Capítulo 10

1.4K 134 19
                                    





No faltaba mucho. Pronto acabaría mi estado. Pronto tendría una luz a mi vida.

¡El tiempo ha pasado volando!

Natsu había dejado de hablarme. Pues las cosas estaban tensas, corto la comunicación tan continúa entre nosotros. Algún mensaje. Alguna llamada rápida. Solo eso.

Me había dicho que tal vez podría venir a verme en esta semana.

Solo espero que todo vaya perfectamente.

Salí de mi habitación para ir a la cocina, lugar donde tenía mi nombre por todos lados. Si, ya me había adueñado de la cocina. ¿Qué esperaban de una mujer embarazada?

Me senté en la isla. Tome una manzana roja, limpiándola con una servilleta. Di el gran mordisco. El jugo de ella comenzó a escurrirme por las esquinas de mi boca.

—Eva de seguro se queda corta con la sensualidad que das, al morder la fruta prohibida.

Me giré a verlo. Estaba espectacular. Sus brazos marcados y fuertes se asomaban de aquella playera negra  sin mangas. Sus jeans de mezclilla y sus botas negras tipo militar. 

Estaba para comérselo con chocolate. Era una excelente combinación. Sublime.

—Pues te hace falta solo la pequeña hoja cubriendo tu amigo. Y esto sería el paraíso.

Soltó una carcajada. Gire para verlo de frente. Sus ojos se sorprendieron. ¿Qué?

¿Acaso tengo un moco pegado y nadie me ha dicho nada? ¡Joder!

—Creciste... Estas tan Diferente...

Lleve mis manos a mi vientre abultado, asomándose, estirando mi pobre blusa de tirantes verde olivo. Mis jeans negros pegados de maternidad, junto con mis sandalias de pata de gallo negras. Creo que nos gusta mucho el color negro.

Mi pequeña flama comenzaba a moverse. Inquieto. Creo que había reconocido la voz de su padre.

—¡Acercate! ¡Se está moviendo por tu voz!

Dio dos pasos largos hacia mí, colocó sus manos en mi vientre. Sus ojos comenzaron a cristalizarse. ¿Va a llorar?

Se tumbó de rodillas y pego sus labios en mi vientre descubierto por el.

—¡Hola flamita! ¿Cómo estás pequeñín? ¿Has sido bueno con mamá?

Como respuesta sentí como movía alguna extremidad. ¡Increíble!

—Esta feliz de tenerte cerca. Sabe perfectamente que nos haces falta. Pero sabemos tu distancia.

Me miró a los ojos. Dio un último beso a mi vientre y se levanto. Sin apartar su vista de mi. Tomo mi barbilla, levantándola. Dándome un beso bastante tierno.

—¿Como estas pequeña?

Sonreí aún con sus labios pegados en mi.

—Cansada, gorda y con un hijo tuyo dentro mío.

Sonrio.

Los chicos habían organizado una carne asada. Era un poco agobiante. Pues con el calor de la playa y la carne. Hacían que sudara muchísimo.

Natsu estaba con Laxus y Gray. Vi como fruncían el ceño.

Algo pasa.

Me acomode en el camastro. Mi bikini era de un color azul eléctrico. Acaricie mi vientre.

Vi hacia el precioso mar que tenía enfrente. Las distintas tonalidades de azul reinaban en aquel manto de agua.

No se podía ver ni un barco. Absolutamente nada.

Era un poco extraño, estar lejos de la civilización. Pero tenía algo que lo hacía fascinante.

El resto del día nos la pasamos platicando sobre cosas comunes.

Muertes, armas, venenos, emboscadas, heridas, cicatrices, sangre, enemigos caídos.

¿Ya  mencioné muertes?

Bueno, al menos, son cosas comunes en personas como yo. Personas que han sufrido y han sido traicionadas.

Personas como lo son todos los que estamos en esta isla.

—Bien, hay algo que necesito decirles.

Dijo Natsu viéndome fijamente. Todos pusimos atención.

—Mi investigación va viento en popa. Sancrow dio contra cinco grupos ocultos. Afortunadamente fue bastante rápido. Atacó directamente y no hubo  respuesta alguna de Loki. Eso quiere decir que le importa un carajo las personas que lo siguen. Bombardeamos a las cinco bases donde se encontraban dichos grupos.

Rescatamos una usb con información bastante alarmante. No solo quieren destruirnos. Quieren destruir a todo el gobierno. Aunque eso me viene valiendo madres. Están creando armas bastante... Modernas. Armas con un alto calibre. Bombas con la capacidad de desintegrar a las personas. En especial, un arma de fuego con la característica de que tu cuerpo se deshaga, es increíble su poder. Pero es muy peligroso basándome en que las utilizarán para atacarnos.

Lleve mis manos a mi vientre, tratando de protegerlo. ¿Cómo diablos fueron capaces de crear algo tan peligroso?

—Es por eso que no quiero que se muevan de aquí. No, hasta que todo termine. Exterminare cada puto miembro de Loki. Porque si no acabamos con todo. Esto continuará de por vida. Será... Como quitarle una plaga a este mundo.

Laxus vio a Natsu y él asintió.

—Señores, tengo respuesta de todos mis colegas de mi absoluta confianza. Ellos ayudarán. Esto va en grande. Zeref nunca vio más lejos que solo matar a Natsu. Pero Loki, planea no sólo asesinarnos, también desea terminar con el gobierno. Con las armas que está fabricando, podría iniciar una guerra y durar un buen rato. Por ello, requiero que Gray, Gajeel y yo. Nos vayamos con Natsu. No quedaras desprotegida Lucy. Tienes a Levy, Juvia y todo mi gremio. Nadie las tocara. Aunque sabemos que ustedes jamás se dejarían. Necesitamos darle con todo a Loki. Y para ello yo también me he adelantado.

Mire asombrada lo que tenía en la mano.

—Una gota de esta sustancia y mueres en una fracción de segundo. Los órganos revientan. Aumenta la presión arterial. Es por eso que tendríamos nuevo armamento. Para asegurarnos que no sobreviva ninguna cucaracha de Loki. Todas nuestras armas tendrán un poco de esto.

Señaló el frasco donde tenía aquella sustancia tan mortal. Esto es... ¡Increíble!

—Cada arma de fuego, blanca y bombas contendrá este liquido.

Ya lo hemos probado. Gracias a esas cinco bases supimos que también nosotros somos bastante peligrosos.

¡Joder! ¡Esto será una guerra en su estado puro!

Mis ultimas palabras.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora