salud!" Otros gritaban "¡Feliz año nuevo!" La familia se saludó entre si entre abrazos y sonrisas. Kelsey esperó y luego se subió a una pequeña butaca.

—¡Familia!- llamó. Todos dirigieron sus miradas hacia ella.—Antes de irnos hacia la sala, tengo un anuncio importante... ¡Voy a sacar un single!- y más gritos y felicitaciones.

Luego de ir a abrir los regalos y intercambiarlos. Kelsey salió al patio trasero para despejarse. Tomó un poco de su vaso de champaña y se acostó en una de las tumbonas a mirar las bonitas estrellas que la acompañaba.

—¿Te estás divirtiendo?- Kelsey giró la cabeza.

—¡Hey! No sabía que vendrías. ¡Debiste avisarme!- corrió a abrazarlo. Él correspondió gustoso.

—Quería darte una sorpresa.- se excusó.

—Que tierno, vamos. Siéntate.- palmeo una tumbona a su lado. Él se sentó sin protestar.

—Estás muy bonita, bueno. Siempre lo estás pero hoy exageraste.- admitió el chico. Kelsey sonrió.

—Oh basta, tú también estás muy lindo.- sonrió.

—Me enteré de que sacarás un single. Ya quiero escucharlo.- confesó.

—Serás el primero.- prometió. Un silencio, no incómodo, los inundó.

—Feliz año nuevo, Kelsey.

—Feliz año nuevo, Cameron.

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están listas para la segunda temporada?😏😏

creyeron que era otra persona la que estaba con Kelsey? Esperaban algo más?

atte: -geniall

𝘁𝗲𝗲𝗻𝗮𝗴𝗲 𝗱𝗿𝗲𝗮𝗺 » old magconDonde viven las historias. Descúbrelo ahora