SR.Styles.

57: «¿Esta viva? y ¡soy papá!»

Harry... ¿Dónde está?

Papá...Ayúdanos.

Lograba escuchar aquellas voces y reconocía la voz de la mujer era Liz. Pero y aquella vocecitas de niños ¿De quiénes eran?, no lograba reconocerlas.

Las voces seguían llamándolo, el trato de encontrarlos pero a su alrededor todo estaba oscuro.

Liz...le llamo pero solo obtuvo silencio, el cual fue interrumpido por llantos de bebés.

Harry despertó desorientado ¿Dónde estaba? miró a su alrededor y frunció el ceño, Conocía aquel lugar, pero ¿cómo había llegado allí? ¿Por qué estaba allí? Trato de incorporarse pero su cuerpo estaba muy pesado, aquella pesadez se hizo más profunda y sus párpados más pesados.

Cuando volvió a despertar ya tenía dominio de su cuerpo. Estaba a punto de levantarse, cuando la puerta se abrió y entró su gran amigo Niall Horan.

- Qué bueno que despiertas. Ya estaba empezando a preocuparme llevas un día entero durmiendo.

Harry miró el reloj en su muñeca y vio que marcaba la 12 de la media noche.

Pronto recordó lo que había sucedido, había intentado terminar de matar aquel maldito, pero la policía se lo había impedido. Lo cual le había enfurecido mucho más.

Solo quería matar aquel tipo, nada le importaba. Ya no tenía nada que perder. Había golpeado a dos policía, incluso había robado una de las armas de los policías que había derivado, para matar aquel hombre. Pero luego en cuestión de minutos todo se había vuelto negro.

- ¿Por qué estoy aquí? –Quiso saber.

-Estaba fuera de sí. Tuvieron que sedarte.

-¡Me largo de aquí!

-No estás en condiciones de salir.

-¿Quién dice que no? –Harry se colocó su ropa y salió de la habitación, a pesar de las protestas de su amigo.

-¡Harry! Espera no puedes irte todavía.

-¿y quién me lo va impedir?

-Espera hombre, hay alguien a quien debes ver.

-No quiero ver a nadie.

-¡Harry! La encontraron, hermano.

-Encontraron su... su cuerpo-Apenas pronunció las palabras el dolor se triplico. Aquel peso emocionar amenazaba con derrumbarlo y destruirlo más de lo que ya estaba.

-No .Ella, está bien. Alguien la dejo en la salas de emergencia ayer en la noche. Tú esposa está viva. Felicidades amigo ya eres padre de dos hermosa criaturas! ¡padre!.

Todo su cuerpo se estremeció. Su corazón se aceleró ¡viva! Liz estaba viva Y sus hijos estaban bien.

Sus hermosos ojos verdes se cristalizaron y las lágrimas rodaron por sus mejillas. Hizo un gran esfuerzo por contenerse allí mismo y no desmoronarse.

-Vamos te llevare a su habitación.

Harry entro a la habitación y un torbellino de emociones se agitaba dentro de él.

Entonces la vio estaba durmiendo plácidamente. Estaba un poco pálida, pero Niall le había asegurado que estaba en perfecto estado.

Se acercó a ella y acaricio su mejilla, quería besarla, abrazarla y decirle cuanto la amaba. Pero decidió dejarla descansar.

Algo más capto su atención.

Se acercó a las dos cunitas que estaban al lado de la camilla de su madre, lo primero que vio fueron dos mantitas, una azul y la otra rosada. Debajo de esta había dos diminutos cuerpecitos. Apenas pudo ver sus caritas y las matas de pelo castaño.