Capitulo 5

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El chirrido de llantas sonó, y los árboles dieron vueltas, un grito desgarrador escapó de mis labios y un gruñido brutal se escuchó todo después desapareció.

Estaba teniendo un placentero sueño cuando lo que sonó como martillazos me despertó. Luego apenas pude oír el sordo sonido de la tierra cubriendo mi ataúd por sobre mis gritos.

Me levante exaltada con violentos jadeos que salían de mi pecho como si hubiera corrido un maratón. Tenía una fina capa de sudor frío en la frente y las sabanas estaban desordenas entre mis piernas, había tenido un sueño extraño, uno demasiado, recordaba mis gritos y mi garganta estaba seca. Ahora que estaba despierta parecían haber sido reales. Lleve mi mano hasta mi cuello y me acaricie para que ese dolor desapareciera, pero no funcionó, lo único que recuerdo era eso, gritos que parecían agujas introduciéndose en mi garganta.

— ¿Edythe?— Abrí los ojos y los cerré inmediatamente cuando la luz me lastimo. –Está bien— La voz de Emily me dio cierta confianza y abriendo un ojo primero la mire. Estaba sentada en mi cama, llevaba una blusa azul marino, con lo que destacaba su cabello y sus ojos.

No recordaba nada y la cabeza me dolió, haciéndolo como una pulsación, quise llevar mis manos a mi cabeza pero algo pesado las detenía. Las sabanas parecían piedras, Emily se dio cuenta y me quito solo algunas.

Mire alrededor buscando encontrar algún indicio de por qué estaba sobre en mi cama y por ahora Emily estaba aquí si ella estaba aquí Carl también lo estaba.

Abrí los ojos un segundo más. Emily me observo con preocupación y Carl estaba detrás de ella. Trate de acordar que había pasado pero lo único que recordaba eran unos ojos verdes y sobre todo en mis memorias destacaba el nombre de Gareth ¿Quién era él? Porque su nombre se había quedado clavado. Recordé la escuela y cuando salimos deprisa por la camioneta ¿Hace cuanto había sucedido eso?

—Deimon nos llamo, dijo que estuviste mal— frunció el ceño y coloco su mano en mi frente— Dijo que te desmallaste.

¿Me había desmayado? Pero recuerdo a Deimon sacándonos del estacionamiento mientras el chico de ojos verdes busca algo, y cuando salimos el nos estaba mirando. Recordé como si hubiera sido una persecución por que Deimon no se había detenido ni es el semáforo. Mis uñas se enterraban a la piel del asiento y mi cabello se agitaba por la velocidad. Parecía más un sueño.

— ¿Dónde...? ¿Dónde está Deimon?—pregunte confundida.

Si aquello era cierto necesitaba respuestas. Entonces volvió aparecer, en una imagen borrosa y sin color. "Te explicare en casa" dijo. Si, el debía explicarme un par de cosas para que yo estuviera aquí. Ahora lo recordaba a la perfección, huíamos del chico de nombre Gareth, el y su grupo de hombres había llegado a la escuela y Deimon no se había detenido en observarlo, estaba nervioso, lo que parecía que el sabia quien era. Y, en vez de enfrentarlos había salido huyendo conmigo, pero mi recuerdo se queda hasta ahí ¿Cómo era que había aparecido en mi cama? ¿Cuánto tiempo paso?

—Está en su cuarto— dijo Carl— iré a llamarlo.

Y salió deprisa del cuarto, en cuanto no escuche sus pasos otros se hicieron presentes y corrían con velocidad hasta mi habitación. Rein apareció con sus ojos abiertos como platos y su pecho inflado conteniendo el aire y en cuanto entro a mi habitación su mirada se dirigió a mí.

—Hola Rein— saludo Emily cortes, Rein no parecía captar el saludo y de casi evitándolo hablo.

—Hola— respondió rápido, se acercó hasta mí haciendo que mi madre se levantará y nos dejará en nuestra burbuja–Salí del trabajo en cuanto me dijeron.

DeimonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora