Especial de San Valentín 1° Parte

2.8K 316 47
                                    

♡ Nota ♡

¡Hola, linduras! ¿Cómo andan?

Aparezco por aquí, para traerles un regalito especial: una cita con Casiano al mejor estilo PersonajexLector (por este tipo de ideas es que debería dejar de jugar otomes en el celular XD). Cada día hasta el 14 subiré un extra especial donde podrán tener una cita con cinco galanes de la novela. Lo mejor es que son libres de spoilers, así que podrán leerlos sin necesidad de haber leído Las canciones de Celestina. 

Sin más preámbulos, disfruten su cita con el gruñón:

Cuando llegaste al teatro, a eso de las ocho de la noche, Casiano ya estaba allí, esperándote junto a la gran puerta mientras un montón de personas entraban

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Cuando llegaste al teatro, a eso de las ocho de la noche, Casiano ya estaba allí, esperándote junto a la gran puerta mientras un montón de personas entraban.

—¡Perdón! ¿Llego tarde? —preguntaste haciendo un esfuerzo por recuperar el aire luego de haber corrido una cuadra entera. Gracias al Cielo, el día era un poco fresco para ser verano.

«Si hubiera sido uno de esos típicos días de verano en los que la temperatura supera los cuarenta grados ya hubieras terminado hecha manteca en el suelo» pensaste.

—No te preocupes, todavía no empieza —respondió con su usual pereza al hablar y, sin nada más, te dio una botellita de agua mineral que tenía en su mano.

—Dios, debo verme fatal —dijiste aceptando el agua a medida que intentaste acomodar tu cabello con la otra mano.

—Creo que te ves bien. Estás linda —lo oíste murmurar antes de que él levantara una mano para acomodar un metón rebelde detrás de tu oreja. Cuando levantaste la mirada, creíste ver un rubor apareciendo en sus orejas—. Será mejor que entremos, la función debe estar por comenzar.

Apenas pudiste controlar tu emoción mientras ingresaban al teatro y hasta te costaba creer estar allí con Casiano Ivanov.

Cuando notaste que el día de San Valentín se acercaba pusiste todo tu empeño en realizar algún plan con Casiano, tu compañero de clases. Pensabas que la mejor idea sería proponer algo tan casual que él no notara que era una cita. Fue entonces cuando se te ocurrió la idea de ir a este concierto de la banda de un compañero en común. Sabías que a Casiano le gustaba esta banda y no pudo decir que no cuando le dijiste que te te habías ganado un par de entradas en un sorteo. Claro que eso era una completa locura

Ahora los dos estaban sentados a pocos centímetros en un salón a oscuras con solo un posabrazo que los separara. Y aunque se suponía solo era una salida casual entre amigos no podías dejar de pensar que esto se parecía demasiado a una cita. Si tan solo Casiano también lo supiera.

Pero entonces la banda subió al escenario y comenzó a tocar.

El concierto fue espectacular, pero no podías dejar de notar la presencia de Casiano tan cerca de ti. Él parecía estar disfrutándolo y hasta mantenía una ligera sonrisa mientras veía la presentación, de donde no apartaba la vista. Tu mirada, por momentos, iba de su perfil hacia el escenario y de vuelta a él.

Tú te sabías algunas canciones y otras te las habías aprendido para la ocasión, así que, sin darte cuenta te pasaste el concierto acompañando al vocalista en voz baja.

Sin embargo, antes de que te dieras cuenta, el concierto había terminado y los dos se encaminaron hacia la salida del teatro.

—Nunca antes te había oído cantar. No lo hacés nada mal —escuchaste decir a Casiano.

—¿M-me escuchaste?—. No pudiste ocultar el rubor que explotó en tus mejillas—. Noo, qué vergüen... ¡Ashú!

—Está refrescando, deberías abrigarte —dijo Casiano y, con un grácil movimiento, se sacó su chaqueta de cuero y la dejó sobre tus brazos.

—No te preocupes, ya estoy por tomar un bus e ir directo a casa —dijiste, aún más colorada que antes. La chaqueta olía a Casiano, a menta y tabaco.

—Por favor, dejá que te lleve en la moto. Es peligroso que andes sola tan tarde y no me voy a sentir tranquilo dejándote ir así ―insistió él y terminaste aceptando.

Un momento más tarde, él te dejó en tu departamento. Cuando buscaste tus llaves para abrir la puerta, tu mano se topó con algo más dentro de tu cartera: el regalo que habías pensado darle a Casiano. Pero creíste que eras demasiado cobarde como para dárselo.

Entonces Casiano pronunció tu nombre y te giraste para verlo. Allí, en su mano, él tenía una pequeña cajita con un moño rojo.

—Espero que te guste —es todo lo que dijo.

Dentro de la cajita había un brazalete con delicados dijes plateados en forma de notas musicales y piedritas de tu color favorito. Era realmente bonito.

—No estaba seguro si era una buena idea —comenzó a decir Casiano, pasando una mano por su largo cabello rubio y con un rubor volviendo a sus orejas—. Quizás te parezca demasiado, pero...

—Me gusta, es muy lindo —exclamaste, realmente conmovida por el detalle—. Y es grandioso porque yo también te tengo un regalo.

Rápidamente buscaste el paquete que tenías escondido en tu cartera y se lo entregaste.

Con el corazón a mil, viste cómo Casiano quitaba la envoltura del obsequio.

—Me encanta. Muchas gracias —dijo con una brillante sonrisa, pero no está mirando su regalo sino a ti, y luego posó una mano sobre tu cabeza con delicadeza—. Pero si querías salir conmigo solo tenías que decírmelo.

♡ Pregunta ♡

 ¿Qué le regalarían ustedes a Casiano?

Las canciones de CelestinaWhere stories live. Discover now