Capítulo 18

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—India, no me muerdas los pies, me dueleeeeeeee —decía adormilada.

Agarré mi celular para ver la hora, eran las 8 a.m, miró a India y empiezo a notar que intentaba hacer un hueco en la cama, tenía la boca abierta, mierda... ¡Esta gata va a parir!, tendré que ser la partera hoy...

—Ay mi amor... ya te vas a convertir en mamá... qué ilusión, te voy a preparar un lugar cómodo para que tengas tus bebés te lo prometo —le dije mientras besaba su cabecita.

Agarré un poco de goma espuma que tenía, puse una frazada encima y deposite a India arriba de la frazada, se la veía muy nerviosa, me sentía asustada, jamás vi nacer un animal, jamás fui partera de nadie, supongo que en cualquier momento comienzan a salir los gatos que se yo.
Habían pasado dos horas desde que empezó la labor de parto y aún no daba a luz, estoy muy preocupada, no se que hacer, India cada vez está peor, se la ve apenas, sin fuerzas literalmente, Dios, ¡ya se!, ¡su veterinario!.

—Hola está hablando con el consultorio "huellitas" ¿que desea?.

—Hola buen día, mi gata está por dar a luz, hace más de dos horas comenzó la labor de parto y nada, quisiera que venga el veterinario a casa...

—Me temo que será imposible, el Doctor hoy no vino, hace 3 días viajó a un Congreso, llegaba hoy pero no se presentó al trabajo...

—¡Mierda!.

—¿Como?.

—No se lo dije a usted, disculpe, ¿me podría pasar su número?.

—Anoté "...".

—Gracias hasta luego.

Mierda, no entiendo porque en el momento en que uno más necesita de alguien no hay nadie, ¡NADIEEEEE!, mejor llamó al veterinario a ver si viene, mierda... jodeme vida, ¿justo hoy?, médico de mierda que no me atiende.
Me sentía desesperada, en estos momentos quisiera aunque sea que mi madre estuviese conmigo, a veces la sangre materna es muy necesaria... pero mi realidad es otra, muy diferente a la del resto, yo estoy sola, mi gata y yo, mi pequeña familia de dos, que si no hago algo rápido dudo que se agrande.
Ya sé... Sami... claro ella podrá ayudarme, a veces no todo está perdido...

—Hola reina, ¿estás disponible?...

—Claro mi linda siempre disponible, ¿qué pasa?.

—Tengo a mi gata a punto de parir y no se que hacer, ¡por favor ayúdame!.

—Ando cerca, en 5 minutos llegó... ¡espérame!.

Sólo me quedaba esperar a ver si Sami me podía ayudar... es una buena amiga... muy buena chica, muy agradable... algo me sacó de mis pensamientos, ¿qué era?, el timbre...¡llegó!.

—¡Hola! Gracias por venir —le dije y la abrace.

—De nada corazón, tranquila... veremos que hacer ¿está bien?, vamos a ver a la gata...

Nos dirigimos a donde se encontraba mi India... se la veía bastante mal, Sami se acercó a ella y trató de tranquilizarla, le friccionaba la pancita y le hablaba como bebe, no es por mala... pero creo que esa no es la solución...

—Voy a hablar por teléfono con mi madre para que me pase el número del veterinario de su perra ¿está bien? —dijo con rostro serio y el ceño fruncido —yo sólo asentí con la cabeza.

La vi llamar a su madre, y luego al veterinario, wow... que bonita es... se que no es momento de andar mirándola pero debo de admitir que tiene un rostro muy angelical... la vi preocupada... como que quería decirme algo y no se animaba...

—Solé... el veterinario se fue a un Congreso parece que fue a nivel Nacional... y aún no volvió... lo siento...

—¡Mierda! El mismo Congreso en el que está el veterinario de India... no puede ser...

No aguante y me acosté al lado de mi gata a llorar sentía impotencia no podía hacer nada... sólo esperar, si fuese cirujano podría haberla operado y sacar a los bebés... pero a penas si soy una estudiante de derecho... ¿porque no me muero ya nomas?, Samira se acostó a mi lado y me abrazó... yo no podía parar de llorar... de pronto se escuchó un ruido proveniente de la puerta, el timbre... ¿quién puede ser?.

—Quédate tranquila... yo voy a atender —dijo —¿estas o no?.

—No Sami, no estoy para nadie...

Se fue a ver quien era... yo acariciaba a India y le pedía por favor que aguante... que no me dejé sola... Samira tardó bastante hasta que siento que se aproximaba y se acuesta a mi lado y me abraza... jodeme... vida jodeme... ese... ese no es su perfume...

Me doy la vuelta para ver quien era y no lo pude creer... no podía creer lo que mis ojos tenían en frente... ¿por qué justo ahora?, porque...

Entre libros y sus ojosWhere stories live. Discover now