Kanade Shippuden

Capítulo 34: A nosotros, los ninja.

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Kanade bajó la mirada al darse cuenta de que era el momento de que todo terminara, estaba sumamente agotada por todo lo que había hecho, pero sabía que era el momento oportuno para tomar su decisión. La azabache miró a Sasuke, quien se mantenía con la mirada sería que reflejaba rencor. Sasuke, caminó, colocándose a un lado de ella y la tomó de la muñeca, obligando a que está se alejara de Naruto y sus amigos.

— ¿Así será? —preguntó Sakura, mirándola a los ojos y ella tan solo suspiro.

Estaba confundida.

—El futuro será incierto ahora que no hay enemigos, las alianzas se romperán y nuevas guerras se formarán —explicó Sasuke, demostrando que sabía a lo que se referia.

Todos, miraron en dirección al gran sabio, sabiendo que tenían que terminar con lo que estaba ocurriendo.

—Bueno, ahora voy a regresar al otro lado —dejo en claro el sabio—, pero antes de irme quiero preguntarles algo, Sakura, Kanade, Naruto y Sasuke después de luchar contra mi madre Kaguya, ¿cambiaron sus respuestas? —les preguntó mirando a cada uno por un determinado momento.

—No... Desde siempre mi deseo fue proteger a mis amigos —comentó Naruto—. ¡Oh! Eso me recuerda, ¿Qué pasara con toda la gente hipnotizada por el Tsukuyomi infinito? ¡Debo salvarlos a todos! —le preguntó un poco desesperado.

—Deshacer ese Jutsu es algo sencillo —admitió Hagoromo—. Con el chakra de tu bestia con cola, Naruto y, el Rinnegan entero de los Uchiha, tienen que hacer el sello Ko.

— ¡Oh, que simple! —admitió Naruto acercándose a los azabaches.

Sakura, comenzó a caminar hacia el rubio para tomar su mano, pero ambos miraron a los azabaches que se mantenían todavía serios. La pelirrosa, sonrió tras lanzar un suspiro y le extendió la mano a Kanade quien con una pequeña sonrisa la sujetó con delicadeza, pero fue detenida inmediatamente por el azabache que tiró con fuerza de su muñeca para alejarla de ellos.

—Parece que todo esto no ha cambiado a excepción de Kanade, Sasuke, la respuesta que diste antes...

—Debemos aprovechar para matar a los cinco Kages que están bajo el Tsukuyomi infinito —habló Sasuke por los dos.

Naruto abrió los labios al escuchar la locura que Sasuke había dicho, quería comprender lo que ocurría por la cabeza de Sasuke, pero le era casi imposible y eso, comenzó a enojar al rubio.

— ¿Qué es lo que has dicho, Sasuke? —preguntó Kakashi, asustado de la seriedad con la que se lo estaba tomando.

—No lo voy volver a decir —habló el azabache—. En cuanto a los bijus, tomare su poder y en debido momento los destruire.

— ¿Qué es lo que harás mocoso? —gruñó Kurama, decidido a atacarlo pero antes de que impactará el Rinnegan del Uchiha ya había actuado dejando a su poder a a cada uno de los Bijus.

Todos los Bijus quedaron inmóviles luego de la mirada que el azabache le enseñó, dejándolos en un poderoso Genjutsu.

—¿Aun sigues pensando en la venganza? —preguntó Kakashi preocupado.

—Es cierto que en un tiempo sólo pensaba en ello, pero ahora quiero hacer algo diferente. Algo a lo que llamo revolución...

Todos abrieron los ojos sorprendido al ver como Sasuke sujetó la mano de Kanade, conectandola con la suya logrando un sello que al parecer sólo ellos dos conocían al igual que Hagoromo.

— ¡Chibaku tensei! —gritó.

Kanade, lanzó una fuerte patada hacia Sasuke, obligandolo a que la soltara de golpe y esta, comenzó a saltar para alejsrse lo antes posible y  así evitar más atrosidadez a pesar de que ya era demasiado tarde.